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01. el comienzo 🤍🩰
Me encontraba en mi habitación arreglándome para Halloween. Había decidido que me vestiría de vaquera y estaba poniéndome las botas que había elegido para el disfraz, cuando escuché a Tara gritarme.
—¡Apúrate, Sarah, se hace tarde! —dijo enfadada y de manera sarcástica.
—¡Voy, ya casi termino con las botas! —respondí.
Finalmente, terminé. Las botas ya estaban puestas, abrí la puerta de la habitación y bajé las escaleras. Estaban todos sentados en el sofá.
—¿Están listos todos? —pregunté, mirando alrededor. Faltaba Ethan, que estaba en el baño. Estaba conversando con Tara cuando vi a un bombero salir del pasillo del baño. Claro, era Ethan; lo supe al instante al verlo. Me gusta poner a la gente nerviosa, así que decidí preguntar.
—¿De qué estás disfrazado, Ethan?
—De bombero. ¿No lo ves? —respondió con un tono nervioso.
—Oh, claro, si lo dices, sí —dije sarcásticamente.
Íbamos de camino a una fiesta de Halloween.
Cambio de narrador: de 1ª a 3ª persona 🤍
—¡Ey! ¿Vas a venir a la fiesta? —le preguntó Sarah animada.
—No estoy seguro, pero gracias por la invitación, Sarah. Tal vez pase por allí.
Sarah le sonrió brevemente y se fue con sus amigos.
Llegaron rápidamente a la fiesta, donde encontraron a todos reunidos. Al cabo de una hora, Sarah ya estaba muy borracha, después de haber jugado a ver quién bebía más.
La rubia se encontraba dormida en el hombro de Anika mientras esta hablaba con su novia tranquilamente, cuidando que Sarah no se moviera de su lado.
Por otro lado, Ethan y Chad conversaban.
—Mira, mira, ¿la ves? Pregúntale si le pareces guapo —le dijo Chad a Ethan.
—No creo —respondió Ethan con una sonrisa forzada.
—Claro que sí, eres Ethan Landry. Mírate, cualquiera te comería completito —dijo Chad, sarcástico.
Las chicas vieron cómo Tara subía al lado de un desconocido. Se levantaron de donde estaban sentadas. La rubia, que apenas podía moverse, hizo el esfuerzo y se levantó, sosteniéndose de los hombros de Mindy.
—Tara, no subas, quédate aquí con nosotras —dijo Anika, con tono amable y una pequeña sonrisa.
La morena negó con la cabeza mientras el desconocido la tomaba del brazo y la guiaba hacia las escaleras.
—Voy por Chad. Agarra a Sarah, no tardo —dijo Anika.
Chad y Ethan seguían platicando hasta que Anika se acercó.