|~Capitulo 13~|

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Cuando la Patria está en peligro todo está permitido, excepto no defenderla".


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Era la una de la madrugada cuando Rick se acercó lentamente a la celda de Myers. Iba a desencadenar al asesino. Estaba claro que ninguno de sus colegas se había atrevido a hacerlo y Rick podía entender por qué. Myers había tratado de acabar con la vida de Ryan apenas unas horas antes. Pero Rick no pensó que fuera correcto o simplemente dejarlo encadenado mientras estaba encerrado en su celda. De todos modos, sentí un ligero escalofrío recorrer su espalda. Pero no. Estaba bien, estaba seguro de ello. Seguro. Michael le había salvado la vida después de todo. Podía ver a The Shape parado en los barrotes de su celda, mirándolo directamente.La primera vez que Rick lo vio, estaba mirando hacia la celda de Danielle Hayward. Maldición. ¿Cómo demonios había sabido Myers que estaba allí? Rick respiró hondo y se detuvo a unos pasos de distancia, fuera de su alcance.

"Hola Michael", dijo en voz baja. La Forma no se movió un músculo, pero sus ojos permanecieron en el rostro de Rick. "Quiero decírtelo en la cara. Gracias por... Por salvarme la vida".

Por supuesto, silencio. Rick se sintió viajar. Dios Michael Myers lo estaba nervioso, como a todos los demás. No era de extrañar que fuera uno de los hombres más temidos en... Diablos, el mundo. Pero Rick sabía que tenía que hacer esto. Tenía que demostrarle al asesino que podía confiar en él. Al menos le debía eso.

"Michael, quiero quitarte las cadenas. Si entro y me acerco a ti, ¿estoy a salvo?".

Nada. Ni un tic. Rick quería usar su juicio, dado lo que Myers había hecho por él pero... Pero aun así... Sus manos fueron a su cuello automáticamente. Eso habia estado cerca. Muy cerca. Dejando a un lado el hecho de que había salvado su vida, si Myers aún necesita matar, sería tan bueno como suicidarse. ¿Debería hacer esto? si pero solo?

Rick estaba alcanzando su radio, decidiendo que quería refuerzos por si acaso, cuando podría haber jurado que Myers asintió con la cabeza. Solo una vez, un leve movimiento de su cabeza. Pero Rick lo vio.

¿Quieres morir?

? Pensó mientras caminaba hacia la celda de Myers. Estaba confiando en la palabra del asesino enmascarado.

¡suicidio

! Gritó su mente. Sin embargo, levantó la mano lentamente, presionando el botón para abrir la puerta del asesino.

"¡Hola Ricky!" Chancer gritó desde la puerta de al lado. "¡Obviamente quieres morir después de todo! ¡Ven aquí, lo haré por ti, con mucho gusto! ¡Myers ha tenido una buena cantidad de asesinatos!"

Rick ignoró al gusanito viscoso y entró en la celda de Myers. Tenía que ser profesional, pero su odio hacia Derek Chancer lo atravesaba. El hijo de puta habia tratado de matarlo, y casi lo logra. ¿Myers le había salvado la vida? ¿Otro asesino? ¿Alguien que tenía mucho más derecho a ser temido que Chancer? Eso fue... fue...

Rick atravesó lentamente la puerta, presionando el botón en su cinturón para cerrarla nuevamente. Si Myers decidió atacarlo ahora... Dando un paso hacia el asesino, sacó la pequeña llave y comenzó a desencadenarlo. Antes de que pudiera detenerse, Rick se encontró hablando en voz baja.

"¿Qué pasó Michael? ¿La llamada telefónica de Adam? ¿Es por eso que atacaste a Ryan? Es un buen tipo, uno de mis mejores amigos. Lástima que no pudiste atacar a Derek allí en su lugar. Hijo de puta". Nada. Pero Rick continuó hablando en voz baja mientras quitaba las cadenas del asesino. "¿Por favor no vayas por él una segunda vez?" Le suplicó al asesino. "¡Es un gran tipo! Créeme, estoy seriamente tentado de... Bueno, digamos que comete un error para que tú y Chancer acaben en la misma maldita celda. No creo que nadie se arrepienta de verlo partir. Él no soportaría.. . Bueno, una oportunidad contra ti y lo sabemos".

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