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Explicando Anatomía Básica con...

Mi nombre es Maico Carlos López Massa, un médico argentino que decidió dar "clases" a un grupo de secundaria1 que aspiran a ser médicos, biomédicos... No sé, un buen de cosas en relación. En fin, ellos pidieron unas asesorías conmigo (por confianza) para tratar unos temas, ¿Viste? E hice lo mejor para explicar de una manera comprensible y menos compleja a lo llegué a tratar. Todos los chabones me decían de primeras: "Che2, maestro. ¿Cómo vos entendió al sistema cardiovascular?", lo cual pude decirles esto:

Como todos los pibes3 facheros4 de medicina, sabemos que nuestro aparato cardiovascular cuida de que todas las células, más vivas que yo al afanar5 un caramelo de dulce de leche, dispongan del sagrado oxígeno para subsistir y recoger las sustancias perjudiciales para desprenderse de ellas. Para vos, quizás creas que tu corazón está a la izquierda, pero NO boludo6, flasheas7 demasiado, está en el centro, hermosamente protegido por el pericardio, una joyita8 papá, que es un saco hecho de tejidos que mantiene tu corazón en su lugar. Ah, ahora las funciones, que casi se me pasan. Simple: transporta, regula y protege. Transporta eritrocitos, sustancias nutritivas y sustancias excretoras; regula hormonas y la temperatura; y protege de una posible coagulación de sangre.

Continuamos con lo más específico/especializado, eh... un quilombo9. Las características anatómicas de la pared cardíaca, compuesta por tres partes: epicardio, miocardio y endocardio. El epicardio (oh, suena como una jerga viste, de "épico", epic-ardio, ¡Jajaja! Ay... soy un pelotudo) es una capa delgada más externa, formada por lámina visceral del pericardio seroso. El miocardio es una capa gruesa media formada por músculo cardiaco, de hecho, su unidad funcional es única y el corazón se divide en dos miocardios: aurículas y ventrículos. Finalmente, el endocardio es una capa delgada interna de tejido conectivo subendotelial y es la membrana de revestimiento del corazón. Esas tres ya apiladas parece una deliciosa lasaña... extraño la lasaña de mi madre.

Pero espera, faltan los vasos sanguíneos. Como ese grupo de pibes solo querían saber los nombres y ya ellos se encargarían de recordar lo demás, vaya babiecas10... Solo puedo responder a lo siguiente: arterias, venas y capilares. Las arterias y venas las tendrás a lo largo y ancho de tu cuerpo de los tamaños que puedes otorgar de tu imaginación, aunque diré que son 3 medidas de arterias e igual 3 para las venas. Son los conductos a través de los cuales circula la sangre por todo el cuerpo. Forman una amplia red que tiene forma de árbol. Así, su inicio, a manera de tronco, se va ramificando progresivamente hasta derivar en unos capilares finísimos.

Seguía tejido sanguíneo, tema del cual lo aprendí de una presentación de unos compañeros de medicina. Esa vez casi me quedaba dormido en una esquina, jaja. El tejido sanguíneo es la SANGRE. ¿Cómo te cuento? Transporta una serie de sustancias de un conjunto de células a otro y, en pocas palabras, se constituye de un tejido conectivo especializado, compuesto por células. Para el complemento está el plasma, que es un líquido transparente y ligeramente amarillento que representa el 55 % del volumen total de sangre, sí, puede malpensarse un poco, pero haga caso omiso. En cuanto a las inmunoglobinas, estas nos defienden como buen paladín de las infecciones y la famosa albúmina que es una proteína que transporta hormonas y fármacos y los lleva hasta los tejidos. ¿Sabes cuál es mi parte favorita de la sangre? Los eritrocitos y leucocitos son tan equilibrados y frágiles como la teoría del Yin y el Yang. Sin chamuyarle al asunto, son rojos y blancos, respectivamente. Los eritrocitos son los encargados de trasportar oxígeno de los pulmones a los tejidos y eliminar el dióxido de carbono que estos producen como sustancia residual cuya proteína es llamada hemoglobina. Los leucocitos no son tan arriesgados y son nuestros protectores de infecciones, como el coronavirus (déjame decirte que eso ocurrió cuando yo ni nacía). ¿Han visto cómo funcionan los taxis? Bueno, vamos por ahí. Los taxistas transportan de una manera súper... súper alocada a los pasajeros y así se ahorran la saturación de personas en las paradas. ¡De nada!