Redes vemos, corazones no sabemos

Prólogo

Era aquí donde Ethan se preguntaba si se encontraba en el lugar donde soñaba estar. Ya había pasado casi dos años desde que su relación con Porsha terminó y diez meses desde que su camino se cruzó con el de Jennifer.

Las redes nunca fueron su prioridad, pero ahora era un hombre muy reconocido mundialmente y se encontraba en el canal más popular del Reino Unido, hablando de un tema del cuál no quería conversar y diciendo cosas que en su vida se imaginó que tendría que decir.

¿Era normal que los influencer se comportaran como idiotas cuando la situación lo ameritaba?

«Eso no es lo peor, tú ni siquiera deberías estar aquí», le reprochó una vocecilla y Ethan tragó con fuerza, recordando que en Seattle alguien estaba necesitando su apoyo.

—Sí, he de admitir que su relación se veía algo desastrosa —dijo el presentador y Ethan no pudo borrar la sonrisa de su rostro—. Eran dos polos opuestos, ¿cómo no nos dimos cuenta de que todo era una mentira? —Miró al publicó y todos carcajearon por lo alto—. Sabemos que Jenny ha borrado todas sus redes y ha decidido esconderse después de todo lo ocurrido, pero de casualidad ¿tienes contacto alguno con ella?

¿Qué si tenía contacto con Jenny?

Estoy embarazada.

Recordó el mensaje que le llegó hace cuatro meses y la garganta se le cerró cuando su respuesta retumbó en su cabeza.

Envíame tu número de cuenta, puedes estar segura que nada le faltará a ese bebé.

Nunca pudo redimir su error y como el cobarde que era se limitó a hacer las transferencias mensuales y a desentenderse de la situación.

—Yo creo que no —volvió a decir el presentador—, tu vida ha sido muy pacífica en los últimos meses y eso no solía ser así con Jenny en ella.

Todos rieron y se odió a sí mismo por tener que hacer lo mismo.

—No, no he vuelto a saber de ella, pero donde quiera que esté, espero que le esté yendo muy bien.

«¿De verdad no vendrás a Seattle con nosotros? Es tu hijo, Ethan, ¿no crees que deberías estar presente cuando él nazca?»

Las manos empezaron a sudarle y se preguntó cómo estaría marchando todo por allá. Su padre estaba molesto con él, por lo que no se estaba tomando la molestia de informarle nada mediante mensajes. Al final Ethan resultó ser peor que su padre biológico y no hizo más que decepcionar a Calvin y su madre.

Terminó rechazando a su hijo y todo porque no podía soportar la idea de que la madre de su primer hijo haya estado en prisión cuatro años por un crimen que ni siquiera cometió.

«Estás siendo tan injusto», volvió a reprocharle una vocecilla y Ethan se estremeció.

Jenny era una mujer maravillosa, renunciar a ella no fue algo sencillo y hasta la fecha seguía sufriendo por eso, pero... ella no era lo que la gente quería, ella nunca sería aceptada por su círculo y él jamás podría tolerar la idea de que las personas los señalaran por su horrible pasado.

Eran cuestiones con las que simplemente no podía lidiar.

—¿Te gustaría volver a reunirte con ella en algún futuro próximo? —La pregunta lo hizo sudar frío y conectó su mirada color gris con la del presentador.

—Yo...

—Ustedes se llevaban muy bien.

Tan bien que cometieron el error de enamorarse cuando se suponía que su relación no era más que una simple mentira.

—Preferiría no volver a saber nada de ella.

Era un programa en vivo, muy posiblemente su padre, su madre, su prima e incluso Jenny estarían viéndolo ahora, pero no había manera de que pudiera retractarse y borrar sus palabras.

Él no quería tener nada que ver con Jenny y el niño.

Se encargaría de que nada les faltara, económicamente siempre estaría para ellos, pero prefería hacerlo desde la distancia.

Lo menos que quería era volver a ser el foco de atención de todos los medios y sus conocidos.

ES UN PRÓLOGO TOTALMENTE NUEVO, EL LIBRO AÚN MANTIENE SU ESENCIA Y ESCENAS MEMORABLES, PERO TAMBIÉN TIENE MUCHO CONTENIDO NUEVO (+100 páginas, aproximadamente)

SE VIENE EL DRAMA QUE TODOS ESPERABAN.  

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