Experimento trece

Introducción

Me presento, mi nombre es Ryan y hoy vengo a contarles un secreto, he descubierto un universo fántastico dentro de mi habitación.

Decidí llamarlo "Experimento trece".

Muchos dirán ¿Ryan, por qué? Y por eso, acá les traigo el significado. Tal vez tuve muchas razones para hacerlo, pero tranquilos, podrán darse cuenta.

A pocos días de que comience el invierno, como todos en general, comparto más tiempo con mi familia, para empezar llego tarde de estudiar, tal vez no sepan, pero este año comencé el liceo, algo totalmente nuevo y extraño para mí.

Muy rara vez salgo a jugar con mis amigos, al parecer es un buen momento para protegerse del frío, quedandose en casa. Aprovecho para realizar mis tareas temprano y en la tarde me acompaño de una taza caliente con chocolate o té.

Los domingos en general, mi mamá aprovecha el día libre y calienta la casa con la estufa a leña, es mi momento favorito del invierno. En fin, sin escapar del tema, hubo un domingo en particular, 13 de Junio, afuera estaba a punto de congelar, recuerdo que esa tarde hacía mucho frío. Mi mamá encendió la estufa, pero yo decidí permanecer en mi habitación, recuerdo haber encendido mi calefactor y el televisor, ni siquiera estaba en mis planes moverme de la cama.

Comenzó a llover tan fuerte, me levanté a mirar por la ventana, parecía que todo se comenzaría a inundar, bueno tal vez exageraba un poco. Fue en ese momento, de reojo vi una caja sobre mi ropero, no recordaba que hubiese estado ahí antes. Así que convertí mi mesa de luz en un gran escalon, para poder alcanzarlo.

Era una caja vieja, apenas se lograba leer, traía polvo encima, como si hubiese estado guardada allí, por años. detrás tenía escrito un largo fragmento, tal vez era el instructivo de juego o la advertencia del experimento.

Para poder abrirla, tenía que ingresar un código secreto, primero pensé, seguramente ya tenga uno, como iba a saber cual, de todos modos, decidí ingresar el mío propio, tal vez era uno por jugador. En el lateral izquierdo, tenía un pequeño tablero numérico, presioné con fuerza 1306, ya que sus botones estaban algo viejos y oxidados.

En la parte tracera de la caja, giró una pequeña rueda, junto a un crujido agudo, como si se ubiese abierto una puerta, con mucho miedo abrí la caja, me generaba curiosidad lo que conservaba dentro. Entre las grietas de su empaque de carton, podía verse con claridad como salía la luz, así que lentamente pude ir viendo lo que contenía dentro.

Un par de notas viejas, que decidí leer más adelante, cada una dentro de un sobre que permanecía sellado con un número y a su derecha, las iniciales RL. No me llamó tanto la atención como lo que se escondía detrás de las notas. Trece tubos de ensayo, perfectamente cerrados, con muestras extrañas, liquida, solida, viscosa, de colores relucientes y olores aterradores, los cuales me llevaron a querer saber más.

Estos estaban dentro de una pequeña caja, que recubría su interioir con un suave colchón de gasa, protegiendo cada tubo para que no se rompiera, al parecer dentro de estos, se escondía una historia diferente, que revelaría ante mi, lo maravilloso que ocultaba el universo, hasta hoy.