Es hora de pagar.

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Los hermanos Jiang estaban unidos en un fuerte y profundo abrazo, no tenían ganas de soltarse después de tantos años de estar lejos. Wei WuXian estaba siendo contenido entre aquellos brazos y muestras de cariños acompañados con palabras de amor por parte de sus hermanos a quienes tanto había extrañado.

Sumergidos en aquella esponjosa burbuja se encontraban cuando sienten que alguien se mueve junto a ellos. Curioso por saber de quien se trata, Wei WuXian aparta la mirada por un momento, solo para encontrarse con su padre arrodillado con el rostro al suelo.

- se que no merezco tu perdón, que fui un mal padre por no cuidar de ti... tampoco te voy a pedir que me perdones por todo el daño que sufriste, solo voy a decir lo siento....

Wei WuXian estaba temblando de pies a cabeza, para él no era agradable ver a su padre humillándose de esa forma, menos a sus pies. El joven no entendía que mínimo eso es lo que se merecía, que estuviera arrodillado a sus pies arrepentido por ser el peor de los padres. Se ha quedado mudo sin saber que decir, procesando lo que esta sucediendo. No sabe que sentir, si tristeza o felicidad.

Después de arrodillarse ante su hijo se pone en pies - ¡ya eres todo un hombre! - exclama con lagrimas apareciendo y viendo a Wei Ying aun escondido entre los brazos de sus hermanos, quien se quedó en completo silencio y sin querer moverse. Expectante ve a su padre, sin saber que esperar de él.

Jiang FengMian se acerca a su hijo y sin decir palabras, una de sus manos la lleva a la mejilla de aquel hijo a quien extrañaba y le debía tanto. Ver a su muchacho en ese momento, era ver a un pequeño niño mirando hacia arriba a su padre, esperando a que le acaricien la cabeza con muestras de cariño, pero la realidad no estaba lejos de ser.

Con dudas, debido a que existe la posibilidad de que su hijo lo rechace aunque sabe se lo merece, lo abraza. Siente como su pequeño tiembla y llora en sus brazos. No hay palabras por parte de ninguno de los dos, solo un abrazo que lo dice todo, desconsuelo, mucha tristeza, rabia, arrepentimiento, deseos, reconciliación...

Por su parte A'yuan llora en los brazos de su padre WangJi. Lan Xichen está sentado al lado de su sobrino, sujetándole de la mano y conteniéndose ante un enorme nudo que siente en su pecho y crece subiendo hasta la garganta, en lo que sus lágrimas ruedan por sus mejillas. Por su parte Lan QiRen se mantiene duro, no va a llorar, no al menos delante de aquellos que no sean de su familia.

Después cuando se hubieron calmado, los Jiang se sentaron en otro sofá junto a Wei WuXian, no hicieron preguntas estúpidas como el del por qué se fue, ¿por qué no hablo o recurrió a ellos por ayuda? No hablaron de lo sucedido para evitar que reviviera esos momentos angustiantes y dolorosos, solo se dedicaron hacerle sentir amado, esperado y no dijeron cuanto lo extrañaban para que no se sintiera culpable.

Cuando se estaban despidiendo Jiang Cheng se acerca a su hermano para decirle - recuerda que cuando éramos jóvenes hablamos de que cuando nos casemos en el futuro, seríamos el padrino de boda del otro, así que nos estaremos juntando para arreglar algunos detalles.

- ¡lo recordaste...! - exclama Wei Wuxian emocionado.

- claro que sí, recuerda que fue una promesa.

- habíamos acordado de organizar nuestros matrimonios - dice YanLi - no estuviste en el mío, pero me encargue de tomar muchas fotos y grabar toda la ceremonia para verlas juntos más adelante.

- nada más me encantaría... - dice Wei WuXian emocionado. 

- yo también participaré en algunos arreglos, me pondré de acuerdo con Lan QiRen, hace saber FengMian.

- los estaré esperando - le dice a su padre - me haría feliz que todos participemos en los arreglos de mi boda.

Después de haber pasado una tarde llena de emociones, los Jiang iban en el auto que es conducido por FengMian, de regreso a casa. No se sabe quien estaba más tenso, pero si se sabe que el ambiente se volvió frío y pesado.

Todo regresa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora