falso beta | sproier.

2/2

¡! contenido sexual explícito.

el castaño podía ver como las pupilas del pelinegro se encontraban dilatadas, sus ojos estaban desenfocados y cristalizados.

—a-alfa...

la voz de spreen se escuchaba diferente, y él podía reconocer la mezcla entre el dolor y la necesidad en su tono.

—spreen p-puedo intentar llevarte a ca-

roier dejó de hablar en cuanto spreen se enderezó (con mucha dificultad) hasta terminar sentado sobre el suelo, más cerca de él.

—me d-duele.

dolía mucho.

—sé que duele, spreen. por eso déjame llevarte a-

en un rápido movimiento, spreen apoyó sus temblorosas manos sobre los hombros anchos de roier y se acercó a él para besarlo en los labios.

pero roier logró esquivarlo, por lo que el tan ansiado beso por parte del hibrido de oso no sucedió.

—spreen, no. no puedo ayudarte así.

roier intentó respirar lo menos posible por la nariz, evitando el olor a durazno intensificado de spreen y el olor acaramelado de su autolubricante. spreen estaba muy mojado y excitado, y si su lobo despertaba, roier no creía ser capaz de controlarlo.

y no quería hacerle eso a spreen, no quería aprovecharse de su vulnerabilidad.

las manos del pelinegro apretaron sus hombros y lo acercaron más a él, quedando separados por apenas unos escasos centímetros de distancia. el castaño podía ver mejor sus ojos, y no se veían como los ojos de spreen.

su lobo debió tomar el control de él.

y cuando spreen comenzó a soltar sus feromonas para despertar y atraer al lobo de roier, fue cuando el castaño confirmó que spreen ya no tenía poder alguno sobre su cuerpo.

y él tampoco lo tendría si no se apartaba rápido.

—spreen-

los brazos del hibrido de oso se envolvieron en su cuello mientras el mayor lo besaba, tomando por sorpresa al menor. los labios de spreen eran suaves, pero a la vez rápidos y bruscos, contra los suyos. las manos ajenas jugaban con su cabello castaño mientras lo acercaban más a él, besándolo con clara desesperación.

llevó sus manos a la cintura estrecha del pelinegro, apretando su agarre con fuerza. se sentía asfixiado, las feromonas y los labios de spreen no lo dejaban respirar con normalidad.

el calor comenzó a invadir su cuerpo con rapidez. los labios de spreen se sentían adictivos contra los suyos.

sintió las suaves manos ajenas sobre su agitado pecho, y de un momento a otro, el pelinegro lo empujó hacia el suelo. su espalda chocó contra el suelo sucio con algo de fuerza, pero le restó importancia.

sus ojos siguieron los movimientos rápidos del mayor, viendo al hibrido de oso sentarse sobre su regazo. el castaño suspiró pesadamente mientras sujetaba la cintura ajena con sus manos.

sus labios se juntaron una vez más en un beso descuidado, sus dientes chocaron un poco por la fuerza y rapidez de su beso.

spreen gimió contra sus labios al comenzar a mover sus caderas contra las de roier, sus movimientos circulares siendo desesperados. las manos del castaño apretaron su agarre en la cintura del pelinegro, empujándolo más hacia abajo para moldearlo contra él.

spreen se enderezó y aún moviéndose sobre él, se deshizo de su propia camiseta bajo la atenta mirada de roier. el menor humedecio sus labios al ver el torso desnudo del mayor.