Agapē

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Su mano ha rascado la mejilla con rudeza, dejando a su paso una tenue marca rojiza mientras se pregunta. ¿Como? ¿Como consiguió enamorar a aquel enano malhumorado?

Hay una sonrisa tonta y enamoradiza adornando su rostro pecoso mientras es llevado por las calles oscuras, no sabe a dónde va ni exactamente cuánto seguirán caminando, pero eso realmente no es algo en lo que esté pensando ahora mismo.

En verdad, en lo único que puede pensar es en aquella mano, aquella suave y pequeña mano blanquecina como el papel de los exámenes (desaprobados) que tuvo la semana pasada. Es tan pequeña, y aún así se aferra con tanta fuerza a la propia.

Ajax moriría por besar su mano ahora mismo, o tal vez sus labios, o su mejilla ¿o mejor su hombro? Y que hay de su cuello? Un leve suspiro se escapa de entre sus labios, su cuello está expuesto y siendo franco consigo mismo... Lleva rato queriendo dejar una marca sobre aquella lechosa piel. Una que dure, una rojiza y hermosa marca.

...

Sus piernas han comenzado a doler, y la verdad no sabe si es por las horas que lleva siendo guiado hacia un lugar desconocido o por la (espera no notoria) erección que se aprieta contra sus pantalones. ¿Realmente una erección puede hacer que te duelan las piernas? No lo sabe, y tampoco es importante pero puede tomarlo como escusa.

No sabe como, realmente no sabe la respuesta y no piensa decir que es por estar viendo de más. Pero ah... Nunca se había fijado en los glúteos de Scara, o tal vez sí y simplemente ahora le afecta de lleno por lo necesitado que se encuentra... No piensa dar una respuesta a eso.

Ha tenido que morder su labio inferior con fuerza, reprimiendo cualquier comentario fuera de lugar que pueda hacerle terminar con más de una marca rojiza o más de un comentario desagradable por parte de su pareja.

Pero dios... Realmente tiene que aprender a controlarse.

Ha suspirado, viendo el movimiento de su trasero mientras camina, obligado a llevar una mano hasta sus pantalones tratando de acomodarlos disimuladamente (si es que eso es posible mientas caminas)

-Scara... ¿Falta mucho?

-Hmm, demasiado, ya deja de quejarte.

Ha parpadeado, saliendo de sus pensamientos libertinos, observando a su alrededor, las calles están abarrotadas y bulliciosas y sin embargo, no se había dado cuenta de este detalle. Al menos no hasta ahora.

-A donde vamos?

-Sorpresa. Ahora silencio.

....

......

Realmente necesita encargarse de algo problemático en su zona baja...

Ajax no se ha dado cuenta pero la multitud ha desaparecido, o mejor dicho ellos han desaparecido de esta, escabullendose de los ojos indeseados, caminando entre calles poco transitadas hasta llegar a un callejón, uno abandonado y desolado. Uno donde seguramente podría ocurrir un hecho poco favorable y trágico, dejando a más de una persona con los ojos llorosos y el corazón destrozado.

Y sin embargo Scara lo ve de otra forma. "Un lugar para saciar su necesidad"

Ajax seguía absorto de la realidad cuando fue empujado contra aquella pared de dudosa higiene, labios desesperados acompañados de rasguños y mordidas han dejado marca sobre su rosácea piel.

Y antes de que Ajax pueda darse el tiempo necesario para digerir todo lo que acaba de pasar sus manos han bajado automáticamente, aferrándose con rudeza a la tela de los gins ajenos, apretando y amasando sus glúteos mientras Scara gemía bajito sobre sus labios, intentando no ser escuchados.

Lástima que eso no fue lo que pasó por la mente de Ajax en cuanto le escuchó gemir.