Prologo

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Una noche lluviosa, en una carretera desértica se encontraba una moto con un rumbo desconocido, esta iba en línea recta y era conducida por un chico rubio con chaqueta de cuero y un casto del mismo color de su pelo que a lo mucho tenía 20 años.

En su recorrido vio una pequeña cabina telefónica asique decide darse un momento para hacer una llamada.

- Si Mamá, ya te dije que tendré cuidado

- Ya se que vas a tener cuidado, pero es mi deber preocuparme por ti Fuutarou

- Pero creo que estas exagerando, solo voy a la ciudad para ver a una amiga

- Ya se... ¿Cómo se llamaba?

- Takebayashi Mamá, te lo dije miles de veces

- Sigo sin entender porque vas a esa chica

- Es una de las pocas amigas que tenia de pequeño, solo quiero verla, además ella también quería que la visitara

- Vaya, veo que sacaste el encanto de tu padre

- ¡MAMÁ!

- No grites, que me romperás el tímpano

- Exagerada

- ¿Cómo me dijiste?

- Nada

A la distancia iba un camión de gas que iba a toda máquina, si el seguía así lo mas seguro es que provocaría un accidente, de hecho, casi se lleva por delante la moto de Fuutarou, pero la logro esquivar a tiempo y solo se fue de largo

- ¡Mierda!

- ¿Qué paso, esta todo bien?

- Si, solo un idiota que no sabe conducir, mejor me voy Mama, tengo que llegar ahí antes de que se haga aún más tarde

- Ten cuidado hijo, no se sabe que puedes encontrar por ahí

- Ya se mamá, dudo que encuentre algo, al fin y a cabo Takebayashi me dijo que es una ciudad tranquila, como sea, Adiós

El joven solo se subió a su moto y se volvió a colocar su casco, avanzo unos cuantos metros y no había señal alguna de la ciudad, "será mejor que recargue Gasolina, no me quiero quedar en medio de la nada", pensó el rubio, pero no parecía haber señales de alguna gasolinera.

O eso pensó

No sabia si era un golpe de suerte pero vio una gasolinera, pero esta tenia todas sus luces apagadas y sin embargo el letrero que indicaba si estaba operativa o no estaba encendido, "Esto ya es sospechoso, capaz solo es un fallo en el establecimiento y el letrero va a un sistema aparte", pero si eso no fuera suficiente sospecha había un coche de policía con las puertas abiertas justo en el lugar.

"Si, aquí algo va mal"

Fuutarou pensó en solo irse del lugar, pero la gasolina era necesario, veía algunas de las luces de la ciudad, pero eran muy tenues asique no sabía si llegaría justo o simplemente no llegaría. Para no correr el riesgo solo lleno el tanque, pero cuando termino escucho un fuerte ruido desde adentro del lugar y escucho como alguien gritaba por ayuda,

- ¿Qué mierda?

Puede que sea una idiotez, pero decidió entrar al establecimiento, pero no iba a entrar desarmado asique saco la navaja que le había regalado su padre hace tantos años atrás "espero recordar como empuñar esto".

El Joven abrió lentamente la puerta, pero no vio a nadie asique decidió entrar por completo, apenas entro empezó a escuchar como las estanterías se movían "este lugar debe tener un problema con las ratas" para evitar ser mordido por una tuvo que encender la linterna de su teléfono no era una gran iluminación, pero mínimo distinguía que había en las estanterías.

La Ciudad Donde Los Muertos Cobran VidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora