Un día nublado y lluvioso, que caía una ligera llovizna tibia, de esos días que ni los pájaros se molestan en salir, Irene había decidido salir a tomar una caminata. No había ningún transeúnte, nadie; pero en un momento, como por obra del destino, allá en lo lejos vé a un hombre apuesto que venía caminando. Al acercarse no tardó en darse cuenta que era Nicolás. Se le paró en frente y lo saludó, pero no sólo eso, sino Que lo invitó a comer a su casa, en la cual no había nadie.
Al llegar y luego de invitarlo a pasar y sentarse, ella se dirigió a la cocina con el argumento de que traería algo de beber, quedando él en el living.
Irene se apareció por detrás sin que el loo notara y lo hirió golpeándole en la cabeza con uno de los adornos dejándolo totalmente inconsciente. Ella le amordazó la boca y ató sus manos y pies.
Luego con ese mismo adorno Que había herido a Nicolás se golpeó más levemente luego de atarse los pies.Al llegar los padres se encontraron con la terrible escena. Irene y Nicolás tirados en el piso inconscientes y amordazados.
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Amor, traición y locura.
RomanceCómo una simple traición lleva una persona a la locura..