Cartas para él

Epilogo

Tal vez mis decisiones nunca han sido las correctas, tal vez me arrepiento muchas veces de lo que he hecho, pero siempre he tenido en mente que si no lo intento jamás sabré lo que pasará, por eso ahora voy de camino a la oficina de correos, y que dios me de fuerzas, porque mañana te llegaran todas mis cartas.

Doy un paso, suspiro, veo el paquete en mis manos, vuelvo a suspirar y sigo caminando. Mi indecisión hizo que la noche cayera y yo sigo caminando, preguntándome si es lo correcto.

-Buenas noches- hable al entrar a la paquetería.

-Buenas noches, ¿en qué puedo ayudarte?- sonrió la dependienta.

-Quiero enviar este paquete.

-Necesito que me deje sus datos aquí y aquí los de la persona a quien envía, por favor. El paquete tardara de dos a tres días hábiles en llegar. ¿pagaras tú o la persona que lo reciba?

-Yo lo haré.

Mi corazón latía fuerte, estaba nerviosa, quería observar ya su reacción, saber si me correspondía o no, la próxima semana toda mi vida cambiaria pues esta decisión afectará todo lo que me rodea.

-Muchas gracias, se te enviara un mensaje de que han recibido tu paquete. Buenas noches.

-Gracias, buenas noches.

Suspire de nuevo antes de salir.

Caminar de noche es tal vez, lo único que odio en el mundo.

Caminar por las calles obscuras, sin nadie alrededor es lo que siempre me pone nerviosa, y es que una mujer siempre se siente insegura en un mundo como el que existe ahora... todo sería diferente si las fantasías fueran realidad, si no existiera el peligro ni la delincuencia, si cada quien viviera en su mundo perfecto.

Soy sacada de mis pensamientos al escuchar pasos cerca de mí. Camino más rápido al sentir miedo. El cielo nublado hace que mi miedo incremente cada vez más. Mi corazón late rápidamente, al sentir como la persona que camina tras de mi esta por alcanzarme.

Caer al suelo me impide seguir corriendo, y un peso sobre mí no me deja levantarme...

Sentir un objeto frio y afilado sobre mi cuello hace que mi cuerpo comience a temblar. Cierro los ojos rápidamente al sentir como alguien da la vuelta a mi cuerpo en el suelo, retengo las lágrimas e intento zafarme.

¿Por qué mi cuerpo es tan débil ahora? Solo quiero escapar, alejarme corriendo, sé lo que pasara ahora y deseo evitarlo como sea. Ahora solo puedo pensar en escapar. Que alguien llegue a ayudarme, que él llegue a salvarme...

Tantas veces había escuchado sobre ataques a mujeres, tantas veces pensé que jamás me pasaría a mí, pero ahora está sucediendo. Alguien está sobre mí, tocando descaradamente mi cuerpo y cortando mi ropa con la navaja que antes estaba sobre mi cuello.

Dejo que mis lágrimas salgan junto con mis gritos. Gritó tan fuerte como puedo, alguien debe escucharme. Suelto fuertes sollozos al ser golpeada por el hombre que está arriba de mí. Quiero vomitar al sentir su boca en mi cuello. Gritó de nuevo, al sentir como mis costillas crujen al momento en el que ese hombre me golpea. Siento la sangre correr por mi cuerpo...

El dolor en mi cuerpo me hace soltar más sollozos, pero el golpe en mi cara me hace ahogar mi grito... Mis lágrimas no han dejado de caer mezclándose con mi sangre...

¿No tendría que haber alguien que me ayudara en ese momento? ¿Alguna autoridad? ¿Un policía? No. Nadie lo haría. Seguramente moriría desangrada ahora que ese hombre cortaba mi cuello con la navaja.

¡¿Por qué no me suelta ya?! Ya no puedo gritar, tampoco sollozar, no puedo oponer resistencia, mi cuerpo no puede más. La navaja se incrusta en todo mi cuerpo, matándome lentamente. Él está violándome de una manera tan cruel que lo divierte...

En este momento soy como una muñeca de porcelana rota... Solo deseaba vivir, pero mi pulso desvaneciéndose me indicaba que eso no podía pasar.

¿Por qué tenía que pasar esto? Tenía tantas ganas de seguir viviendo, de saber lo que pasaría mañana, que todas mis cartas se hicieran realidad. Dejo caer mis últimas lágrimas, al saber que él solo fue mi fantasía, que nunca más lo vería. Pienso en la preocupación de mis padres al no verme llegar, en el corazón roto de mi familia cuando les den la noticia... Por favor, solo quiero cerrar los ojos y que el mundo siga como hasta ahora, que todos me olviden pronto y sigan con sus vidas... Pero me alegra, saber que mi último deseo fue cumplido, que él sepa que lo ame hasta mi último suspiro...