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Capítulo uno
≫────°❅•❀•❅°────≪Si tan solo pudiera controlar mis sentimientos.
A pesar de todos mis esfuerzos, mi omega interior que había logrado controlar todo este tiempo, luchaba por tomar el poder de mi cuerpo. Todo mi ser imploraba acercarse a mi Profesor de ciencias, por lo que tuve que correr lejos de el hasta el baño.
-¿Peter?
Casi grite del susto, por un momento creí que el profesor había entrado al baño pero gracias a todos los Dioses del universo solo era mi compañera del taller de teatro, Malia.
-Malia, no se que me sucede -dije con dificultad, ya que había comenzado a tener problemas para respirar.
-Se nota, entraste al baño de chicas -se burló mientras se acercaba a mi.
En ese momento me di cuenta que salí del salón tan aturdido que entre al primer baño que me encontré, para mi suerte a nadie le molestaba que los omegas barones entraran a los baños de las chicas.
Trate de calmarme mientras Malia me daba palmaditas en los hombros para relajarme, Malia era dos años mayor que yo y era un alfa, tenía mucha suerte de encontrarla, estaba seguro de que sabría que hacer ya que ella siempre sabía encontrarle una soluciona a las cosas, una vez Ned había destrozado sin querer el vestuario de una de nuestras funciones, no pregunten como, y Malia se le ocurrió la brillante idea de usar los trozos de tela para crear diseños nuevos y agregar actores que antes no tenían papeles en la obra.
-Peter, estás entrando en celo, voy a impregnarte con mis feromonas para que no se te acerque ningún alfa, ¿está bien?, tenemos que salir de la escuela lo antes posible, y llamar a tu tía. -dijo cambiando su sonrisa a una de preocupación al acercarse lo suficiente.
Mis ojos se abrieron como platos, no me sorprendió el hecho de que estaba entrando el celo, aunque era la primera vez que me ocurría, no era de extrañar ya que hacía meses había cumplido los dieciséis años, solo que no podía entender lo estúpido y descuidado que fui de no traer conmigo los supresores, y eso que May me lo recordaba literalmente todos los días, y justamente ese dia los deje en casa porque "eran peso de sobra".
-Espera ¿tus feromonas no van empeorar mi situación? -pregunte con la voz hiperventilada.
-Un poquito, pero no te preocupes, como apenas esta iniciando solo vas a sentirse un poco peor, pero aún tendrás conciencia y podremos salir caminando. -Me explico seriamente, parecía preocupada por mi.
No me quedaba otra opción, para empezar corría un riesgo de que los demás alfas notaran mi estado y no imaginaba que cosas tratarían de hacerme, obviamente no me pasaría nada porque hay profesores y alumnos de sobra que seguramente me protegerían pero sería un desastre horrible y ademas seria super vergonzoso que todos supieran que había entrado en celo.
No estuve mucho tiempo pensando, apenas le di un asentimiento a Malia e inmediatamente pude sentir un aroma a chocolate amargo, la mayoría de los Alfas poseían escancias de ese tipo, amargas, o mentoladas, pero ninguno se comparaba con la escencia de Tony: un aroma muy fuerte a menta y plantas, como el aroma que emana un bosque luego de una fuerte tormenta.
-Ahora, camina conmigo, y actúa normal -dijo y me tomo del brazo con fuerza notando que me estaba costando estar de pie.
-Claro, porque es super normal estar en celo envuelto en la esencia de tu amiga alfa mientras caminas por ahí -dije haciéndola reír.
-Ya vas a ver que esto va a ser uno de esos recuerdos de los que hablan los viejos amigos años después mientras toman algo caliente bajo la luz de la luna en un bosque -siguió hablando mientras comenzábamos a caminar.
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El lazo Prohibido
Fanfiction𝓔𝔁𝓲𝓼𝓽𝓮𝓷 𝓼𝓮𝓬𝓻𝓮𝓽𝓻𝓸𝓼, 𝓬𝓸𝓶𝓸 𝓮𝓵 𝓪𝓶𝓸𝓻, 𝓺𝓾𝓮 𝓼𝓸𝓷 𝓲𝓶𝓹𝓸𝓼𝓲𝓫𝓵𝓮𝓼 𝓭𝓮 𝓸𝓬𝓾𝓵𝓽𝓪𝓻. Peter esta enamorado en secreto de su profesor de ciencias:Tony Stark, lo cual no sería un problema de no ser porque terminó enlazado...