Capitulo Unico.

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"Buda estas seguro que esto es buena idea?" Preguntaba preocupaba Confucio a Buda el cual los estaba guiando a una feria del mundo humano, este los ayudo a escabullirse sin que otros dioses se enteraran.

"Ella tiene razón, no te meterás en problemas por traernos al mundo humano?" También preguntaba Sócrates pero con menos preocupación y más curiosidad, ella estaba adentro de cualquier plan que hiciera su amigo. Y estas ropas modernas son interesantes!

Jesús miraba preocupado a su amigo el cual le encantaba hacer cosas para irritar a los dioses pero esta vez podría ser la vez que se sobre pase. Tal vez su idea de ir a la feria en el mundo humano no sea tan buena.

"Cállense, todo estará bien si confían en mí. Aparte cuando vean lo mucho que han avanzado la humanidad ni siquiera se querrán ir." Decía despreocupado el iluminado con su paleta en la boca mientras seguía caminando a su destino. Ellos tres solo se miraron y sonrieron mientras sacudían sus cabezas, nadie le puede decir a Buda que hacer solo el mismo Buda.

Así que lo siguen y quedan maravillados por lo que ven. Las atracciones, los juegos, las comida de diferentes colores y formas, todo estaba lleno de color y alegría, los adultos y niños disfrutando por igual.

Buda sonríe al ver sus reacciones, "Esto es lo que los humanos llaman una feria, bastante dulce no les parece?" Preguntaba sabiendo que no iba a obtener una respuesta inmediata, sí que fue una buena idea en traer a sus amigos sus reacciones son oro. Ahora se pregunta si podrá escabullir a su hermana en otra ocasión tal vez si sobornaba a Shiva con ciertos dulces humanos lograría que hiciera la vista gorda.

Ese es un plan para otro día por ahora a disfrutar!

Así que deberán de comenzar a lo grande y que es mejor que una montaña rusa?

La montaña rusa fue divertida incluso cuando casi hizo paz consigo mismo de nuevo y sabía que por fuera se veía tranquilo pero por dentro estaba muerto y en camino al Valhala... de nuevo, mientras que Jesús rezaba a todo pulmón (así que este tipos de sustos es lo que le pueden hacer hablar, interesante) Pobre Jesús termino vomitando casi hasta su alma mientras que Sócrates lo estaba ayudando a recomponerse, la montaña rusa estuvo bien para su gusto mientras Confucio fue la única que le gusto la atracción de hecho fue por algo de comer.

Y el quedo tan mareado que no podía comer.

"Buda, quieres algodón de azúcar?" Preguntaba Confucio mientras le daba un gran y rosado algodón de azúcar mientras ella comía otro.

Ok, tal vez si pueda comer algo.

"Gracias, Con." Lo tomaba mientras le daba un gran mordisco.

Ella ríe un poco, "Sabes subir esa montaña rusa hizo que mi sangre se acelerada y calentara, yo supongo!" Exclamaba animadamente pero rápidamente se compone a su expresión calmada, un habito que hacia enfrente de sus estudiantes incluso cuando ellos sabían que ella es una mujer bastante animada.

"Solo somos nosotros, no es necesario que escondas tu emoción Con." Esto hace que ella se sonroje un poco de la vergüenza así que esconde un poco su rostro detrás de su algodón de azúcar, "Lo sé, solo que es difícil romper hábitos, yo supongo." Él come el resto de su algodón de una sentada y se acerca su novia. "Está bien, no te tienes que preocupar por nada de eso aquí solo hay que disfrutar nuestro tiempo aquí, como suena eso?"

"Eso suena bien- Buda no te comas mi algodón de azúcar!" Gritaba molesta Confucio cuando había levantado la vista Buda estaba agarrando pedazos de su algodón.

"Puedo ver que te encuentras mejor, Buda." Decía Sócrates mientras reía al ver la interacción de sus amigos, Jesús estaba a su lado el cual se veía ligeramente mejor que desde bajo la montaña rusa y como Sócrates sonríe al ver a los enamorados interactuar donde termino con Confucio dándole el resto de su algodón de azúcar a Buda el cual gustosamente lo devoro. "Ahora que deberíamos de hacer?" Preguntaba Sócrates mientras acariciaba su barba, tantas opciones para escoger mientras que Confucio era incapaz de decidir que atracción le llamaba más la atención mientras que Jesús ve algo y le da un ligero codazo a Buda. "Que pasa?" Preguntaba curioso el iluminado a su amigo y este solo señala al juego de hombre fuerte el cual entre los premios había uno de un hámster gigante.

Genial.

"Gracias." Le murmura a su amigo y se dirige al resto. "Oigan, Jesús ya decidió!" A lo que el resto solo los siguieron bastante animados.

Y ganar fue bastante fácil para él aunque probablemente tuvo que parar después de haberle ganado a sus amigos algo pero el tipo que estaba encargado de este juego no dejaba de mirarle los pechos a Confucio, la cual estaba concentrada en lo lindo que era el peluche que le consiguió, así que se vaya a la mierda!

Hubiera continuado sino lo hubiera echado del juego al darse cuenta de todas sus pérdidas, el solo les dio el resto de los premios a niños que miraba pasar a su alrededor los cuales estaban contentos por los regalos así que el ve esto como una victoria.

+++

El resto del día había sido igual de entretenido, se subieron a varios juegos y comieron demasiado, bueno Buda comió, ya se encontraba oscuro y todas las luces del parque estaban encendidas haciendo que tuviera un ambiente mágico o mágico para el resto de los sages que nunca habían presenciado algo así en sus tiempos cuando aún vivían.

Y la segunda parte de su salida está en progreso.

"Hey Confucio, quieres subirte a la rueda de la fortuna?" Preguntaba Buda mientras señalaba a la dicha atracción. Confucio con estrellas en los ojos, "Si!" Decía emocionada mientras voltea ver a Sócrates y Jesús. "Nos acompañan?" Preguntaba excitada a sus amigos sin notar que Buda sacudía sus cabeza a sus amigos el solo quería a Confucio con él en la rueda de la fortuna sin interrupciones

"No, me encuentro bien aparte las alturas no son lo mío y Jesús aún no está listo para estar en las alturas de nuevo, ya sabes por la montaña rusa de hace rato, nosotros los esperamos aquí afuera." Respondía tranquilo Sócrates mientras que Buda les daba los pulgares arriba, ellos ya sabían lo que su amigo tenía planeado y le deseaban suerte.

Jesús sonríe tranquilamente a su amigo, realmente esperaba que todo le saliera bien.

"Sabes es bueno que no nos acompañaran esta vez ya que hay algo que quiero contarte en privado y creo que esta es la perfecta oportunidad." Explicaba Buda mientras ponía su mano en su hombro y le daba una sonrisa perezosa, Confucio lo miraba curiosa ante esto mientras entraban a la cabina, ella abraza más fuerte el peluche por la antelación. "Y que es lo que me quieres contar?"

Y él sonríe ante esto.

"Que te parece que avancemos nuestra relación al siguiente nivel?"

Un carnaval iluminadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora