3

5.8K 676 204
                                    



Una semana había pasado desde que Jisung recibió aquel balonazo del pelinegro. Y no lo había vuelto a ver, era una escuela con muchos chicos, así que no siempre se topaban a los mismos alumnos.

—No sirvo para esto— Dijo Jisung jadeando del cansancio por correr tanto.

—Vamos Jisung, el entrenador nos regañará si no seguimos trotando, iremos lento, pero tenemos que movernos— Felix jaló al castaño del brazo.

El entrenador sonó el silbato haciendo que todos pararan de correr alrededor de la cancha.

—Reúnanse jóvenes— Todos los alumnos de dirigieron al profesor. —Como podrán darse cuenta, este grupo no es muy bueno en los deportes, y me han pedido los superiores que los adentremos más en esto del deporte, por eso hoy practicaremos un poco de fútbol, y para eso le he pedido a un grupo más grande que nos ayude, entre ellos están muchos de los jugares del equipo de la escuela, así que pongan todo su esfuerzo y sean amables.

—Mátenme— Dijeron Jisung y Felix al mismo tiempo.

El grupo de Jisung se encontraba calentando cuando los del grupo mayor empezaron a llegar.

—Mira, ahí vienen los idiotas— Felix se detuvo de su calentamiento para señalar a dos chicos que caminaban hacia ellos. Jisung que estaba sentado de espaldas se volteó a ver.

—Ya te dije que no soy ningún idiota, niño pecas— Dijo Changbin.

Minho se acercó a Jisung mientras los otros chicos peleaban.

—Hola Jisung— Dijo el pelinegro. —¿Ya está mejor tu mejilla?

—Si, ya está sana— Respondió Jisung tomando su propia mejilla derecha y apretándola un poco. —¿Ves?

Minho sintió la ganas de también tomar su mejilla y estrujarla, pero se contuvo. En cambio se cruzó de brazos para evitar tocarlas.

—Ya veo, y también veo que son así de grandes aunque no te hayan golpeado— Rió Minho.

—Oye— Dijo Jisung divertido.
Estaba un poco nervioso, pues el pelinegro lo intimidaba con su gran belleza, y esa pose con los brazos cruzados sobre su pecho, lo hacía lucir más atractivo.

El entrenador llamó a todos al centro y pronto se pusieron a practicar pases, tiros, cabezazos. Y después armaron equipos para jugar un amistoso partido.
Los equipos estaban revueltos entre los que sí sabían jugar y los que no, para que pudieran ayudarse.

A Minho le había tocado con Felix, y a Jisung con Changbin.

Jisung corría sin saber qué hacer, estaba muy perdido, definitivamente los deportes no eran su pasión, y mucho menos que tuvieran pelotas involucradas. Le gustaban otras cosas como el baile, escribir canciones, cantar, dibujar, pero el fútbol no era para él.

Se posicionó detrás de un jugador de su equipo más alto que él, pero el chico de pronto se quitó, y un balonazo llegó a su cabeza.

—¡AYYY! — Gritó Jisung. Está vez no había terminado tumbado, pero le dolió mucho.

—¡No puede ser Minho, eres un idiota!— Felix chilló enojado corriendo hacia su amigo.

El pelinegro también corrió hacia el castaño. Felix lo atrajo a sus brazos mientras sobaba delicadamente su cabeza.

—Jisung, de verdad perdóname, fue un accidente— Minho en verdad se sentía culpable, pues ya le había dado dos balonazos al pequeño chico. No hacía más que sentirse un completo estúpido por pegarle a este chico que le había gustado desde que lo vio.

El entrenador llegó a supervisar todo y dijo:

—Acompáñenlo a la enfermería para descartar que sea algo grave.

—Vamos Sung— Felix iba dispuesto a acompañar a su amigo pero el entrenador lo detuvo.

—Usted no, es muy malo jugando y necesito que se quede a aprender, Minho, ve tú— Felix jadeó indignado y se quedó con los brazos a un costado mientras Jisung y Minho caminaban a la enfermería.

Changbin llegó a un lado del rubio y se comenzó a reír.

—El entrenador tiene razón, eres realmente malo en esto— dijo burlándose.

—Cállate idiota— Felix volteó a ver al pelinegro, que detuvo su risa y lo miró a los ojos.

—Cállame— Dijo Changbin alzando una ceja y una sonrisa dibujada en su rostro.

ball magnet ; minsungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora