CAPITULO 16

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Seokjin

Minho miró fuera de la pantalla por un momento.

—Tengo que irme. Te avisaré si aprendemos algo nuevo.

—Gracias por tu ayuda, Minho, —dijo Hyungsik.

—Cómprame un trago la próxima vez que nos veamos y esteremos a mano.

Hyungsik se rio entre dientes.

—Haré eso.

Todos se despidieron y el pánico se apoderó de mí mientras la pantalla del televisor se oscurecía. Yo era un jodido abogado. No traté con oleadas de crímenes, jefes de la mafia y agentes del Servicio Nacional de Inteligencia. Ponme en un tribunal y fui un dínamo. Aquí, estaba totalmente perdido. No tenía la menor idea de cómo mantener a Taehyung a salvo, pero sabía quién lo hacía.

—Jungkook, ¿qué hacemos? —pregunté. —¿Cómo puedo mantener a Taehyung a salvo de Im y Huang?

Jungkook sonrió.

—¿Hasta dónde estás dispuesto a llegar?

—Hasta muy lejos como sea necesario llegar—. No podía pensar en mucho que no haría para mantener vivo e ileso a Taehyung.

—Llama al juez Chae y pídele que venga aquí lo más rápido que pueda.

Fruncí el ceño mientras trataba de averiguar a dónde iba Jungkook con esto.

—¿Juez Chae?

—Y luego llama a Pierre y reserva el patio para el almuerzo. Él puede decidir el menú, excepto los espárragos. Felix lo odia. También necesitaremos mucho champán para celebrar.

—¿Qué estamos celebrando?

No podía pensar en una sola cosa para celebrar.

Jungkook me dio una palmada en el hombro.

—Tu boda, amigo.

Me atraganté con la respiración.

—¿Mi boda?

—Bueno. —Jungkook sonrió. —Tuya y de Taehyung.

—¿No se supone que debemos esconder a Taehyung de estos idiotas?

Jungkook se rio entre dientes.

—Esconder nunca parece funcionar para nosotros, pero ir en la dirección opuesta sí. Huang y Nayeon están diciendo a los medios de comunicación que su prometido ha sido secuestrado. Si te casas con Taehyung, ella no tiene una pierna sobre la que pararse. También hace que Huang y los Im parezcan sospechosos, especialmente después de que la policía ya cree que presentó un informe policial falso en tu contra por secuestro.

—¿No se supone que deberíamos estar en la estación de policía al mediodía para que pueda dar mi declaración? —Preguntó Taehyung.

—Aún mejor, —dijo Jungkook. —Puedes denunciar el acoso que has estado recibiendo.

—Pero le dijimos al detective que recién estábamos comprometidos. ¿No se verá extraño si me presento casado?

—Puedes decirle que aún no has tenido la oportunidad de contárselo a tus familias, —intervino Hoseok. —Por eso dijiste comprometido, no casado, pero cuando viste a Nayeon dando la conferencia de prensa, decidiste que la policía necesitaba saber la verdad.

—Sí, —dijo Taehyung, —pero cualquiera que mire la licencia de matrimonio sabría que estábamos casados después del hecho.

Sonreí, porque esta era la zona que conocía.

MI ABOGADO (Libro IV)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora