Quinto Capitulo

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La mañana de Midorima iba cada vez peor, estaba muy aburrido de su misma rutina pues, aunque no lo pareciera a él le gustaba salir a pasar el rato, pero le gustaba que las personas le rogaran un rato y recién aceptaba a "regañadientes", cuando por dentro estaba muy feliz, ese no es el punto, lo que sucede es que nadie en mucho tiempo lo había invitado a pasar el rato, según la descripción de sus conocidos él era una persona reservada, callada, seria y aguafiestas...

Él no se sentía nada identificado con esa descripción, bueno aceptaba que a veces llegaba a ser muy cortante, no lo conocieran lo suficiente, lo hacía pensar más, en algún momento necesitaría a una persona que lo comprendiera y lo conociera, no quería acabar solo por toda su vida

Era cada vez más frustrante, pues al pensar en eso, la imagen del peli negro oji gris de la fiesta aparecía en su conciencia, si tan solo hubiera aceptado esa bebida...

Ya no había vuelta atrás, pero lo único que quería en ese momento era que el omega se volviera a cercar y esta vez aceptaría sin duda darlo, algo que era casi improbable, seguro solo era algo pasajero o tal vez...

El sentimiento de querer tener amigos se hacía más grande, si, tenía a su grupo de amigos, pero ni ellos lo conocían lo suficiente, aunque no lo pareciera, a él le gustaban mucho los detalles, aunque sea una mínima cosa, por ejemplo, que se acordaran de su cumpleaños...o que le dieran un regalo en navidad hecho a mano...o un mensaje con un "buenas noches", ¿eso era mucho pedir? Al parecer si...

Él era una persona muy detallista, según su madre, la única que lo conocía bien...lástima que ya no estuviera con el...ella era la única que le decía "¡Feliz Cumpleaños!", la única que le daba un regalo pequeño en navidad y la única que le deseaba las buenas noches

Su vida era horrible, no tenía algo para justificar su existencia, ¿sus hermanos?, para ellos el no existía y su padre solo lo veía como una máquina de dinero desde que le dijo que quería ser medico

El solo quería una persona a la cual podría mostrarle su verdadera personalidad, su verdadero ser...

Kasamatsu había amanecido con terrible dolor de cabeza, no quería hacer nada, absolutamente nada, solo quería dormir y...nada más

Furihata le había dicho que Kagami le dejo unas pastillas y una sopa en la cocina, porque ellos se tenían que ir a trabajar, ya saben qué tipo de trabajo, se levantó y camino hacia la cocina como si fuera un zombi, cuando vio la sopa y las pastillas, se dirigió hacia ellas y trago las pastillas, luego tomo el recipiente que contenía una deliciosa y apetitosa sopa, la llevo a la mesa y empezó a tomarla, la sopa estaba muy rica, tenía fideos y unas cuantas verduras

Aomine estaba en la estación de policías, al parecer preocupado, esperaba otra visita del omega peli negro, pero no había llegado, hasta que escucho sonar su teléfono, lo reviso y era un mensaje de Kasamatsu que decía: "Buenos días Daiki, amanecí con un dolor de cabeza, esta vez no iré a verte, pero, ojala te valla muy bien hoy". Aomine sonrió, el peli negro se había acordado de él, y le deseo un lindo día...

'Solo quería verlo...pero prefirió a la mañana siguiente, recibirlo con unas flores, en específico un ramo de flores jazmín, eran unas de sus flores favoritas

Akashi estaba en su oficina haciendo unos informes y también revinándoos, pues el día de ayer un empleado cometió un error y perdieron mucho dinero, fue inmediatamente despedido

Su día empezaba como siempre, solitario y silencioso, normalmente la única voz que escuchaba en toda la mañana era la voz de la sirvienta preguntándole que iba a desear de desayunar y luego de eso nadie le hablaba hasta medio día, en ese lapso de tiempo estaba en alguna reunión escuchando ideas tontas de parte de sus socios

Escuadrón de la seducciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora