Cap-1

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Amaba la soledad, amaba hacer las cosas por mi misma sin necesidad de que me estuvieran molestando.

Mi pasatiempo era pintar, y al parecer tenía talento para ello, solía ir a los parques para relajarme y dibujar un poco, para ver si conseguía escapar de la realidad que me atormentaba

(...)

Desde pequeña tuve el sueño de tener un príncipe azul, toda niña siempre tuvo eso, no? El típico chico rubio, de ojos azules, apuesto, bla bla bla.

Cuando entras en la etapa de la adolescencia todo cambia, te das cuenta de que el amor no existe, solo la atracción y el uso, cuando te das cuenta que te utilizaron y todas esas historias que te hiciste en tu cabeza antes de dormir no fueron más que sueños frustrados.

En mis dieciséis años nunca he sido buena en la escuela, odio los libros, me desespera leer, tanto que una vez por no leer ni mirar me coloqué repelente para mosquitos en lugar de perfume.. ese día pasé la mayor vergüenza del mundo

(...)

- Agh~! Desde cuándo dibujar es tan difícil?

Suspiré frustrada y desacomodé mi cabello mientras tiraba otra hoja de papel a mi lado, había intentado hacer el dibujo muchas veces pero simplemente hoy no era mi día para dibujar

- Una vez más Danna, no pierdas la cabeza - me dije a mi misma para volver a dibujar

Me concentré lo suficiente y tracé con cuidado cada línea, sentí una presencia a mi lado lo cual ignoré

- Ehh hola, esperas a alguien?

Miré al chico a mi lado y fruncí el seño, bufé algo molesta por la reciente interrupción

- Esperaba a que llegara la inspiración para mi dibujo y cuando llegaste se espantó, gracias

Le respondí a la defensiva y sonreí de forma cínica para volver a concentrarme en dibujar, él no le dio importancia a mi comportamiento y comenzó a mandar mensajes de texto en su celular. El molesto ruido que hacía al escribir y al mandar o recibir un mensaje, me exasperaba aún más.

- Uno, dos, tres, respira y ten paciencia para no matarlo. Es solo un desconocido, no lo volverás a ver Danna.

Miré al chico a mi lado, tenía un buen cuerpo, jamás lo admitiría en voz alta, me fijé un poco más para comenzar mi dibujo.

- Tengo novia y si ella te ve comiéndome con la mirada no creo que termines bien.

Levanté una ceja de forma burlona y reí con sarcasmo.

- Ya quisieras..

Murmuré y me levanté para mirarlo y dedicarle una leve sonrisa.

- Lunático

Me dije internamente y caminé a casa sin mirar atrás

Deja vuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora