Un corazón que fue regalado con humildad a una narcisista que no sabe que es el amor,
fue lanzado a un rincón sin compasión.
El corazón latía con emoción llamando a la mujer que lo ignoró,
luego logró su cometido y la mujer lo miró,
no como él esperaba sino con odio y rencor,
solo lo tomó para desahogo de su enojo y frustración,
luego de insultos y golpes el corazón aun la amaba,
pero,
ella sin compasión lo lanzó de nuevo a un rincón,
donde se pudre lentamente lleno de dolor...