Historia de un detective

1.-Día del derramamiento de sangre

Corrían las 10 de la mañana y Valentino había salido ha desayunar, una acción muy de su agrado, ya que era una de sus pasiones desde pequeño, comer.

En aquel instante notó la vibración su de teléfono móvil, era su jefe y eso no podía significar nada bueno para él. Habían dos opciones de la llamada, la primera era que podía estar despedido o que le bajaba el sueldo y ninguna de las dos eran del agrado del "gordinflón", apodo que usaban sus amigos cariñosamente para describirle.

En el momento de coger el teléfono le entro una tristeza terrible, puesto que ser detective era su sueño desde niño y lo desperdicio de una manera ingrata, la vagancia le había jugado una mala pasada.

Al escuchar la voz de su jefe se dio cuenta de que nada bueno podía ocurrir.

-¿Donde estas?-pregunto el jefe malhumorado.

-¿Donde voy a estar?-respondió Valentino en tono desafiante- Desayunando en el bar.

-Trae al despacho tu culo gordo en cinco minutos si no quieres que te despida-respondió el jefe subiendo el tono aun mas.

A continuación, sonó el pitido de cortarse la llamada.

- Porque me meteré en estos líos, soy el detective de la policía de Madrid y debo estar a mi trabajo- pensó el detective.

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Al llegar a su lugar de trabajo se dio cuenta de que algo muy importante había ocurrido, puesto que todos sus compañeros estaban trabajando.

- La policía no está igual desde que se fue el anterior comandante.-pensó.

Eso le hizo darse cuenta de que alguien influyente había hecho una queja o le podía ocurrir algo a alguien célebre.

-Ven aquí y deja de mirar como trabajan los demás-gritó el comandante.

Ha ocurrido una tragedia increíble y tienes que sacarla adelante, eras el mejor en tu época y estoy rodeado de incompetentes. Por lo tanto, tu eres el menos cacique del lugar después de un servidor.

-¿Que ha pasado y quien ha llamado para que esto esté así?- preguntó el detective.

-Veo que andas avispado "Gordinflón", ha llamado el ministro de sanidad para denunciar el asesinato de su esposa y por lo tanto, tu iras al lugar a investigar los hechos.-comento el comandante.

-Pero hace años que no estoy en un caso tan importante y no se se daré la talla- protestó.

Pero debes de entender que no vas a estar toda tu vida viviendo a nuestra costa y algún día debes hacer algo de provecho. Por cierto,en una hora debes de llegar al piso del ministro, así que vete elegante y se correcto con el mandatario.-comento el jefe.