Cāi Cāi

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Capítulo 49: Acto Siete "Carta de fans" ①

—— Los recuerdos de hace cinco años llegaron a un abrupto final.

Tan Yiming se sentó entre la audiencia y miró las luces del escenario.

En el escenario, el niño cantó con deslumbrantes pasos de baile. Su voz es tan penetrante como lo era hace cinco años.

Increíble.

Como si ayer todavía estuvieran charlando y riendo por Internet, pero en un abrir y cerrar de ojos, cuando se volvieron a encontrar, llevaban casi dos mil días y noches de diferencia.

...

Acompañado por el enérgico An Kequ, la "Reina de las Botas", que fue completamente ensayada por los estudiantes, finalmente llegó a su fin.

Los eyectores a ambos lados del escenario rociaron cintas doradas brillantes y sacudieron las exageradas pestañas postizas envueltas en un ceñido vestido rojo de lentejuelas a lo Guess.

Su mirada se desvió levemente hacia la izquierda y la parte trasera del auditorio, y encontró fácilmente la figura extraña y familiar.

Xiang Gui ha soñado con el hombre innumerables veces.

Debería ser alto, con ojos altísimos, sonriendo con calidez en sus cejas. Pero cuando realmente apareció frente a sí mismo, Xiang Guai descubrió que todos los adjetivos que habían aparecido en su mente no eran suficientes para describir a un hombre.

En el auditorio, Tan Yiming primero se levantó y aplaudió. Era guapo y erguido, muy prominente en la audiencia de menos de cien personas, se mantuvo unido e incluso la audiencia se puso de pie uno por uno.

Al final, hubo un estruendoso aplauso en todo el pequeño teatro, y aplaudieron en voz alta, elogiando sinceramente a los jóvenes estudiantes en el escenario.

Aunque su actuación fue inmadura, no se descartó el entusiasmo contenido en ella.

Cuando finalmente cayó el telón, Xiang Guai, que estaba tan cansado que colapsó, se suavizó y casi cayó al suelo.

La heroína que estaba junto a él lo apoyó apresuradamente y, junto con los dos ángeles a la izquierda y a la derecha, lo pateó fuera del escenario.

Esperando para sentarse en el camerino, los compañeros de clase de logística que esperaban en el corredor detrás del escenario ya se apresuraron.

Este feed, la mano de chocolate, y alguien encargado de quitarse la peluca.

La redecilla para el cabello estaba completamente mojada con sudor, y el suave cabello negro se aferraba al cuero cabelludo, golpeado, y el sudor corría, mezclado con los cosméticos en la cara, luciendo particularmente avergonzado.

Alguien se agachó y le quitó las botas apretadas de tacón alto. Le costó mucho trabajo quitarse los zapatos porque los pies estaban hinchados. Cuando los pies del niño finalmente se liberaron de las botas, un fuerte olor a sangre llegó a su rostro y una compañera de clase gritó: "¡¡¡Xiang Gu, no más amputaciones !!!''

"..." Xiang Guiyou miró la boca del cuervo.

Después de eso, se perdió mucho tiempo con el desbridamiento y la aplicación. Las burbujas de sangre rotas se rociaron con Yunnan Baiyao. Con cada rocío, los hombros se encogían hacia Guai y las cejas se juntaban, pero no había dolor.

Después de todo, para volver al escenario y bailar de nuevo, experimentó mucho más dolor que ahora.

Ponte las chancletas, suspiró cómodamente a Guess y recogió el desmaquillador al lado.