Vendido

23

Los días simplemente van pasando como si nada, asisto a pequeñas cenas que realizan los socios de Thor, evidentemente siempre termino maquillado para evitar sospechas de sus fuertes tratos.

Me hace querer vomitar, únicamente es positivo el hecho de que a Nicol la enterramos en una de las tantas tierras que tiene Thor, cercana a su mansión y por tanto, puedo ir.

No es lo mismo sin ella, intenté por todos los medios encontrar a algún detective para averiguar el motivo de su muerte, cosa que me desagrada porque siempre llegamos al mismo punto y nunca hay nada más que pueda saber.

Lo peor es que estoy sumido en una depresión tan grande, que se que Thor hace millones de cosas para evitar mi suicidio y seguir utilizando mi cuerpo para únicamente parir sus crías.

Temo haberme quedado preñado, toda la semana ha estado con lo mismo y yo cada vez que ocurren una de sus múltiples maneras de utilizarme, siempre pienso en mi lugar feliz y solo espero a que sacie su hambre de mí.

Pero hoy no hay nadie.

Hoy solo estoy yo, en la ducha con sus múltiples cuchillas para retocar su barba.

No hay Carla, no hay Lucas, no hay Jane.

Solo el susurro de la muerte agonizando sobre mi cuello, deseando que pueda finalizar mi martirio, esperando ansiosa a poder llevarme finalmente con ella a sabiendas de que me llevaré su vida también, que pagará cada vez que me hizo sentirme así

Todo empezó por ayudar a un gato.

¿Qué tanto se puede madurar en semanas?

¿Qué tanto vacío se puede generar en horas?

No sabría describir mi imagen en el espejo, ni yo mismo me reconozco.

Entonces comienzo a cortar mi cabello, que sé que adora tirar de él cuando me folla.

Empiezo a maquillar mis mejillas, que sé que ama ver sus manos marcadas ahí.

La música que coloque de fondo está llegando a su fin y me duele.

Porque me suicide de la forma más bonita y sobreviví de la peor manera.

¿Es que acaso mi destino será unido a alguien a quien no amo?

Es ahí cuando deseo estar muerto de verdad.

Pero no puedo hacerlo, no puedo enterrar esa cuchilla en mi garganta ni abrir ese fino pero profundo corte en mi brazo.

Todos los recuerdos junto a ellos avanzan sobre mi mente y los somníferos no hacen más que atontarme.

¿Qué fue el mal que hice en mis vidas pasadas para merecer tal trato?

¿Cuántas vidas destroce para tener este final?

Tan crudo que ni siquiera soy capaz de suicidarme.

Finalmente después de tantos pensamientos guarde todo y salí a atender a mi cachorro, lloraba desconsolado y yo finalmente pude brindarle su alimento.

Tan solo tenia 3 meses de edad y desgraciadamente lo odio, no soy capaz de soportar que se parezca tanto a mi y mi miedo a que sea un maldito omega me atormenta, no hace más que perforar mi mente, su llanto incontrolable me hace querer llorar a mi, pero solo respiro y como si fuera automático lo cuido, incapaz de dañarlo pese a mi gran odio hacia el.

Son las 7 de la tarde y las sirvientas proceden a lavarme y prepararme tal y como Thor les ordeno que quiere encontrarme, ya que por si las dudas, desea otro heredero, no vaya a ser y él sea un sucio omega como yo. Pese haber pasado una semana, la rutina es la misma que explique y Thor aparece por las grandes puertas y como toda buena puta le recibo tranquilo, maquillado y con esa ropa que él adora que use y a mi solo me hace sentir humillado, me lleno de su asqueroso aroma y solo puedo sonreír, desearía poder acabar con él pero esta noche será la mía.

Como de costumbre terminamos en la habitación, pero esta vez yo estaba tomando el control y eso le volvió loco.

— Finalmente asumes tu papel, ¿te gusta la polla de tu alfa ese apretado agujero, omega mío?

Su voz tan putrefacta perforó mis tímpanos y yo solo me dedicaba a montarle, ni siquiera valdría la pena describir como fue que terminamos así, pero yo estaba cabalgando su enorme polla esperando a que su esperma llenara mi culo y así dejarme tranquilo esa noche.

Pero hoy es diferente.

En una de esa sonrío y asiento, mostrando mi mejor papel como actor, mostrando mi valentía como persona y revelando que mi faceta de buscar la libertad jamás se fue, así que para cuando él se dio cuenta, yo había enterrado aquella cuchilla en mi brazo izquierdo y empecé a sentir como entre aquella oscuridad, él saboreaba mi sangre puesto que mis dedos estaban en su boca y sus gruñidos solo podían escucharse a la vez que el chapoteo entre ambos cuerpos por mi lubricante natural.

Una vez encendió la luz y me vio pálido, empezó a gritar y yo apenas podía escuchar lo que decía.

¿Por fin podré descansar?

¿Le di un buen espectáculo a mi papi?

¿Me porte bien, papi?

¿Fui un buen omega para ti?

Y los intentos de Thor entre su rabia fue lo último que logré visualizar antes de sentir mi cuerpo ser abrasado por la oscuridad que muchísimas veces había temido, por aquella oscuridad que siempre me aterró.

Fue ahí que me absorbió y yo no pude negarme.

¿Finalmente voy a lograr mi cometido?

Respóndeme papi, ¿he sido un buen omega?