~1 Ketzia

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- ¿Cuánto más tendremos que esperar? -pregunte desesperada y gire la cabeza para encontrarme a mi nana parada a lado mío.

-Un poco más mi niña-dijo dulcemente.

-Hemos estado aquí por unos 30 minutos y nadie viene por nosotras-masculle.

Estábamos paradas con maletas frente a nuestros pies en el aeropuerto, se suponía que hace 30 minutos debió haber venido mi tío Mark por nosotras pero nada, ni siquiera quiso que la seguridad fuera quien nos llevara directamente a donde seria nuestra nueva casa. Ellos deberían de andar por ahí, ellos sabían que no me gustaba nada que estén siempre alrededor preguntándome si estoy bien, como que si fuera una niña de 5 años que necesita de sus cuidados, estúpidos pensé.

-Nanaaa-alargue la última vocal por el aburrimiento.

-Ket, ¿Qué pasa mi niña? -pregunto mientras ponía una mano en mis espalda y la movía en forma circular.

-Me quiero ir de aquí.

He visto alrededor de todo este tiempo a todo tipo de personas, turistas que vienen a disfrutar de las delicias que ofrece Miami, familias que se reencuentran se abrazan, lloran, ríen y se miran como que si no lo pudiesen creer que se estén mirando otra vez. Pero aquí estaba yo parada al lado de mi nana. Luego de unos 10 minutos aquí vi a un hombre de traje que agitaba su mano en forma de saludo hacia nosotras vi a mi nana ella solo sonrió y dijo:

-Es el.

Era Mark estaba aquí parada en frente de nosotras, era mi tío Mark, llego tarde no es algo recurrente en él, arquea las cejas y le dije:

-Llegas tardes ¿no? -pregunte sarcástica el solo rodo los ojos y mostro su hilera de dientes blancos.

-Lo siento, sobrina. Estaba atendiendo unos negocios a última hora-se excusó.

-Como sea, no he venido desde el otro lado del mundo a estar parada en un aeropuerto.

-Niña, no seas tan grosera-me regaño la nana, a quien la mire por el rabillo del ojo.

-Lo siento-dije en un susurro, y como las maletas estaban en nuestro medio, camine hacia un lado el hizo lo mismo y me acorralo con sus brazos.

-Te extrañe panterita-murmuro cuando terminaba de abrazarme.

-Te extrañe dulce tío-asegure y sonreí.

-Creo que debemos de ir a casa-dijo la nana quien nos miraba con tanta ternura. Reímos y asentimos.

-Claro que sí, esperen un segundo que vengan por sus cosas-aviso, pero no me había fijado que atrás suyo habían tres hombres grandes y musculosos, quienes también vestían de traje.

Ellos tomaron nuestras maletas ellos avanzaron primero, mi tío y mi nana a un extremo ya que yo iba en el medio y ellos me agarraban del brazo.


-Esta es nuestra nueva casa, nana-chille emocionada, mientras estaba parada en el centro de una casa amoblada.

-Así es Ket, esta es tu nueva casa-dijo mi tío quien estaba atrás mío junto a mi nana.

-Vaya...-dije mientras volteaba para mirarlo-, parece que alguien aquí hace las cosas bien.

-Lo hago por ti, niña-dijo y me miro.

-Nana-dije y la mire-, esto es maravilloso.

-Así es mi niña, pero deberías de agradecer-explico y sabía a qué se refería, volví mi mirada hacia mi tío y con una sonrisa en mis labios, dije: -gracias, tío.

TROUBLE | Zayn Malik.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora