"El hoyo"

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Había sobrevivido a las 2 rondas restantes, nada podía salir mal. Por ahora no me había tocado un piso alto, como el 1 o el ¿5? Se podría decir, era del 17 para bajo. No era malo, sus compañeros por ahora no lo han intentado atacar o comer, no tenía pleito con alguno o alguien específico, en la primera ronda le tocó con perxita. No tenía problema, de hecho una de esas rondas se subió hasta arriba. Rezaba para que le tocará un compañero "bueno", en realidad buscaba un mejor piso para no dejarles comida a los de abajo, así de egoísta era. ¿Que más da?

Se había despertado en su cama y enseguida miro el piso sin prestar atención a su compañero. ¡Lotería! El piso número uno. No le importaba nada ni nadie, era el mejor piso y se aprovecharía de eso, era algo claro. La felicidad no le duro mucho, había volteado a su costado. ¡Oh sorpresa! Le tocaba con el oso de mierda. Solo se quejó y se le fue la sonrisa de la cara, aun así no dejaría que arruinará nada ese oso de mierda.

─Es jodidamente increíble, me tocó con un pendejo. Pero no me vas arrebatar mi felicidad, me tocó en el puto número uno. ─El híbrido lo miro de reojo, le hubiera soltado unos insultos, pero no le importaría menos. Le había tocado en el 1. Ignoraría al pelotudo de Juan, o simplemente no hablaría mucho con el. Solo vió los demás pisos de abajo, mientras mira a Juan saludar a los de abajo o alguna estupidez.

─No me puedo quejar. De todos modos es el piso uno, ¿no Juan? Yo también estoy realmente feliz. Creo, almenos que mi compañero sea un boludo.─Le comentaría Spreen al otro. El oso suelta una risa burlona, de todos modos ya empezaría a bajar la comida, Juan no estaba contento con lo comentado estaba algo irritado pero tampoco lo odiaba, supongo que diría algo pendejo para molestarlo.

─Ah! Claro, el mio también es tremendo hijo de puta, pero no me quejare. ¿Sí o no, Spreen? Je.─soltaría una risita, como venía la barra de comida se dispuso a empezar a comer como si no hubiera comido en un mes. No quería dejarle a los demás, era un egoísta más.

─¡Comí como nunca!─¿Por qué no te comes está?─ Diría para seguir con las bromas pesadas, no pensaba que Juan se le "insinuó". Solo para seguir la broma─Oh, bueno. Todavía me cabe un poco más.─ suelta una risa el de lentes. Mientras se le queda mirando al oso.

─Chitosito me saliste, veremos que dirás en la noche, gafotas.─Juan se empezó a "sustar" por saber que le haría en la noche, son simples joteos normales, no? No tenía nada que temer.

A este pasó, ellos se empezarían a pelear, diciéndose insultos y pegándose entre sí, Juan rogándole a spreen que dejará de pegarle, estaba a 2 corazones de morir. Diciéndole que le diera un poco de carne de hamster muerto, los de abajo escucharían su pelea, pero les daría igual. El castaño, empezaría a dar halagos hacía el híbrido para que no le atacará y le diera de la carne, para no morir.
Luego le insultaría "nuevamente"

─Te voy a morder la oreja en la noche. ─Mordemela, me chupa un huevo.─pero no bonito, cabrón.─Spreen le pegaría un toque más, para que Juan se callara y diciéndole si le da comida. Hablarían un rato con los de abajo, que eran Rivers y Roier. Rivers empezaría a hablar que ya se había muerto Roier, Spreen se puso un poco "triste", mientras Juan solo le daría un poco igual, entre comillas por qué le agradaba Roier.

─Se murió Roier, tu nuevo mejor amigo, no ¿estás triste? ─Uh, bueno, supongo que sí estoy triste. ─Ahh, bueno, te puedo animar, ja─Que boludeces andas diciendo, capo.─cosas que salen de mi boca, oso estúpido.─Ya casí era hora de dormir y cambiar de piso, ambos se miraría de reojo para esperar las luces apagadas.

Tenían tensión guardada, aparte de que siempre se pelean, y dicen cosas estúpidas. O a veces se tratan "bonito" sin peleas, eran los únicos momentos tranquilos donde ambos no peleaban, no recordaban por qué lo hacían. Simplemente se peleaban por que querían era la única razón o algún que otro "rencor" ninguno se odiaba literalmente, solo eran bromas muy pesadas entre sí.

Las luces finalmente se apagaron, Juan habló. ─¿Dormimos juntos, te parece? ─Dale, acostate.─El de gafas se sorprendió, realmente pensaba que el híbrido iba a rechazar su idea. Sin más, se acosto en la cama. El pelinegro igualmente se acostó, pero del lado de la pared. Mientras Juan estaba del costado en donde se podía caer.

El castaño se daría la vuelta, para no mirar directamente a la cara a spreen era realmente raro, mientras el otro se ponía igual que Juan apuntando a su dirección. Juan tenía planes de dormir, en cambio Spreen no.

El híbrido pasaría una mano por la cintura de Juan, mientras el castaño se queda procesado lo que acaba de pasar, supongo que quería abrazarlo, no tenía problema pero quería joderlo un rato por lo mismo.─Oye, spreen. ¿Quieres abrazarme? Que gay.─El pelinegro no respondió, simplemente bajo más la mano hasta llegar al miembro de Juan y empezar a toquetear con sus dedos.

Juan suelta un leve suspiro, se estaba pasando y "quería" de cierto modo que dejará de hacer eso. ─O-oye, para no hagas es─El híbrido le taparía la boca con su mano libre, mientras seguía masturbadolo, el de gafas llegaría a su límite, corriendose dando un gemido no muy fuerte, por qué spreen seguía tapandole la boca.

─¡Mhm! ¡¿Qué te pasa, spreen!? ─diría entre "susurros" Rivers podía oírlos aún, aunque seguía dormida no quería ser descubierto que un oso gay, lo estaba masturbando. ─Te toca ayudarme, capo.─Spreen muestra la erección cuando levantó la sabana, ocasionalmente Juan se estaba moviendo mucho en la entrepierna de spreen, haciendo que este se "emocioné" por así decirlo, por los pequeños movimentos del castaño.

─Oyeme, que te hayas ilusionado por algo así, no es mi problema pero en mi cama no.─Mira bien hijo de puta. Me vas ayudar, aquí si no te mataré en las próximas rondas, entendes? Boludito de gafas.─Juan realmente no tenía nada que perder, moriría de una u otra forma, pero no quería que el que lo matará fuera el oso de mrd, pero esto era terriblemente humillante, igualmente no le quedaba dignidad.

Juan dio un suspiro leve, accedió. Nadie podía verlos desde arriba, solo de abajo. Así que el oso se sentó en la orilla de la cama, Juan puso una almohada debajo para poder incarse y empezar, masturba un poco al híbrido, para luego empezar a chupar la punta del miembro. Spreen agarra de la cabeza a Juan y lo somete haciendo que se ahogue. Juan se safa y se queja.─Agh..! Sí te voy a chupar la pija, mínimo se amable conmigo.─Que voy hacer amable, yo te hice el favor, ahora duelvemelo. Chupa pijas.─Tenía razón, era un chupa pijas. Pero ya qué, era un modo de "supervivencia", o no? El de lentes luego de respirar metió el miembro de spreen en toda su boca, dejando todo húmedo el miembro del oso. Haría lo mismo repetidas veces, hasta que se acostumbró, spreen daba leves jadeos. Corriendose en la cara de Juan.─Ugh, estúpido oso, me manchaste toda la puta cara.─Bueno, ahora tu hoyito, Juan.─Tu dijiste que te ayudará en esto, no que me querías dar la ronda completa. ─apurate boludo, sacate el pantalón, se acaba el tiempo.─Eres un hijo de perra.─El castaño haría caso, se sacaría los pantalones.

Spreen empezaría a meter su pene dentro de Juan. Como Juan no estaba acostumbrado, le dolía, se quejaba. Haciendo que spreen se adentrara más rápido. ─S-spreen, basta.─No, yo te lo hago como quiero, bonito.─luego empezaría a embestiar rápido al de lentes, Juan soltaba gemidos, spreen le gustaba ver las expresiones de Juan. El oso subiría la pierna del castaño arriba de su hombro.─Uh, estoy llegando a mi límite, gafotas.─Ah.─El oso se había corrido dentro de Juan, sin muchas fuerzas se dejaron caer en la cama.─Vete a tu puta cama, oso de mierda.─Dale Pa, tu me invitaste a dormir.─Como sea. Tengo sueño y dormiré. ─Juan se subiría los pantalones y se iría a lavar la cara, al igual que spreen. Se acostaría a dormir, realmente quería saber en qué piso le tocaría, y esperaba que no le tocará con el híbrido. Ahora Juan estaría del costado de la cama y spreen del lado de el piso. Ambos viendo para dirección contraria.

El castaño no lo quería ni ver, estaba terriblemente humillado, y quería descansar. Por otra parte, el pelinegro solo quería dormir estaría victorioso. Le había cerrado el orto a Juan por decirle tantas boludeces.

El hoyo de Juan ;; Spruan. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora