Potestad (Mairimashita Iruma - kun) Yaoi 18+

Llegando.

Notas: Iruma no puede tocar demonios directamente o sus alas se volverán negras, por lo cual cuando quiere tocar a algún demonio o estar cerca de ellos se coloca una barrera mágica que le permite “tocarlos”, pero no directamente, él los puede “tocar”, pero no al revés si ellos lo hacen serán castigados con la muerte.

Iruma esta en la segunda división de ángeles, las potestades, que se encargan del equilibrio natural de las cosas dado por el creador, en el caso de Iruma se encarga del equilibrio del inframundo junto a otras 4 potestades, en total son 5, pero de entre todas él es más fuerte y el que se encarga de ser mensajero y juez, los otros 4 se encargan de que nadie salga del inframundo para que no rompan el equilibrio que hay en la tierra (ser invocado por los humanos es algo diferente a salir por su voluntad, por lo cual ahí intervienen otro tipo de ángeles).

El tiempo en el cual esta escrito es cuando los anormales van en tercer año de la escuela, así que son “más grandes”, pero Iruma fue creado justo después del inframundo junto con las otras 4 potestades, así que en edad es más grande.

Iruma es la única potestad con 6 alas, ya que generalmente tienen 4, él es así porque el creador lo hizo el jefe entre los 5 y para diferenciar el rango le dio un par de alas extras, así que si él le diera orden a las otras 4 tendrían que obedecerlo a pesar de estar en el mismo nivel jerárquico. Los ángeles de primera división ven a Iruma como un igual a pesar de que no esta dentro de su misma división.

Digamos que Iruma sería el Lucifer de mi fanfic, es el consentido del creador.

En este mundo Baal no quiere gobernar el inframundo, no hay comploto de nada, básicamente el rey demonio llegó a su puesto por trafico de influencias, pero fue “honesto” su ascenso.

Los personajes presentes abarcan lo que va del manga, si no lo han leído no se espanten, NO HAY SPOILER, ya que no sigue la historia lineal, pero si hay nombres que posiblemente no conozcan.

Espero que disfruten en leerlo como yo en escribirlo.

Capítulo 1.

- Iruma – la voz sonó en todo el infinito fuerte y profunda, así que el pequeño ángel no tardó en presentarse frente al creador inclinándose con respeto – me han confirmado que hay un nuevo rey demonio en el inframundo – el menor vio al creador con sorpresa, ese puesto llevaba mucho tiempo vacante y se había vuelto un problema para el equilibrio de las fuerzas del bien y del mal – como el jefe de las potestades iras al inframundo y le dirás que debe venir a conocerme, te quedaras ahí hasta que sea el día de la presentación y te aseguraras de que el nuevo rey demonio conozca las leyes que se le impusieron al inframundo, las entienda y las ejecute como están en el equilibrio natural – el menor asintió – si es un problema, llama a Gabriel para que los arcángeles se encarguen de todo – él aceptó su misión y se retiró del lugar.

Iruma era un ángel con rango de potestad, era uno de los 5 que se encargaban de vigilar el equilibrio del inframundo para que fuera correcto, desde que él había sido creado siempre había tenido la encomienda de mantener vigilado el inframundo para asegurarse de que el rey demonio no sobrepasara los limites ni rompiera las reglas del equilibrio natural que había puesto el creador.

Él sabía que su trabajo era muy importante, así que siempre lo había hecho bien, desde el primer rey demonio hasta el último que había desaparecido. Cuando realizaba su encomienda lo hacía tan bien que él había decidido el destino de muchos de los reyes cuando habían roto las reglas, él había enviado a los arcángeles a matar a esos reyes que querían poner sus reglas por encima de las de su creador.

El antiguo rey demonio Delkira había sido muy amable y a él le había agradado, cuando bajaba a supervisarlo siempre tenía una sonrisa amable y un inframundo tranquilo, su desaparición le había preocupado y a pesar de que había solicitado permiso para investigar la situación el creador se lo había negado, argumentando que la desaparición de un demonio no era merito suficiente para que él bajara a buscarlo, eso lo había molestado un poco, pero recordó que su trabajo era vigilar el infierno, no hacer amistad con sus habitantes, así que lo dejó estar y esperó a que un nuevo rey demonio naciera.

Iruma abrió sus alas y bajó lo más rápido posible del cielo, debía ejecutar las órdenes del creador lo más rápido posible, para él saber que le era útil lo hacía sentir bien y sobre todo lo hacía sentir especial. Él no era especialmente poderoso o el más importante entre los ángeles, de hecho, había un sinfín de ángeles más poderosos que él, pero el creador lo había nombrado líder de las potestades que se encargaban de mantener vigilado al infierno y eso era una gran responsabilidad.