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Neteyam dormía plácidamente cuando sintió un peso en el estómago que lo despertó de inmediato.

"¡Levántate!" Tuk chilló.

Él gimió. "Estoy despierto."

Tuk chilló y saltó, no sin antes golpear accidentalmente a Neteyam en la cara con la cola. Su madre lo miró desde el otro lado de la habitación y se rió.

"Probablemente deberías levantarte Neteyam. O de lo contrario ella podría hacerlo peor". Comentó su madre. Neteyam gimió de nuevo y se puso de pie. Asegurándose de que su cabello estuviera bien, miró su reflejo en el agua. Se estaba asegurando de limpiarse la cara y deshacerse del rocío que se había posado en su cara. Su madre lo mira mientras él inspecciona su rostro, tenía una pequeña sonrisa en su rostro.

"Te ves bien, Netty. Vamos a desayunar". Empujó la cabeza de Neteyam hacia un lado y él se levantó.

"Yo no estaba-"

"Ve" Su madre lo interrumpió. Él asintió y se dirigió a donde cenaron anoche. Ver a su hermano comer con Tsireya, Rolayea y su familia hizo que quisiera ir con ellos, así que lo hizo.

Deslizándose en el asiento al lado de Rolayea, agarró un pez y comenzó a copiar lo que estaban haciendo los demás. Había comido pescado como este antes, por lo que no era algo nuevo que aprender. Rolayea le dedicó una sonrisa antes de comer su pescado.

"¿Cómo dormiste?" Ella le preguntó.

"Bastante bien. Sin embargo, tuve que acostumbrarme a escuchar el océano constantemente".

"No te preocupes", dijo con seguridad. "Te acostumbrarás. Pronto ni siquiera lo notarás". Él asintió y tomó un bocado de su comida. De repente, sus ojos se iluminaron.

"¿Has probado esto?" Dijo emocionada. Levantó una pequeña bolsa llena de extrañas especias. No reconoció ninguno y negó con la cabeza. Ella agarró la comida que estaba frente a él y con entusiasmo le puso las especias, luego se la devolvió. Él lo agarró lentamente, mientras mantenía contacto visual con ella. Le dio un mordisco a su comida e inmediatamente sus ojos se abrieron como platos. El sabor explotó en su boca, y pronto estaba buscando un segundo bocado.

"¿Te gusta?" Asintió rápidamente, antes de terminar su comida. Dejó escapar una risa feliz y aplaudió.

"Lo coseché hace un par de días, luego lo dejé reposar. ¡Y ahora todos pueden disfrutarlo!" Ella extendió los brazos.

Después del desayuno, Tsireya y Rolayea llevaron a los niños Sully de regreso al agua.

"Hoy", informó Rolayea, "vais a aprender a montar a un Ilu". Hizo chasquidos y pronto, alrededor de las tres, un par de Ilus la rodearon. Tsireya agarró a Lo'ak y lo llevó hasta una de las criaturas. Rolayea puso los ojos en blanco y agarró la mano de Tuk con una mano, y agarró la mano de Neteyam con la otra. Los condujo a uno de los Ilu.

"Son criaturas pacíficas, muy diferentes a vuestro ikran". Dejó caer la mano de Tuk, manteniendo aún la mano de Neteyam a cuestas. Él se dio cuenta rápidamente, su cabeza se dirigió hacia arriba para ver su rostro. Sin embargo, ella miraba hacia otro lado y llevaba su mano al cuello del Ilu. Se paró al lado del Ilu mientras Neteyam subía.

"Esto es aburrido. Voy a buscar a Kiri". dijo Tuk, saliendo furiosa. Neteyam se rió, mirando su figura que desaparecía. Volvió a mirar a Rolayea, que también se estaba riendo. Se centraron de nuevo en el Ilu.

"Está bien. Pon las manos aquí" Ella agarró sus manos y las puso en el reposamanos en la parte delantera del ilu. Estaba tratando de no pensar en lo cerca que estaban y concentrarse en el asunto en cuestión.

"Ahora pon tus piernas aquí-" Ella ajustó donde estaban sus piernas, señalando donde tenían que estar. Movió las piernas y se aseguró de seguir sus instrucciones. No quería hacer el ridículo delante de ella.

"Ahora haz el vínculo". Agarró su trenza y unió el extremo del ilu. Inmediatamente sintió el ilu, y lo que estaba sintiendo.

"Siente su aliento. Sois uno". Ella palmeó el ilu. Luego sintió que el ilu respiraba hondo y exhalaba.

"Bien." Luego golpeó la parte trasera del ilu y despegó. Con una risita, vio a Neteyam luchar por quedarse mientras despegaba bajo el agua. Finalmente, al verlo caer, el ilu comenzó su viaje de regreso. Lo vio a lo lejos levantar las manos y gritar.

"¡No es justo!" Ella se rió y lo despidió. Una sonrisa se extendió por su rostro.

Nadando hacia atrás rápidamente, en el momento en que Neteyam estuvo lo suficientemente cerca, la salpicó tanto como pudo. Ella gritó antes de inmediatamente salpicarlo hacia atrás. Pronto se convirtió en una guerra. Ella, que tenía la ventaja de tener brazos como aletas y una cola más grande, lo dominaba. Él, todavía tratando desesperadamente de ganar, se acercó y la agarró de los brazos antes de sumergirla bajo el agua. Lo que no tomó en consideración es que ella también lo hundiría, y pronto estaban luchando entre ellos bajo el agua. Cada uno tratando de volver a la superficie, tiraban de los pies del otro hacia abajo y trataban de empujarse hacia arriba. Rolayea, agarrando su pie mientras él la empujaba hacia abajo, lo arrastró con ella. Ella le hizo una mueca antes de empujarlo más hacia abajo y usó su cuerpo para impulsarla hacia arriba.

Lucharon entre sí, ambos haciendo varios intentos de vencer al otro. Neteyam tomó la delantera en un punto y pudo empujarse más hacia arriba, pero no antes de que Rolayea envolviera sus piernas alrededor de su cintura y lo derribara. Olvidándose de soltarse, agarró sus brazos antes de que él pudiera luchar contra ella. Dejó de luchar y simplemente la miró. Se dio cuenta de lo cerca que estaban e inmediatamente se soltó, todavía algo en trance. Él sonrió, pero aprovechó su quietud y nadó rápidamente hacia el exterior. Ella salió de su trance y se dio cuenta de que él estaba ganando. Rindiéndose, nadó hasta la superficie y respiró hondo.

"No es-" Ella respiró hondo. "¡Justo!"

Neteyam, quien desesperadamente tomó aire, respondió: "¡Claro que sí! Señorita-" Tomó aliento, "¡Princesa del Agua!" Ella se burló y lo salpicó en la cara.

Una sonrisa estaba en sus rostros, y ella estaba a punto de hablar cuando escucharon voces en la distancia.

"¡Laya! ¿Dónde estás?" Saludando a su prima, Rolayea se distanció de Neteyam. Sabía que nunca escucharía el final si Tsireya encontraba a Laya luchando con uno de los nuevos chicos de la jungla. Especialmente con esa travesura que estaban haciendo sin querer.

"¡Estoy aquí! Neteyam y yo estábamos... practicando nuestra respiración bajo el agua". Laya dijo tímidamente. Neteyam miró a Rolayea antes de que ella negara con la cabeza. Él se encogió de hombros y le guiñó un ojo. Un pequeño rubor cayó sobre sus mejillas y volvió a negar con la cabeza. Una vez que Tsireya se acercó a ellos, notó a Laya avergonzada y Neteyam orgulloso.

"¿Practicando, eh? ¿Cómo os fue?" Antes de que Rolayea pudiera responder, Neteyam habló.

"Bien, ambos tenemos una capacidad pulmonar increíble". Una sonrisa cruzó su rostro. Los ojos de Rolayea se abrieron como platos cuando se dio cuenta de a qué se refería antes de levantar las manos para defenderse.

"No, nosotros no-" Su prima simplemente se rió de ellos y se alejó, volviendo con Lo'ak.

Ella se volvió hacia él y lo empujó. "Te voy a matar. ¡Será largo y doloroso, interminable y perfecto para idiotas como tú!" Dejó escapar una carcajada.

"Tú nunca harías eso. Estarías demasiado aburrida sin mí" Le guiñó un ojo. Trató de luchar contra la sonrisa que se estaba formando en su rostro y se mordió la mejilla.

"Te odio." Ella dejó escapar una pequeña risa y se alejó de él. "Me voy" Ella lo miró de nuevo. "¿Vienes?" Él la miró y una sonrisa creció en su rostro.

"Por supuesto."

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𝐈 𝐬𝐞𝐞 𝐲𝐨𝐮 | 𝐍𝐞𝐭𝐞𝐲𝐚𝐦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora