Jikook | Morphine

🠚 JK 모르핀 - FINAL

Habían pasado 8 meses desde que Jimin le había confesado a Jungkook que era su compañero.

La reacción de Jungkook no había sido la que él esperaba, ya que, al principio, el agente pensó que se estaba burlando de él —de su manera de sentirse y de sus sueños—, después, se había levantado con apenas un poco de fuerza y se había transformado en un precioso y enorme felino negro.

Jungkook era una pantera, como él.

Jimin había estado tan impresionado en ese momento, que ni siquiera pudo esquivar el golpe que le lanzó el agente en su forma animal, por lo tanto, se quedó tirado, sin la posibilidad de perseguir al felino cuando este comenzó a huir.

Cuando pudo volver a pararse, lo primero que hizo fue intentar perseguir al agente, pero cuando salió de su casa, varios agentes de la AE45 se encontraron frente a frente con él.

Al final del día, Jungkook había sido trasladado al hospital de la AE45 mientras que, a él y su manada, les habían ofrecido una enorme recompensa por haber salvado a un elemento importante, cosa que, por supuesto, Jimin rechazó, ya que lo único que le importaba en ese momento era ver a Jungkook.

Sin embargo, tuvo que pasar un mes entero antes de que siquiera pudiera volver a saber algo de Morphine y sus actos heroicos.

Después de ello, intentó una y otra vez contactarse con el agente, e incluso visitó la agencia, en donde todos lo recibieron de buena manera, menos Jungkook, quien se excusó de estar ocupado en una misión y se negó a atenderlo.

Llegó un momento donde Jimin solo dejó de intentarlo tan duramente y se planteó regresar a su plan inicial: evitar al agente a toda costa, fingir desagrado y dejar todo en el olvido.

Pero en el proceso, por fin tuvo una oportunidad de hablar con Jungkook, disculparse y decirle la verdad; sobre que desde hace tiempo sabía que eran compañeros, pero que en ningún momento se planteó decirle o acercarse, debido a que Jimin se negaba a tener un compañero con el que prácticamente no tenía posibilidad, debido a sus diferentes estilos de vida.

En conclusión: Jimin no quería sufrir, por eso no quería querer a Jungkook.

Pero a pesar de eso, al ser compañeros naturales, la atracción siempre había sido inevitable por parte de Jimin, por lo tanto, él tendía a querer saber de Jungkook en repetidas ocasiones e incluso deseaba acercarse. Y cuando por fin había tenido la oportunidad de saber lo que Jungkook quería para su vida —a pesar de ser un agente—, no había dudado en decirle.

Evidentemente, después de la confesión completa de Jimin, Jungkook no le había dado una respuesta inmediata sobre las cosas, porque el futuro aún seguía siendo demasiado incierto para ambos, por lo tanto, lo único que pudo prometerle, fueron citas ocasionales, mensajes y videollamadas para comenzar a conocerse.

Por otro lado, Jimin le prometió paciencia y comprensión. Iba a ser un proceso probablemente largo y difícil, pero eso era lo que había, por el momento.

Por supuesto, después de eso, las misiones de Jungkook como agente continuaron, pero de repente, con el paso de los meses, las notas periodísticas ya no solo eran de los actos heroicos del agente Morphine, sino también, de las citas románticas que mantenía con un alfa "misterioso".

Sin embargo, un día, de repente, cuando nadie lo esperaba, Morphine anunció que estaba en una relación con alguien, así que esperaba que pudieran respetar su privacidad.

Al principio muchos empezaron a especular sobre quién era el alfa afortunado, pero después, al enterarse de que Morphine también era un alfa, empezaron a querer dar su opinión al respecto, debido a que todo el mundo sabía lo difícil que era ver que un alfa mantuviera una relación con otro alfa.

Jungkook, un poco harto de la situación y queriendo dejar bocas calladas, había dicho que no tenían que preocuparse por él, porque su novio no era cualquier alfa: era su compañero.

Después de eso, ya nadie más se había sentido con el derecho a comentar algo al respecto, con excepción, por supuesto, de los agentes de la AE45, quienes seguían negándose a aceptar la renuncia de Jungkook como elemento y en su lugar, le daban más trabajo.

...

—Hola. ¿Puedo pasar? —dijo Jungkook, asomando la cabeza en la oficina de Jimin. Este de inmediato despegó la vista de sus papeles y sonrió de forma radiante. Llevaba dos semanas enteras sin ver a su novio.

—Por supuesto, amor.

Jungkook sonrió, pasó y cerró la puerta, yendo directo a Jimin para poder sentarse en su regazo y besarlo.

—Te he extrañado demasiado —le dijo, abrazándolo.

—Yo también, cariño. Sentí eternas estas dos semanas —le dijo Jimin, acariciando su cintura—. ¿Cómo has estado?

—Muy bien. Por fin tengo buenas noticias —dijo Jungkook de manera dulce y se enderezó, para sacar su celular y mostrarle un par de documentos a Jimin.

Jimin tomó el celular y leyó lentamente, sintiendo de repente como todo su ser se llenaba de alegría al ver que era una carta de renuncia firmada oficialmente por la AE45, a lado de un permiso para devolverle la capacidad de reconocer a su compañero.

—¿Cómo lo lograste? —preguntó dejando el celular a un lado y atrayendo a Jungkook más cerca.

Jungkook sonrió con dulzura y diversión a la vez.

—Les dije que estoy esperando un pequeño cachorrito de pantera —soltó Jungkook con una pequeña risita inocente mientras tocaba levemente su vientre.

Jimin abrió de más sus ojos y después empezó a reír lleno de alegría mientras abrazaba a Jungkook.

—Entonces será mejor que nos pongamos a trabajar para que ese cachorrito esté en tu vientre antes de que vengan a comprobar —soltó seriamente, robándole a su novio un beso que los dejó a ambos sin aliento.

—Ajam —soltó Jungkook, separándose levemente y comenzando a desabotonar la camisa de Jimin—, eso es lo que pensé cuando le dije a mi jefe que estaba embarazado —comentó con diversión y volvió hacia adelante para seguir recibiendo de esos pequeños besos sabor a felicidad.

Probablemente la forma en que había conocido a su compañero no había sido la más adecuada —así como un montón de eventos que habían acontecido en su vida—, pero ahora era feliz y estaba seguro de que le esperaba un gran futuro a lado de su compañero —y tal vez un par de cachorritos—, así que estaba bien con eso.

Poco a poco podría dejar ir al Morphine solitario, para ser el Jeon Jungkook que siempre había querido ser: Un Jungkook feliz, libre y amado.

FIN

Holaaa, muchísimas gracias por haber leído esta pequeña historia, sé que probablemente en un momento se sintió, demasiado poco o demasiado rápido, pero es que no sé hacer historias cortitas, ya hasta me quería aventar el fanfic jaja, pero aún no he terminado mis otras historias, así que no me lo puedo permitir. Aun así, espero que les haya gustado; es pequeño, con mensajes muy sutiles, pero igual amé escribirlo. Gracias por su apoyo. Si les gustó comenten, voten o compartan. Nos vemos en otros fanfics. <3