Nuestro Ultimo Beso.

Prologo

Jane

No quería eso para nosotros.
Con el solo echo de Imaginarlo lejos, de tener que pasar una vida sin el... ¡No quería ni pensarlo!, tampoco tenía que ser así.
En sus ojos puede ver la tristeza. No lo hacía por querer, lo hacía por amor, amor a mi más que nada...
En ningún momento alguno de nosotros se dispuso a hablar. El ambiente se notaba tenso y el silencio se hacía cada vez más notable.

Di un suspiro, estaba cansada de todo esto.

—¿Estas seguro?— Pregunte tratando de no dejar visible el desagrado que sentía.

El me miro.
Su rostro estaba pálido, de sus ojos eran notables grandes ojeras, era la primera vez que lo veía de esa manera. Quería evitar llorar, no quería mostrarle señales de debilidad.
De alguna manera, aunque estemos en una situación crítica, quería estar fuerte para el.

El saco de su bolsillo un cigarro, lo encendió y se lo llevó a la boca. No me gustaba verlo fumar, sabia que cuando lo hacía, lo hacia para liberar la tensión  y la angustia que habían en el.

Yo suspire dándole a entender de lo cansaba que estaba de eso, sin embargo, a él no le importo.

De todas formas, en cierto modo, lo entendía.
La nicotina causa una sensación placentera en las personas y distrae a quien la consume de sensaciones desagradables.

El estaba en un momento crítico de su vida y yo no podía hacer nada para ayudarlo, solo acompañarlo. Me sentía inútil.

—¿Piensas hacer algo después de que toda esta mierda?—Se volteó hacia mi.

¿Hacer algo?
Nunca lo había pensado..
Siempre creí que nuestras vidas estarían destinadas a estar juntas, o al menos desde el día en que te conocí.

—No lo sé, Solo quiero pensar que todo esto es un maldito sueño— Exclame cansada y abrumada por todo.

La vida desde que lo conocí no ha sido fácil, siempre rodeada de peleas y problemas.
No me atrevo a decir que me arrepiento de conocerlo, por que si de eso se trata, no me arrepiento de nada.
Cada cosa que pasamos, los problemas y las peleas, todo me valdría una mierda si solo estuviera con el.

—Lamento hacerte pasar por esto, Jane—Agacho la cabeza— Termine jodiendo a la persona que más amo.

Alejándose, fue a sentarse en el banco de aquella plaza vacía.
Era media noche, estaba todo oscuro y nosotros eramos los únicos en ese lugar.

El volvió a sacar otro cigarro y volvió a repetir la rutina. Yo lo mire de lo lejos, intentando descifrarlo...
No lo entendía, realmente no lo entendia.

Me acerqué hacia el y me senté a su lado.

—Quiero acabar con todo esto, Jane—Su expresión se oscureció— No sabes lo cansado que estoy.

No respondí.
Al escuchar esas palabras sentí egoísmo de su parte. Si bien el había sufrido con esto y nunca podría ponerme en su lugar....
El hablaba como si fuera el único afectado, como si lo que yo pase no fuera nada.

—¿Estas bien?— Pregunto acabando con aquel silencio.

—Eres egoísta, ¿Sabes?— Voltee para verlo.

—¿Egoísta?— Remarcó.

—Dejas todo lo que tanto nos costó—Las lágrimas empezaron a caer de mis ojos.

El suspiro y sin más se levantó de aquel banquito.

—No es egoísta— Dijo sin mover sus ojos de los míos—,Si no elegir la soledad para no terminar con el corazón roto.