Natsu Dragneel caballero negro

La torre del cielo parte 2: La ira de un dragón

Mientras Natsu continuaba con su paso de manera irrefrenable se topo de frente con una mujer peli-rosa que portaba una katana, en algún momento fuera de este, tal vez el acorazado se ubiese tomado su tiempo para disfrutar de un combate con un enemigo que, a todas luces estaba aterrado de el  pero aun así se paraba firme frente al peli-rosa, pero hoy, la cólera que sentía era tan grande que cualquier cosa que lo separara de su objetivo lo hacía enojar más y más, se había contenido muchísimo para no matar a nadie hasta ahora, por mera decencia de que todas sus compañeras estaban presentes en la torre, pero su paciencia tenía límite

-seré muy breve, no estoy de humor, intenta detenerme y jamás respiraras nuevamente- dijo el acorazado en un tono tan frío y despreocupado que nisiquiera parecía que se lo dijese a quien estaba frente a el, nisiquiera volteó volteó mirarla cuando pasó a su lado, la mujer estaba aturdida, pero aun así, en una ataque de estupidez, o tal vez orgullo por ser ignorada de tal manera, en un rápido movimiento desenfundo su sable, sin embargo antes siquiera de que pudiese darce la vuelta para atacar a nuestro protagonista un puño cubierto por una armadura negra se balanceo a su cabeza, con tanta fuerza, que lo único que quedó de la cabeza de dicha mujer no fue más que sus sesos pegados en la pared contigua, mientras, natsu no detuvo su movimiento un segundo, sin siquiera dedicar un pensamiento a la mujer que recién había enviado al reino de los muertos, el simplemente camino por las escaleras hasta que llegó a la parte más alta, y se puso cara a cara con el peli-azul que lo miraba con seriedad desde su trono

-interrumpirse mis planes, pero al final será en vano, todos moriremos cuando Etherion sea disparado, debiste haber huido con los demás- declaró con firmeza el peli-azul

-No intebres engañarme, se de primera mano que para la activación del sistema-R se nesesita de una gran concentración de poder mágico, después de todo, no es más que una lacrima gigantesca, en su forma final- declaró el acorazado como si de un golem se tratase, ningún sentimiento a la vista mientras seguía avanzando al peli-azul

-sabes bastante del sistema-R ¿puedo saber porque?- dijo Jellal dejando su fachada y esta vez mirando con odio al acorazado

-eso dependerá de si tu puedes contestar mi pregunta, ahora se a ciencia cierta que estas infiltrado en el consejo mágico "Siegram" así que deberías saber que por todo lo que has hecho te mataría en el instante en que hubieses estado en mi rango de visión, lo único que te mantiene con vida por el momento es la siguiente pregunta que haré, escoge bien tu respuesta ¿Para que quieres activar el sistema-R y quien te dijo como hacerlo? - sentenció, inmutable, nuestro protagonista

-la razón para activar el sistema-R es para la resurrección en cuerpo del más grande mago jamás existido, quien nos llevara al paraíso y fue su propia alma la que me reveló sus misterios, habló de quien también estoy seguro es tu más grande enemigo, cazador de demonios, hablo de quien creo los demonios que tanto cazas, el temible mago oscuro Zeref- declaró con melodrama y gestos grandilocuentes el peli-azul, mientras que Natsu sólo podía sentir su ira creciendo más y más no es solo que este loco, haya herido a sus preciadas compañeras y secuestro a una de ellas, no es solo que lo manipulo para tener pase libre de él para poder poner susplanes en marcha, además de eso detrás de él había un maldito impostor que se hacía pasar por su querido hermano mayor y más aún alguien que había robado los conocimientos de este para poner en marcha el sistema-R, natsu lo había decidido en el momento en el que vio a las chicas heridas, Jellal pro to moriría, al secuestrar a Erza y manipular a los viejos amigos de esta, sabía que sería una muerte bastante lenta pero ¿Ahora? Oh por todos los demonios y dioses que existen, Natsu realmente disfrutaría de lo que tenia pensado para el mago frente a él

-Esa fue una muy mala respuesta, si hubieses dicho que gobernarnos el mundo o alguna estupidez por el estilo, tal vez todavía quedaría algo de ti cuando termine, pero ahora, créeme, tu deseo de ko haber nacido será tan grande, que esta inmensa torre que construiste, parecerá una hormiga comparado al tamaño que tendría ese anhelo si fuese físico- fue lo que declaró declaró peli-rosa cuando estaba ya frente a Jellal, este último intento atacar a Natsu, pero este nisiquiera se inmutó ante su ataque y solo procedio a cortar la distancia a una velocidad imperceptible para Jellal tomando su muñeca derecha y halando con fuerza de esta provocando que el ente brazo se separara por completo del codo con un ruido repugnante, acompañado de los gritos de dolor del peli-azul - También ya que vas a morir, creo que jugar con tu cabeza no me haría mal- declaró Natsu -Sabes... fuiste engañado, jamás podrías revivir a Zeref, sin importar que, menos con esta estúpida torre ¿sabes por qué lo se? Lo sé porque Zeref esta vivo, el fue maldecido por el dios de la vida y la muerte, Akersham, hace 700 años, maldecido con la maldición contradictoria, condenado a vivir una vida sin fin en la que todo lo que amase siempre moriría, eso le ocurrió al gran Zeref Dragneel, por intentar desesperadamente revivirme a mi, su hermano menor, Natsu Dragneel, está torre fue uno de sus muchos intentos fallidos, no puede revivir nada solo es una bomba, te utilizaron como a un trapo viejo, la persona que te manipulo nisiquiera se presentará ahora para i tebtar salvarte, porque eres escoria y jamás serás algo más que eso- declaró el acorazado mientras cauterizaba la herida de Jellal quien se retorcía de flor en el suelo, aún así el peli-azul tuvo la fuerza suficiente para mirar con odio al peli-rosa -no me crees pues bien te lo demostraré, estoy seguro que sabes  ual es el demonio más fuerte de Zeref E.N.D, esas no son más que las iniciales de mi nombre al ser revivido como un Etherias, soy Etherias Natsu Dragneel, yo soy E.N.D- explicó natsu mientras se desequilibra su armadura y entraba en un 5%de su forma Etherias, mostrando sus tatuajes que formaban el dichoso acronimo, dejando sin palabras al mago peli-azul, dándole cuenta que en verdad solo había sido manipulado, que todo lo que había hecho no valía para nada y ahora está aquí cara a cara con el peor y más poderoso demonio que jamás hubiese existido, solo, sin ayuda ni respaldo, completamente solo, en ese momento vio toda su vida frente a él, pasó en un instante, recordó cuando fue feliz junto a Erza y a los demás chicos siendo prisionero en la torre del cielo, si eran malos tiempos pero encontró gente que le quería y le apoyaba, entonces como un acto reflejo solo pudo hacer una cosa y esa fue, llorar y pedir ayuda, pero no a cualquiera