Marzo-Abril 1012Todo era rojo, rojo y blanco; como cerezas esparcidas en la nieve blanca. A través de luz del sol de la niebla beteada solamente con el añil con indigo. Había una piedra solo con el añil y acero en una superficie de marfil. A un lado en el frio suelo, acostado había un cuerpo.
Congelado, descansando en un halo de sangre.
No había sonido excepto por el vacio silencio que hacía eco alrededor de la forma, con una inocencia que tenía a sus angulos y una cara tan en paz que podría decirse que estaba durmiendo. El espectador dio tentativos pasos a travez del piso como hielo quebrado mirando hacia abajo a los exquisitos rasgos del extraño; piel nacarada, labios palidos como escamas delicadas que caían en el aire.
Miraba el charco rubí, flotando abstentado en la superficie, el observador pudo finalmente hacerlo, saco una de sus manos para tomar una de las palmas.Plumas. Cientos de plumas
Tan pronto como el aire estaba llena de ellas, algunas grandes, otras suaves como algodon, y todo empezo a ponerse turbio mientras la cortina se tornaba más densa y las partículas más pequeñas para el espectador, haciéndole toser y vomitar. Cubrio su boca y mira hacia abajo a sus pies, ahora envueltos en sangre mientras se cubrían más y más hasta cubrir sus zapatos. En pánico, retrocedió pero se resbalo y callo en el mármol. El rojo continuaba de piso a piso, manchando su piel, y a travez de las nubes de todo su mirada cayo desesperadamente en la cara desvanecida del cuerpo y se quedo sin aliento.
Sus ojos estaban abiertos. Al menos sus pupilas se veían.
Minseok de repente se despertó, su corazón se desembocaba hacia sus costillas.
Con corta y salvaje respiración, frenéticamente volteo a sus alrededores. No estaba rojo, no piedras, no alas, pero había una cuerpo; acostado y pálido en una cama enfrente de el. Una serie de cables se dejaban ver en su translucida piel y maquinaría rondaba su cabeza.
Beep...beep...beep...
El corazón de Minseok lentamente volvio a la normalidad y su respiración se controlo, llenando sus pulmones de oxigeno que respiraba del cuarto de hospital. Las ventanas oscuras empezaban a mostrar la mañana provandole a
Minseok que era temprano, que podía irse a casa. Había una curva en su cuello y su brazo entumido pero a él no le interesaba moverlos; su mano sujetaba la nuca de luhan.Deslizo su silla más cerca y la deslizo de modo que quedará más cerca y puso su cabeza hacía atrás para dormir, seguro de que de nuevo vería la cara de Luhan antes de que sus ojos se cerraran de nuevo.
Nunca había estado enamorado antes, por lo que no sabía reconocer los efectos. Pero si gastaba horas pensando, no podía afrontar el hecho de que estaba así por alguien a quien no conocía de hace mucho y el ya no sabía que hacer. Las fases de la luna habían pasado por completo desde que el había puesto sus ojos en la estrella de oro que asomo su cabeza fuera del Mercedes esa noche. El no podía ver a nadie más en la tierra en ese momento.
El mundo podía tener relucientes rascacielos, y ciudades en ruinas, y playas ondeantes con millones de sales blancas y el solo tomaría de lugar su cuerpo para estar en la clinica a un lado de su muñeco durmiente todo el día.
Si solo hubiera un hilo de verdad en sus sueños molestos...
Si solo ese muñeco pudiera abrir sus ojos...
*
Caminar a travéz de la Universidad le había dado diferentes experiencias.En donde la gente solía decir su nombre entre murmullos, llenándose de coraje para hablarle y preguntarle sobre Luhan, hasta para seguirlo alrededor del campus y abordarlo para un autografo, ahora todo había cambiado de cierto modo. Esos murmullos se volvieron en palabras que ni saludaban, que lo miraban pasar y lo evitaban a propósito. Minseok trato de no pensar mucho en eso, pero la verdad era difícil de ignorar.
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Supernova (Xiuhan) [en español]
FanfictionDescripción: Había dos eras en la vida de Minseok; PreLuhan y Post-Luhan- y en el momento que las dos eras colisionaron fue el giro que alineo cada instante de su existencia. 《Hasta el fin.》 Autora: apennyforseoul