Capitulo 4

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Rei mordió su labio con nerviosismo, sin temblar disparo, mató a uno de los alfas que cayó encima de los demás cuerpos. Eran tres en total. Suspiro pensando que era el último. De suerte estaba en la segunda planta cuando escucho como forzaban la cerradura, podía ser un omega, pero no era idiota, tomo una de las armas que tenía escondida en un jarrón y comenzó a trabajar su puntería con esos estúpidos alfas. Podrá ser malo como ama de casa pero el mejor asesino de esa maldita organización.

Notó rápidamente como entraba un alfa más grande que los otros tres y por su fuerte aroma dedujo rápidamente que era un alfa dominante. Nuevamente su pulso no tembló y disparó, pero no contaba con que el alfa esquivara su ataque. Pudo notar la mirada sin vida de ese animal, ojos inyectados en sangre lo miraban fijamente. Bueno, adiós ataque sorpresa.

Volvió a disparar, maldijo cuando el alfa esquivo y comenzó a subir las escaleras. Mierda, se había quedado sin municiones. Corrió a la habitación más cercana que era el baño para esconderse. Eso era de cobardes, pero no tenía un arma en mano, comenzó a buscar entre los botiquines, canastas y en el mueble del baño. Encontrándose con un bisturí, un arma e hilo.

Eso podría servir.

Extendió el hilo por la habitación, el color era casi transparente así que tendría que tener cuidado, escondió el bisturí en la bolsa de su sudadera y el arma la cargó correctamente.

La puerta fue tocada con brusquedad.

Meditó un tiempo, le faltaba unas cosas que hacer, así que se dio prisa. Otro golpe más fuerte, podía sentir que la madera se estrujaba bajo las manos del dominante.

Se colocó al fondo del baño, listo para disparar si hace falta.

La puerta cedió bajo la fuerza del alfa, rompiéndose. No pensó dos veces para disparar, pero el alfa usó la puerta de escudo. Se maldijo internamente por haber reforzado esa puerta.

Esquivó la embestida del alfa.

— ¿Dónde estás, maldito omega?

— Si tanto me quieres, atrapame.

Le dio otro disparo directo al pecho, pensó que ya había acabado con él. Pero el alfa solo se tambaleó, no cayó al suelo. Abrió nuevamente los ojos, y se quitó la bala que se había incrustado en su pecho. Allí noto que el alfa llevaba chaleco antibalas.

El mayor no dudó y volvió a embestir al omega, lanzándolo fuertemente a la pared. Rei abrazó su vientre inconscientemente. Sentía como la sangre caía por su nuca, el golpe fue casi mortal para él. Iba a levantarse, pero el alfa lo acorraló en el suelo. Lanzó patadas, golpes, pero nada hacía efecto. Pensó usar el bisturí entonces noto que el artilugio ya no estaba en su bolsillo, movió ligeramente su cabeza notando la pequeña arma a unos centímetros lejos de él. Ese pequeño descuido hizo que el alfa mordiera cerca de sus glándulas de olor. Pero se movió rápidamente haciendo que mordiera su clavícula. Cuando el alfa noto eso colocó sus manos en el cuello de Rei con fuerza haciendo que el oxígeno no llega a sus pulmones.

Hubiera sido una maldición si lo enlazaba, pero ahora estaba en un gran problema, ya sentía como perdía el conocimiento, entonces, Rei levantó la mirada notando el hilo que había puesto en toda la habitación, el brillo que mostraba el pequeño hilo bajo la luz del sol fue como de esperanza. Dio un pequeño impulso para tomarla entre sus dedos. El alfa no lo tomo en cuenta hasta que Rei comenzó a ahorcarlo con el hilo.

Rápidamente el alfa soltó él agarré de su cuello haciendo que Rei diera bocanadas de oxígeno para llenar sus pulmones, sin embargo, el omega rápidamente tomó el bisturí que estaba cerca y con un movimiento rápido cortó una vena que sobresalía del cuello del alfa. Una cantidad absurda de sangre comenzó a salir, Rei noto como el alfa se comenzaba a ahogar con su sangre. La sustancia comenzaba a caer al cuerpo de Rei por la posición del alfa.

Es Positivo ( Kazurei) [Omegaverse]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora