Eres mio

Capitulo 4

Cambios

Ya habían pasado 7 años desde que entraron a la academia ninja, Sakura era feliz junto a sus dos amigos  solo que al año siguiente de entrar a la escuela paso una tragedia en la familia de Sasuke. Ese día aún está en la memoria de la peli rosa.

Sakura caminaba por la calle en dirección de un camino el cuál conocía muy bien ya que siempre se reunía ahí con Sasuke y antes de llegar lo vio parado en el puente que unia la aldea con la del clan Uchiha. Este tenía una cara de horror mientras aferraba sus pequeñas manos al puente de madera viendo el lago que se encontraba abajo de el. Sus uñas comenzaron a rasgar la madera haciéndolo sangrar.

Sakura: Sasuke-kun....-decia preocupada-.

Ella se acercó a el haciéndolo sobresaltar y sacando un kunai que llevaba en un estuche amarrado a su pierna. Ella dió un paso hacia atrás temiendo que este la atacará.

Sakura: Sasuke-kun, ¿Que sucede? -le pregunto asustada-.

Con aún temiendo a que este la lastimara, se acercó a el y aparto el kunai con cuidado, abrazándolo al instante de estar segura.

El por su parte comenzo a llorar y a gritar con horror mientras se aferraba a ella doblando sus rodillas hasta llegar al suelo y abrazando su cuerpo sin querer que se apartará de su lado.

Ella preocupada lo abrazo de su cabeza tratando de calmar sus gritos, empezando poco a poco a acariciar sus cabellos para de alguna forma calmarlo. No sabía que estaba sucediendo ni que hacer, le dolía el pecho de verlo así. Podía ver su miedo y frustración reflejada en esos pequeños ojos negros que tantas veces vio con un ligero brillo pero en esta situación poco a poco ese brillo se fue apagando.

El pelinegro cayó desmayado después de un rato al suelo siendo apenas sostenido por sus delgados brazos haciéndola caer de sentón pero abrazándolo hacia ella sin soltarlo. Al mismo tiempo que llegaban unos ninjas con trajes extraños al lugar.

Anbu: niña, ¿se encuentran bien? -pregunto aquel sujeto acercándose a ella mientras que los demás exploraban el territorio Uchiha-.

Sakura: E-el...Sa-suske-k-kun.... -tartamudeo mientras sentía sus ojos llenarse de lagrimas- el, no se encuentra bien...-abrazaba con fuerza el cuerpo del niño queriendo aferrarlo a la vida- ayu-delo por-...favor-.

Ella lloraba mientras veía al anbu de cabellos grises hincado hacía ella, acercando su mano para poder acariciar sus cabellos rosas y poderla calmar un poco.

Anbu: Muy bien, déjame tomarlo para poder llevarlo al hospital y que lo revisen.

Sakura: Iré con ustedes -dijo sin soltar al Uchiha-.

Anbu: Se que estás preocupada por el, pero necesito que vayas con tus padres, ahorita estamos en una situación peligrosa y necesito que estés segura tanto tu cómo el -le dijo tratando de agarrar al niño-.

Sakura: Está bien...pero si le hace daño a Sasuke-ku...-dudo- le haré daño a usted -.

El hombre sonrió ante la mirada enojada de la niña haciendo un puchero algo lindo para el. Le indico a un compañero que llevará a la niña a su casa y se llevó al último Uchiha rápidamente al hospital.

Pasaron los días y el azabache no despertaba, por lo que había oído de los doctores había sufrido un trauma psicológico muy fuerte que hizo que se desmayara dos veces haciendo que su mente colapsara.

Los días pasaron y por fin había despertado, no faltó ni un solo día al hospital para poder ver a su amigo,  pero cuando lo vio pudo ver algo diferente en el.