Nueva vida.

Capitulo 1: Nuevos aires.

Ya era un nuevo día para la ciudad de Musutafu, las aves cantaban y los nieve seguía cubriendo gran parte de los edificios como de la ciudad, pero nuestro protagonista junto con su mejor amiga estaban despertando gracias a la luz del sol que entraba por la ventana de su camarote.

Izuku: Buenos días.

Oyuki: Buenos días.

Izuku: ¿Qué hora es?.

En eso la azabache vio el reloj de su celular.

Oyuki: Son las cinco y media de la mañana.

Izuku: Nos falta una hora y media hora para llegar.

Oyuki: Entonces vamos a dormir un poco más.

Cuando la azabache se tapo con su cobija sintió como el peliverde le ponía su mano en su cabeza.

Izuku: No podemos, tenemos que prepararnos para cuándo se detenga el tren.

Oyuki: Pero es que tengo sueño, no quiero levantarme.

Izuku: Lo se, si quieres cuando lleguemos a la casa podrás dormir todo lo que quieras en tu habitación.

Oyuki: Bien, pero tú irás por mi desayuno.

Izuku: Okey, ¿Qué vas a querer?.

Oyuki: Quiero bolas de arroz con rollos de huevo.

Izuku: Bien, no me tardo.

Dicho esto el peliverde se puso su camisa para ir al otro vagón para pedir sus respectivos desayunos, para Oyuki con su arroz y huevo y para el un pescado frito con undon aparte y para acompañar un jugo de naranja para el y uno de uva para Oyuki.

Después de pedir sus alimentos el peliverde regreso rápidamente a a su vagón para así comer junto con Oyuki su desayuno, posteriormente a esto el peliverde saldría del camarote para que así la azabache pudiera vestirse adecuadamente antes de salir y dejar que el peliverde también pudiera hacer lo mismo.

Aunque les quedaba 50 minutos antes de llegar a Musutafu empezaron a ver cosas en sus celulares, Oyuki algunas noticias y videos mientras que Izuku veía el mapa de la ciudad en general para saber que dirección debían tomar.

Cuando el conductor aviso por los altavoces que solo faltaban 15 minutos para llegar a la última estación Izuku y Oyuki empezaron a empacar sus maletas y salieron de su camarote, pero solo para poner sus maletas enfrente a la puerta de salida para así ir al vagón que estaba al frente suyo para así pedir unas meriendas para guardarlas para la noche.

Dicho y hecho el peliverde y la azabache esperaron enfrente de las puertas antes de que el tren se detuviera, cuando por fin se detuvo las puertas se abrieron por lo cual ambos adolescentes salieron del tren con sus maletas y mochilas a la mano.

Después de unos minutos el tren volvió a partir devuelta a Kyūshū, después de esta acción el peliverde y la azabache pudieron ver a la lejanía cómo era la ciudad, era bastante grande, de eso no había duda, si tuvieran que comparar la ciudad de Musutafu con su antiguo hogar en Kyūshū, Musutafu era 4 veces más grande que la ciudad de Kyūshū por lo cual tendrían muchos lugares que ver, pero primero estaba su equipaje por lo cual bajaron de la estación donde se encontraban para así tomar rumbo hacia su nuevo hogar.

Oyuki: Vaya, esto es increíble, mira cuantas tiendas hay alrededor de esta calle.

Izuku: Vaya, si que son muchas, si quieres luego vemos que nos pueden ofrecer, pero por ahora tenemos que ir hacia nuestro nuevo hogar.

Oyuki: ¿Sabes cuál es el camino?.

Izuku: Claro, lo memorice antes de salir del tren, no tardaremos mucho en llegar.