"Mi pequeño problema" / Ben Drowned Jeff The Killer Y EyelessJack /

Capítulo 4

Despierto de un grito. Miro a todos lados y busco mis gafas. Me las coloco en el puente de la nariz y miro a mí alrededor. Estoy en mi cuarto. ¿Fue un sueño? No. No se sintió como un sueño. Eso fue real. ¿Pero cómo? Miro a mi izquierda y veo a los chicos en la almohada. Siguen dormidos. Salgo de la cama, bajo las escaleras y entro al baño. Me miro el tobillo y tiene una herida poco profunda que sangra un poco, me coloco una venda y me mojo la cara, me miro en el espejo. No tengo otra opción más que cuidarlos. No puedo dejar que ese idiota venga y me mate. Me seco la cara con una toalla y salgo del baño. Miro el reloj al final del pasillo y son las 3:48 am. Es tarde y yo sigo despierta. Vuelvo a mi cuarto y ellos siguen dormidos. Me acuesto boca arriba y miro el techo. Debe haber una forma de llevarlos al colegio sin que sean vistos, también ocultarlos de mi madre. De todo mundo en general.

Sigo mirando el techo por unas horas. No puedo dormir. Tengo miedo de que él se vuelva a meter en mi sueño.

[...]

La alarma suena. Me levanto, coloco mis gafas y camino a mi cómoda, saco unos vaqueros azules, una camisa de tirantes negra y una sudadera morada, junto con un conjunto de ropa interior y voy al baño. No dormí en toda la noche. Me doy una ducha rápida y me visto, cepillo mi incontrolable cabellera rojiza y lavo mis dientes, voy de nuevo a mi cuarto. Los chicos están despiertos. Bueno Ben y Eyeless lo están Jeff sigue dormido. Ellos me miran. Parecen confundidos.

-¿Dónde dejaste mi gorro?- dice Ben desesperado.

Camino hacia la mesa de noche, tomo el gorro y se lo lanzo.

-¿Qué quieren desayunar? - les pregunto un poco cansada.

Ellos se miraron un momento y después dirigen su vista a mí.

-Lo que sea está bien- dice Eyeless.

-Bien. En un rato vengo. No salgan. Despierten a Jeff, díganle que su cuchillo está en la mesa de noche.

Dicho eso me fui del cuarto y cerré la puerta. Baje las escaleras. Era miércoles mi madre ya se ha de haber ido. Ella trabaja muy temprano. Llego a la cocina. Rebusco en la alacena buscando algo para desayunar. Encuentro harina para hot-cakes. La pongo en el desayunador junto con la leche y dos huevos. Preparo la mescla en un bol (vasija, plato hondo) y comienzo a hacerlos tratando de que sean a la medida de los chicos. Los coloco en los platos más pequeños que encuentro que son casi del tamaño de los chicos y pongo los míos en otro aparte, busco unos vasos pequeños, sirvo jugo en ellos y les pongo unos popotes (pajillas). Pongo todo en una bandeja y subo las escaleras. Entro a mi cuarto. Los chicos están sentados en la cama viendo mi libreta de dibujos. Cierro la puerta un poco fuerte haciendo que ellos volteen. Creo que no se habían dado cuenta de mi presencia.

-Espero que les gusten los hot-cakes y el jugo de naranja.

Pongo una pequeña sonrisa forzada. Debí haber dormido un poco. Estoy demasiado cansada. Pongo la bandeja enfrente de ellos. Dejan la libreta y se acercan a sus platos se sientan en la bandeja y comienzan a comer. Yo agarro mi plato y hago lo mismo.

Un silencio incomodo inunda toda la habitación. Me siento rara estando con alguien a estas horas.

-Dibujas muy bien- miro a los chicos y les sonrió. No sé quién lo habrá dicho.

-Gracias- digo casi en un susurro.

[...]

Terminamos de comer recojo los platos y los pongo en el lava vajillas. Vuelvo a mi habitación y miro la hora 6:12 am. Es buena hora.

-Si quieren ducharse tendrán que hacerlo en la lava manos del baño. No voy a correr el riesgo que se ahoguen en la regadera y menos tu Ben.

Me miran por un momento. Y luego asienten. Pongo mis manos delante de ellos, suben y los llevo al baño. Los dejo en la lava manos. Tomo una toalla y corto pequeños trisitos  y los pongo en un extremo. Les acerco el jabón y en la tapita les pongo shampo.

-Cuando terminen me avisan.

Salgo del baño y me quedo parada afuera un momento. Se oye el grifo abrirse y cerrarse momentáneamente. Camino a mi cuarto. Tomo mi mochila, meto mis libros, mi tarea y unas cuantas galletas por si les da hambre en clases. Me coloco los zapatos y oigo un pequeño grito. Me sobre salto y corro al baño.

-¿Están bien?- digo preocupada.

-Sí. Ya terminamos. Puedes entrar.

Entro y los veo tienen el cabello mojado. Tomo un trozo de toalla y les seco el cabello. Ellos no hacen nada para impedírmelo. Termino de secárselos, los subo a mis manos y los llevo a mi cuarto.

-Tendrán que ir conmigo al colegio. Así que métanse a mi mochila y traten de no hacer ruido en clases.

No dicen nada. Solo entran a la mochila. Busco mis llaves, las encuentro, tomo mi mochila y mi celular. Salgo del cuarto y bajo las escaleras. Dirigiéndome a la puerta. Salgo de la casa y cierro con llave. 

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...

Espero que les guste.

Angell¬w¬