Dile al corazón que se deje de engañar, dile a tu mente que te deje volar, sin pensar en un mañana, sin creer en los que dañan, solo mirar al cielo y gritar lo que te empaña.
Dile a un corazón que deje de latir, ¿no puedes?, dile al sol que deje de quemar ¿no puedes?, dile a lo inexistente que exista, que exija un corazón, un sentimiento botado, si tu humilde razón, no comprende el sufrimiento.
Dile al corazón, que no se enamore, dime con razón que soy uno entre un millón!