capitolo primo

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capítulo dedicado a @DanKimTh 💜

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Seúl 2023

Las calles de Seúl se encontraban atiborradas de personas todas con distintos propósitos, estudiantes regresando a sus casas o en camino a academias para clases de refuerzos, trabajadores en busca de alimentos o una copa después de una larga jornada, familias paseando con sus hijos. A Jungkook a veces le gustaría ser como ellos, poder tomarse un día para divertirse, un día para hacer todas esas cosas de las que ha tenido que privarse.

Jungkook es un alfa estudiante de medicina de segundo año a sus veintidós, lo cual, si ponemos en perspectivas las edades promedio a las que los estudiantes entran a la universidad, estaría bastante atrasado.

Su carrera y sus múltiples trabajos no le permitían tener mucho tiempo libre y él estaba bien con eso, o al menos, quería convencerse de ello. Por ende, cuando se anunció que la galería de arte tendría una exposición exclusiva de un día de su pintor favorito, Vincent Van Gogh, supo que tenía que estar en ella si o si, no importaba lo mucho que tuviera que trabajar para comprar su entrada, o que tuviera que viajar de un lado al otro de la ciudad, él se merecía verla.

Había tenido que hacer una fila en línea de dos semanas para comprar su entrada y ahorrar gran parte de su salario para poder pagarla, lo que significaba mucho más trabajo y muchos más problemas con su padrastro por el dinero, pero lo había logrado, y estando ahí parado justo frente a la entrada de la gran galería, podía asegurar que todos sus esfuerzos habían valido la pena.

Miro por última vez su boleto impreso antes de acomodarse los guantes, el clima invernal aún presente en pleno enero, cruzó la puerta giratoria del recinto con una sonrisa, dentro todo parecía diferente, todo parecía mucho más cálido.

Caminó con paso decidido al recibidor, extendiéndole su boleto a un sonriente castaño detrás del mueble que por el dulce aroma que este emanaba dedujo se trataba de un omega.

— Buenas noches señor, recuerde que el recorrido puede durar desde 30 minutos a una hora y media, no está permitido tocar las pinturas ni cruzar las líneas amarillas frente a cada una por seguridad de la misma —explicó con tono aburrido, como alguien que ha dicho lo mismo más veces de lo que le gustaría— Este es el último recorrido del día, por lo que le recomendamos no tardarse más de la cuenta, disfrute la exposición.

— Gracias —respondió Jungkook, guardado su boleto sellado en el bolsillo de enfrente de su chaqueta, no estaba seguro si se lo volverían a pedir, pero prefería evitar inconvenientes.

El recorrido estaba pensado para iniciar del lado izquierdo y seguir el curso de las manecillas del reloj, en un edificio redondo tenía sentido que esa fuera su distribución. Al azabache no le importaba haber tenido que comprar su boleto para el último recorrido, ni siquiera después del aviso del recepcionista, él tenía hasta una hora y media para disfrutar de su pintor favorito, y no planeaba desperdiciar ni un minuto.

La primera pintura que se encontró era sin duda una de sus menos favoritas, y no porque fuera fea o no la conociera, sino porque a diferencia del azul y naranja que solía ver en los demás trabajos del artista, Los comedores de patatas, era mucho más obscura, con grises y cafés que le hacían recordar a su propia vida. Le parecía curioso que una pintura como esta hubiera sido intentada robar en dos ocasiones, lo que lo hacía pensar que, si alguien había querido llevarse una pintura así, también podría haber alguien que intentara robárselo a él. Jungkook río suavemente ante sus pensamientos.

La segunda pintura con la que se encontró fue Terraza del café por la noche, en esta los colores comenzaba a ser más llamativos, azules, verdes, lilas, amarillos y naranjas predominaban en ella. A Jungkook le encantaba esta pintura, Van Gogh había dicho que prefería pintar fondos nocturnos con cielos iluminados por estrellas a noches repletas de obscuro negro, y el azabache esperaba que algún día su vida se volviera eso, que pasara de sentirse como un cielo negro a una noche estrellada.

El Corazón de la Mafia | KookTae-TaekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora