Tu Y Yo, Tal Vez?

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Ella veía los árboles pasar mientras que yo estaba viendo el camino para llegar ala cabaña
Cuando llegamos ella se bajo son decir nada y yo solo solté un suspiro

* Siempre te enamoras de las locas jaja

Ignoré la voz de mi cabeza para después bajar del carro y sacar las bolsas de la cajuela para poder deshacerme de todo lo que utilizamos

Cuando entre ala cabaña la vi sentada mirando el teléfono

* Que le pasa a esta estúpida generación, siempre están con los teléfonos

Solo entre para buscar el trapeador y todo lo que utilice para limpiar, para luego salir

Prendí un poco de fuego con las hojas que habían caído y fui hechando todo para quemarlo, veía tranquilamente sentada como se quemaba todo, hasta que sentí como alguien se sentaba a lado de mi sin decir nada, y no tenía que mirar a mi lado para saber que era aquella chica que me trae loca desde hace tiempo

* Dios deja de hablar como si estuvieras narrando algo- yo solo sonreí por el comentario de la voz en mi cabeza

- que haremos?- dijo ella, sentía su mirada

- a qué te refieres?- pregunté mirándola

- que haremos con los objetos con los que mate a los tres idiotas?- dijo haciendo una cara de desagrado, sonreí por aquella cara

- los vamos a tirar en el río- dije mirandola a los ojos

- tienes que regresar a casa, tus papás van a llegar en dos horas- dije viendo como se apagaba el fuego

- les dije que iba a venir ala búsqueda de la perra esa- dijo enojada

- aprovechemos a tirar las cosas al río y te vas a tu casa- dije para después pararme e ir con aquellos objetivos

- yo voy por ellos no te preocupes- me dijo levantándose, yo solo asentí, para después esperarla dentro del carro

* Que harás después para acercarte a ella?- dijo la voz de mi cabeza

*Que harás cuando todo esto acabé?- dijo de nuevo

- solo cállate de una puta vez- dije enojada

*se que estás evitando pensar en eso- solo suspiré

- ya- dijo ella al subirse al carro

Yo no dije nada, ya que solo me dedique a manejar hasta el puente que había en el río

Cuando llegamos admire la vista, mis pensamientos iban y venían sin poder evitarlo, todos estaban relacionados con que pasaría después de esto

*Que harás cuando todo termine?dijo la voz que había en mi cabeza

- si busque algo para estar cerca de ella antes, que te hace pensar que no buscaré algo para volver hacerlo, nunca me subestimes- dije sonriendo, esa respuesta mataba a todas las preguntas que se hacían en mi cabeza

-aqui estan- escuché que dijo aquella chica mostrándome la bolsa en donde se encontraban los objetos

Agarre la bolsa y sace uno de los objetos

- tráeme un pañuelo del carro- le dije y ella me hizo caso

Cuando me lo trajo lo pase por todo el objeto borrando cualquier huella que pudiera estar en ella y la tire al río y lo mismo hice con los otros objetos

Ella solo miraba y cuando vio que tire el último ella me miró a mi

-por fin- dijo feliz

- debes irte a casa, ya es algo tarde- dije mirandola

- tienes razón- dijo ella- vamos ala cabaña por mi auto

-vamos- dije para luego subir al carro y manejar hacia la cabaña, cuando llegamos, fui directo ala cabaña para ver qué no hubiera nada que pudiera inculpar a alguna de nosotras, cuando vi todo en orden, volví a salir para regresar a casa, pero no sin antes decirle algo

- todavía no acaba, es el principio, si pasa algo te llamo, tengo tu número- dije para luego subir a mi carro he irme de ahi

* Pobre chica, apuesto que la dejaste con temor jaja

- solo fui sincera, ella es confianzuda y eso puede arruinar todo

* Tu cambios de humor te hacen ver como una bipolar

- solo Cállate- dije para seguir conduciendo hacia mi cárcel

Cuando llegué no había nadie

- nunca hay nadie- suspiré al ver qué mi madre me había dejado la comida en la cocina con una nota

-llegaremos tarde, cuídate, te amamos mucho- leí la nota, sonreí amargamente al leerlo

Me fui ala sala a ver las noticias de lo que pasaba al mi alrededor

Solo oía puras estupideces pero debía estar atenta a todo, no puedo solo relajarme

Veía la cara de desesperación de las papas de aquellos chicos suplicando que sus hijos volvieran a sus casas

-son unos estupidos- dije susurrando viendo sus malditas caras de preocupación

* Ey relájate- dijo aquella voz en un cabeza

Me pare de aquel sillón para dejar los platos sucios donde comí

Apague la tele y me subí a mi habitación, no dejaba de pensar en ella

Estaba acostada viendo hacia el techo, era mejor la luna, así que salí al balcón de mi habitación para admirarla como cada noche mientras en mi cabeza estaba esa chica

* El amor te distrae, el amor no es para ti- escuché decir en mi cabeza, esas palabras se repetían una y otra vez en mi cabeza

-maldita soledad- dije mirando a la luna

Cuando sentí que era mucho tiempo que pase mirando la luna volví a mi cama para dormir, si es que podía.