Prologo

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-Concuerdo con ustedes caballero, la estabilidad de este imperio depende de los herederos, por esa razón... Decidí tener varios concubinos -dijo sonriente Latil mientras estaba sentada en el trono-

Yo no tengo nada en contra de Latil, pero que quiera tener concubinos solo para que después admita que aún extraña a su ex amor eso es horrible, eso es inhumano, por eso decidí que yo misma los cuidare y protegeré, dejaré que ella se encargue de reunirlos y yo de ahí intervengo. Esta es mi 6ta vida en el mismo lugar, he sido muchas cosas, como: cocinera, princesa, ama de casa, cazadora, sirvienta y concubina de un reino lejano. En todos mori de diferentes causas, pero algo es seguro, siempre volvía al principio, mi nacimiento y esta vez nací como la primera princesa de este reino, pero lo malo es que mi padre se convenció que Latil debía ser heredera, pero yo sacare provecho de esto mismo y me haré más poderosa, al ser yo la única persona viva del ducado Loswel, me es concedido más poder, ya que ellos fueron los fundadores oficiales del reino, eso me da mucha ventaja, pero mi hermana quiere quitar ese poder y no lo permitiré

Nos enteramos en Tarium 

Todos murmuraban sobre que era una barbaridad que la emperatriz tuviese concubinos y no un esposo oficial, además de que estaban diciendo que ella no debía gobernar, si no yo, Margaret Loswel. Hija de la mujer que mantuvo en pie el ducado Loswel,  fui y soy la verdadera heredera, pero esto se solucionaría pronto, yo sería la única llamada emperatriz, porque aún que yo no me reverenciaba frente a ella, tampoco lo hacía con alguien, todos me reverenciaban, porque yo conseguí un título mayor que el de emperatriz, y esos fueron:

-Voz del pueblo

-La amada del pueblo

-El ángel caído 

-Regente del mundo(no es que sea la gobernante, la nombraron así por su bondad hacia otros)

Y así como esos tenía muchos más, no solo me llamaban así, si no también la más sangrienta, porque yo a mis enemigos piedad no les daba, porque si la molestia se multiplica habrá más problemas

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Yo caminaba por el castillo y en eso me topo con Latil, ella me mira como si esperara algo, pero yo la miro un poco seria, aun que mantenía mi sonrisa

- ¿No piensas inclinarte ante tu emperatriz? -dijo burlona-

-Lo siento señorita Latil, pero no me incline ni ante la amante de tu ex-prometido y no lo pienso hacer ante usted -dije igual de burlona-

-O te inclinas o recibes pena de muerte, ahora soy la emperatriz, ¿entendido? -dijo seria-

-¿A caso te tengo que recordar? aun que seas emperatriz, tengo más poder que tú -dije igual de seria, pero con una pequeña sonrisa- Soy Margaret Loswel, hija del emperador y la concubina principal, hija de la única sobreviviente del ducado Loswel, así que usted es quien debe inclinarse, ¿no cree?

Latil paso de largo furiosa, iban a empezar a llegar solicitudes y yo tenía que revisar primero para después hacerle llegar a mi hermana...

Así empieza la derroca de mi hermana y mi futuro asegurado

Porque soy la rosa con las espinas más puntiagudas del jardín 

Los protegeré y cuidare cómo ella no lo hizo|| Los Hombres de mi HarénDonde viven las historias. Descúbrelo ahora