REMAKE PROYECTO C.R.E (FBI x ONU, URSS x Reich)

Decisiones en balas

No fue un mayor problema para México patear la puerta y derribarla, de inmediato se escuchó una escopeta rugir y de manera instintiva el tricolor se lanzó al suelo haciéndose bolita, sus ojos se aguaron rápido y sintió como su cuerpo no le respondía de manera correcta... tan humillante. Sin embargo, la organización de la paz ni se inmutó ante el disparo, pudo deducir rápidamente por la altura y complexión física que esa persona era el humano que tanto estaban buscando. Humano que, por cierto, apenas vio a quienes les había disparado y casi se le sale el corazón, sus entrañas se contrajeron mirando a la mismísima ONU en su casa, definitivamente su vida acabaría ahí y no como a él le hubiese gustado.

-No te preocupes, no mencionaré esto en mi reporte –Dijo ONU de manera tranquila alzando su mirada mostrando una sonrisa amable haciendo sus pupilas e iris más grandes de manera voluntaria para verse menos intimidante, tomó una pose diplomática y con una de sus manos ayudantes acarició la cabeza del tricolor quien se sorprendió ante el contacto, cuando México alzó la vista se topó con esta amigable y aterradora (según él) mirada de su jefe, nunca lo había visto con esa expresión de "bondad y comprensión", El tricolor no dijo nada, solo se reincorporo y se colocó a lado de ONU. Para ser sinceros, las armas lograban aturdirlo y ponerlo en un estado de ''Trance'' por lo cual internamente agradeció a ONU que lo despertara.

A pesar de que Nylan estaba más que sorprendido, frunció el ceño rápidamente y se tragó sus nervios para poder hablar, no podía permitirse ser débil, no más.

---¿Puedo saber por qué demonios la gran Organización de las Naciones Unidas y un... puto ilegal están en mi casa sin invitación?

Se veía convincente, con una pose firme y un gesto brillante, transmitiendo que no dudaría en disparar de nuevo si la situación lo obligaba a ello... pero ONU pudo ver como temblaba ligeramente su pulgar en el gatillo, aguantando una sonrisa al ver a este pseudo criminal que no se atrevería a dañarlos realmente. No importaba que tan buena fuese la actuación de ese pequeño humano, no podría engañarlo. Claro que justo a lado estaba México temblando ligeramente como un chiguagua rabioso, no le gustaban esas cosas escupe fuego.

---¿Te refieres a esta madriguera de ratas como ¨casa¨? ---Escupió el de cabellos negros con la mirada afilada, no dejaría que ese chiquillo le faltara al respeto de esa forma, sin embargo para su desgracia recibió una mirada fría de ONU que lo hizo callar.

ONU estaba más enfocado en analizar a Nylan, postura firme y ojos como de clavo, que no tenían miedo de mirarlo directamente... supuso que se debía a esos lentes de sol, le parecía extraño que el humano tapara su cara en su propia casa, lo que significaba una gran vergüenza de su parte, pobre ser ingenuo, ONU siempre conseguía lo que necesitaba y en ese momento lo necesitaba a él.

-Así que tú eres Nylan Flowers –-Habló ONU de forma respetuosa e incluso dulce, se sentó en la silla de la mesa que se encontraba a su lado, juntó sus piernas formando una postura relajada pero vulnerable para demostrar que no era un peligro, la organización le hizo una seña a México para que se sentara en el sillón que estaba atrás, México vio el sillón e hizo una mueca de disgusto por darse cuenta que había alcohol derramado en él, así que optó por sentarse en el suelo, con brazos y piernas cruzadas demostrando su enojo, Nylan quien no había dejado de apuntar con su escopeta al ver las acciones de la organización se relajó un poco pero no dejaría de estar alerta, ahora con la cabeza más despejada pudo darse el lujo de observar con más detenimiento a los allanadores, primero observó al salta muros, era algo bajito, pero tenía una mirada fuerte, desbordando un claro mensaje ''No te atrevas a subestimarme''. Luego observó a la ONU... tenía un traje pulcro, su posición demostraba elegancia, era alto y delgado, tenía una figura de reloj de arena, su ligera sonrisa y sus grandes ojos le transmitían inocencia, se sintió extraño y las preguntas volvieron a escurrirse en su mente ¿Por qué una persona tan importante estaría ahí? Se sentía intimidado por la organización, aunque esa no fuese la intención del azulado, su gran atractivo y tranquilidad se le hacían totalmente anormales, fuera de este mundo... se sentía en su juicio final, como si un ángel lo hubiera venido a juzgar por todos sus pecados y lo peor de todo es que ni siquiera en ese momento podía dejar de pecar. Los ojos de Nylan resbalaban por las curvas y cintura contrarias, tratando de colarse por debajo de sus ropas notando el botón suelto de aquella angelical figura.