You and I (Welcome Home | Wally x Julie)

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Habiendo pasado 7 días completos de aquel día tan "extraño" las cosas seguían tranquilas, aunque ese día Wally se determinó a ir a la casa de la rubia, con una cesta llena de rollos de canela y brownies qué el mismo había hecho especialmente para ella.

Hacerlos no fue lo difícil, lo difícil fue darse valor para ir a la casa de su amada y no sólo dejarlos afuera y salir corriendo como un gran cobarde, al punto de que solo la idea le estaba aterrando, aunque habían dos problemitas, Julie no había estado saliendo de su casa, solo salía por pequeños periodos, a casa de Frank y de Poppy, y lo relacionaba a aquel día que el entendió que gustaba de ella y el segundo era que tenía mucha pena de verla y que su rostro lo traicionara, haciendo que pase de amarillo a rojo por la vergüenza de estar con la chica que aceleraba su corazón.

Que gran cliché estaba viviendo ¿no? Un gran Friends to Lovers, o eso esperaba, un final feliz junto a ella.

Volviendo a la actualidad, el de melena azulada salió de su casa con la cesta y una sonrisa nerviosa, a dirección a la casa de la chica que le estaba robando suspiros de a montón, esperaba poder encontrarla en casa.

Llegando frente a la casa, toco con algo de precaución la puerta de la misma, y con un tono dulce hablo.

"Hola, Julie ¿Estás aquí, querida?"

Espero un poco a una respuesta, y pudo escuchar unos pasos que rápido identificó como Julie al otro lado de la puerta.

"¡H-hola Wally! Si aquí estoy ¿Ocupas algo?"

Pregunto algo tímida la de piel rosada semi-abriendo aquella puerta color amarillo, con una sonrisa algo sutil.

"Bueno, v-veras Julie, te traje esto, lo e horneado para ti, son unos rollos de canela, se que te gustan mucho los postres y las cosas dulces, así que también te hice unos brownies..."

Los ojos de la monstruo arcoiris se mostraron de un momento a otro emocionados y con cierto brillo mágico, mientras sus mejillas tomaban un tono más colorado y una sonrisa llena de ternura aparecía en el rostro de la rubia, por otro lado el de piel amarillezca sentía que se hipnotizaba al momento de ver la sonrisa que siempre le hacía sentirse en las nubes, pero que apenas identificaba como "amor".

"¿E-enserio?"

"¡Claro! ¿Porque le mentiría a mi mejor amiga?

Decir "mejor amiga" había sido como una patada en el estómago, para ambos, por alguna razón ambos habían hecho una pequeña mueca, insignificante, pero que por alguna razón ambos notaron, ganando de parte mutua una pequeña risa al notarlo, no sabían de que reían en realidad, pero no necesitaban explicaciones.

Haciéndose a un lado Julie de repente de la puerta hizo un gesto con las manos.

"¿Quieres pasar, Wally?"

"¡Claro! ¿No será mucha molestia?"

"¡No, claro que no! Ya has entrado varias veces a mi casa, no habría porque haber problema"

Y así, Wally se adentro en aquella casa de corazones de decoración, si bien se había adentrado a ese hogar en distintas ocasiones ahora era diferente, porque ya no miraba el lugar con los mismos ojos, ahora miraba a este sitio como el hogar de la persona que había arrebatado su cariño, por quien estaba dispuesto dar al mar y la tierra si así ella lo requería.

Llegó a la sala de la rubia y dejo el regalo en una mesita qué se encontraba cerca de los muebles de esa casa.

"¿Quieres un café o un té?"

"Un té, por favor"

"De manzanilla ¿verdad?"

"Jeje tu me conoces bien"

Y así empezaron una platica, una muy amena y relajada, hace un largo rato no tenían una como la que estaba teniendo este par de tortolos, qué sin notarlo, ambos estaban con un tinte rojo en las mejillas con una sonrisa que a leguas se leía como "amorosa".

Mientras Wally "tomaba" su té, Julie agarraba alguno de los postres qué le había traído el contrario.

Su platica duro aproximadamente 4 horas, hasta que Wally decidió irse porque ya se podía apreciar qué se estaba empezando a obscurecer, aunque su casa no quedaba lejos, no le gustaba estar fuera de casa por la noche.

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"¡Ay Frank! ¡Fue tan mágico!"

Julie estaba encantada por el día anterior, además de todo, estaba perdida en sus pensamientos, mientras que su mejor amigo solo la escuchaba y, tomaba nota.

...

"¡Eddie! ¡Lo hice! ¡Fui a platicar con ella!"

Gritaba triunfante y alegre Wally, quien había llegado con su, ahora más cercano, amigo. Eddie solo se encontraba muy feliz por su amigo y con su progreso en todo eso, aunque no lograba comprender ¿qué no ellos ya platicaban así cuando no sabían que se amaban? Bueno, las cosas cambian con el amor, supuso él.

...

"Enserio fue tan bonito el detalle, y me conoce tan bien, sabe...-"

...

"... Todo de mi! Se que seguramente sea porque somos mejores amigos, pero yo quiero...-"

...

"... Ser su confidente, quiero que me ame como yo lo amo a él"

Y así, hablo de manera tan abierta como pudo Julie, aunque un poco torpe con sus palabras, porque había varias cosas que buscaba decir pero terminó diciendo lo que dijo, a la par, indirectamente con Wally qué curiosamente piensa lo mismo que ella.

...

El amor es una hermosa virtud en cualquier dama o caballero, uniendo o destrozando vidas.

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Hola espero les guste el capitulo de hoy, la loca del chocolate se despide, nos vemos mañana con otra parte de este fanfic.

¿Dudas o comentarios?

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