𝒰𝓃𝒶 ℱ𝓁ℴ𝓇 𝒫𝒶𝓇𝒶 ℒ𝒶 𝒪𝒸𝒶𝓈𝒾ℴ́𝓃 [Ran Haitani x Yui Komori]

6.- Jacintos amarillos

--En el lenguaje de las flores los Jacintos amarillos representan celos--

La escuela finalizaba en la academia Ryotei, y el Jóven de Marcas y cabello rosa esperaba cruzado de Brazos a un chico pelirrojo, al ver que este se acercaba con una gran sonrisa solamente lo tomó del antebrazo y lo jaló

—¿quien te crees Ayato? ¿Crees que puedes ir por ahí y divertirte con cualquiera?

El chico de lunares se Safo del agarré del mayor, a lo que a éste no le hizo mucha gracia

—no entiendo por que desconfía de mi capitán ¿Cuándo le he dado motivos?

—¡Tengo suficientes!

—no me levante la voz yo no estoy siendo grosero, en cambio usted viene a mi escuela y pone mi reputación en vergüenza

—el problema no es contigo Ayato ¿donde está Yui?

Ayato miró bastante confundido a Sanzu ¿Acaso a su capitán le gustaba Yui? No se molestó en esconder su duda

—¿por que? ¿Le gusta?

El rostro serio de Sanzu le dió a Ayato todas las respuestas, se había equivocado, el mayor le dió un golpe en la cabeza con molestia Mientras le decía que una rubia fea jamás podría gustarle

—soy más de Cabellos rojizos –dijo éste con una sonrisa orgullosa ante su gran confesión algo difícil para el, intentando tocar un mechón del cabello de Ayato, a lo que se detuvo e hizo una mueca de molestia– pero el tuyo es feo

Ayato había días en los que simplemente no entendía a Su capitán, vio a lo lejos a Yui, y el simplemente no sabía que hacer, con mucho remordimiento tomó la mano de Sanzu y empezó a Caminar hacía Yui, era su venganza por verse tan felíz junto a Ran. De todos, Ran Haitani, ¿Que tenía Haitani que no tuviera el? El era Guapo, el también tenía dinero, también era un pandillero, era amable, y siempre se esforzó en cuidarla no comprendía que había hecho mal
Sanzu se percató del enojo de Ayato al sentir cómo apretaba su mano y caminaba velozmente
Sanzu solamente se dejó llevar por el y cuando estuvieron cerca no dejo ni siquiera que Ayato saludara, el hablo:

—eres una perra mentirosa

Yui al ver a Sanzu y al escuchar lo que dijo solamente le miró sorprendida de verdad no entendía lo que pasaba, pero ya sabía que a Sanzu le gustaba Ayato, recordando una conversación incómoda que tuvo con el cuando visitaba a su novio de ese entonces

—ayato no te necesita, y si lo quieres cuidar aléjate, una mosquita muerta cómo tu no me va a estorbar, Ayato será completamente mío

—lo siento mucho Sanzu, pero llegaste tarde

Fué lo que dijo la chica decidida en ese entonces, ahora estába llena de dudas, Ayato no se veía feliz, y Sanzu se veía totalmente furioso, unos pasos y un chico irreconocible se acercó
El cambió de estilo era demasiado notorio, de un uniforme rudo de Pandillas, ahora tenía un chaleco lila y una camisa Blanca con pantalones cafés,
Era Kanato, Ayato lo reconoció al instante así que le susurró el nombre a Sanzu

—que Dramática y conmovedora escena, entiendo tanto el sentimiento de Sanzu de ser un amigo y ya

Ayato lo vió confundido y miró a Sanzu a lo que éste se volteó rápidamente y lo miró enojado

—¿me crees a mí o a tu hermano el loco?

Ayato se cruzó de brazos y lo miró ofendido, Sanzu le devolvió la mirada y así estuvieron unos minutos, Kanato y Yui sólo podían presenciar lo tonta que se veía esa escena, parecían una pareja, Ayato giró el rostro ofendido, hoy se encontraba enfadado con Yui y Sanzu, y no tenía miedo de mostrarlo, pues pronto su característica sonrisa adorable, se hizo una mueca de enojo puro mientras golpeaba el piso con su pie rápidamente

—Largate si es que estás tan molesto–dijo el mayor de cabello rosado hablando molesto–

—Jodete, me quedo si quiero

La escena ridícula pasó a ser seria con el mal humor de Ayato, pues no era nada común que el pelirrojo se enojara y menos Con su querido capitán y con su querida Yui

—Vaya, parece que alguien está cansado de ti Sanzu –dijo el Rubio de Ojos grandes sonriendo burlón –

Yui se encontraba extrañada, por que lo buscaban?

—deja de meterte mocoso, y Tu maldita perra –dijo con enojo dirigiéndose a Yui y viéndole molesto– no te bastó con Ayato, ahora vas y te metes con el mayor de los Haitani

La sonrisa burlona de Kanato Se borró, y Fue el movimiento perfecto para Sanzu, el simple hecho de que Kanato se hubiera enterado de algo que el desconocía era más que perfecto
Yui estába molesta con el, no solo la había insultado había hecho algo que perjudicaba a Ran, sin pensarlo dos veces le dió una bofetada al de cabello rosa

—deja de meterte en mi vida, no por controlar la vida de Ayato significa que realmente te quiera

La mirada asesina del mayor fué suficiente para atemorizar a la más baja, que todo el coraje que había reunido para decir esas palabras se había ido en un sólo instante

—hija de puta te voy a matar, tenlo por seguro, no eres más que una perra arrastrada queriendo dejar todo atrás, violada y sin valor, una puta más

Los ojos de Yui se cristalizaron, y con rabia intentó golpearlo, Ayato interfirio y los separó

—a golpes no llegarán a nada

La decepción la invadió, Ayato no había escuchado lo que Sanzu dijo?

—¿quien eres tú para decirme eso? Ayato literalmente estás en una pandilla

—Tu igual, lo estuviste, y lo peor fué enterarme de terceros, no te importe en lo absoluto, no confíaste en mí

Los Jacintos amarillos aparecieron, y Ayato no era la persona que usualmente se molestara y el hecho de que gritara y su Rostro se mostrara con ira total era una pésima señal
Los celos lo consumían, al darse cuenta de lo que hacía respiró profundo y miró mal a su hermano, el cuál sólo se reía

—lo lamento, Rokuhara necesita a Yui

Ayato no hizo nada más que caminar al lado contrario de todos
Sanzu no hizo nada más que seguir las indicaciones de Mikey. . .una decisión difícil para él, quería ayudar a Ayato pero mikey era su prioridad, y de nuevo los celos de Ayato crecieron, el jamás era la prioridad de Nadie, el tenía de prioridad incluso a esos hermanos que lo abandonaron, sus ojos se llenaron de lágrimas, y viendo mal a las dos personas a las que más se había entregado, es decir Sanzu y Yui, ver que el no era una prioridad para ellos era doloroso.
Aquél a quién admiraba, y adoraba como su propia familia, lo dejaba de lado por quien lo obligaba a sacar su peor versión, y Yui su Primer y Único amor ya lo había remplazado por alguien peor que él
Sanzu al notar eso lo volteó a ver

Y el no entendía que debía hacer, si ir a la ayuda de aquel que amaba o de quién adoraba, pero recordó las palabras de Ayato a Yui

"No confíaste en mí"

—¿por que quieres que el enemigo confíe en tí? ¿Y por que de todos sólo Yui?

Fué lo que preguntó en voz baja, dándole la espalda después de todo era su castigo por ser un maldito traidor y por sobretodo

Por no amarlo