capitulo 30

1.7K 103 158
                                    

Narra Sparta

Ya habían pasado dos meses desde que Silvio me atacó. El detective me interrogó pero no pude decirle mucho solo que me atacaron y luego me inyectaron algo en el cuello. Pensó en la posibilidad de que Silvio fue el responsable de todo pero algo no le cuadraba. Flex llegó a visitarme una vez y se disculpó por haber creído que yo había matado al chico del paro cardíaco y a otros. Claramente no tenía bien en claro eso pero no le quedaba duda de que Silvio pudo haber sido capaz de hacer esas cosas. ¡Ja! Él no pudo matar ni a una mosca literalmente dejaba un gran rastro de sus fechorías, no podía creer que me compararan con un ser tan inútil para el trabajo. Acepté las disculpas de Flex. Al menos había alguien que ya no sospechaba de mi. Pensé en qué hacer con el detective, lo observaba o al menos le decía a Mike que también le echara un ojo. Luego de que Mike me contara sobre su comportamiento comprendí que al detective le interesaba Mike porque cuando Mike lo observaba o se acercaba el detective se comportaba nervioso y algunas veces torpe, se sonrojaba de vez en cuando y mantenía una posición firme tratando de impresionar lo. Le pedí a Mike que hablara con el detective acerca de su caso. Le habló cosas buenas de mi y el detective escuchó con atención y se dejó influenciar. Cerró el caso con que Silvio era el culpable. Lo llevaron a juicio y lo encerraron, lo quisieron meter a psiquiatría pero el detective pidió que no lo hicieran porque era muy peligroso. Finalmente lo encerraron y para celebrar el detective invitó a Mike a una cena, claramente Mike aceptó y comió todo lo que le dio. Luego el detective lo llevó a su casa donde no pasó mucho solo que Mike se acostó en la cama y se durmió. Todo eso fue lo que me contó Mike después de haber vuelto de esa noche.

Me encontraba sentado pescando cuando Conejo se sentó a mi lado

Raptor: ¿En qué piensas?

Sparta: en nada

Raptor: ¿se puede nadar en el lago?

Sparta: no lo sé...

Conejo me miró detenidamente

Raptor: ¿Te sientes bien?

Sparta: si

Raptor: no te ves tan bien ¿Qué estuviste haciendo anoche? Te levantaste y no volviste a la cama

Sparta: nada

Raptor: ¿Enserio?

Sparta: ya te he dicho que no me gustan las preguntas

Se acercó a mí y tomó la caña quitándome la de las manos. Luego miró mis manos y parecía preocupado

Raptor: no vuelvas a salir

Sparta: ¿Por qué?

Raptor: porque no

Se quedó callado un momento y luego suspiró

Raptor: no quiero que te lastimes

Me abrazó y yo no pude evitar corresponder, pero lo que no sabía era que yo solo iba a cortar madera

Sparta: ya no lo haré

Raptor: ¿Lo prometes?

Sparta: no puedo prometer algo que no puedo cumplir pero lo que si te puedo prometer es que no me lastimaré intencionalmente

Me abrazó más fuerte casi dejándome sin respirar

Sparta: ya parale ¿No? Cof

Me soltó de inmediato

Raptor: ¡lo siento! Perdoname es que solo me dejé llevar

Sparta: está bien

Acaricié su cabello. Sigo sin entender cómo lo hace, nunca fui tan amable con alguien, nunca fui tan dominado por alguien sin que yo lo permitiera, nunca fui tan sentimental por alguien, nunca me había arrepentido por matar, nunca me había sentido asustado porque me dejara alguien, ¿Cómo lo haces?

psiquiatra  //Spartor//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora