Capítulo 37..."¿Qué puedo hacer ahora?"

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Hoy...era el funeral de Francisco, abrí los ojos...estaba en mi habitación cubierta entre las sabanas, abrazaba una almohada, solo recuerdo que ayer...después que murió Francisco, mi tía tuvo que venir por mí, y al llegar me encerré en mi habitación y lloré hasta quedarme dormida, al menos eso es lo único que recuerdo.

Me levanté, miré el reloj, eran las 2:24 pm...había dormido mucho, oh no sé...lloré casi toda la noche, me levanté de mi cama y me dirigí al baño y tomé una ducha, pero me tarde, el hecho de sentir el agua resbalar por mi cuerpo...creó...que se siente bien, es como si lloviera en el baño, pero el hecho de que el agua este cayendo por la regadera arruina la teoría de que esté lloviendo en tu propio baño.

Tomé la toalla y me envolví en ella, salí de la regadera, me cepille mis dientes, me puse un vestido negro, claro antes mi ropa interior, salí del baño y me puse unas zapatilla negras que tenía guardadas, me acerqué al tocador, me miré en el espejo...no sonreía ni por error, tomé el cepillo y comencé a cepillar mi cabello rubio y húmedo aún, me lo amarré con una coleta, me perfume, con mi delicioso perfume de rosas el que amaba mi madre.

Me levanté del asiento y tomé un suéter holgado, pero lindo, era de color negro ya que...para un funeral todos usamos el color negro, un color serio, un color...que no demuestra alegría alguna, sonreí al pensar eso, ya que...se podría decir que es mi color favorito, porque aunque muchos no lo crean, el color negro puede expresar muchas cosas, salí de mi habitación, baje las escaleras, ahí estaba mi tía, Colton y Barbará, mis primos irían al funeral ya que...bueno...Logan y Colton se me llevan muy bien, mi tía se acercó a mí, y tomó de mis hombros.

Iliana: ¿lista para irnos?

Alex: sí...-susurré

Salimos de la casa, entramos al auto, yo estaba en la parte trasera junto con mi tía, ya que Colton conducía, llegamos al panteón, era un lugar muy triste para mí ya que en este mismo panteón estaban sepultados mis padres, salimos del auto, y caminamos asía donde era el funeral, al llegar ahí estaban algunos compañeros de la escuela, familia de Francisco, algunos profesores y muchas personas más, claro...también estaba el ataúd donde se encontraba Francisco. Me acerqué a los padres de Francisco y Logan y los salude con un abrazo, la señora Tatiana y el señor Gabriel estaban destrozados, podría entender su dolor, ellos perdieron a alguien especial para ellos, supongo que sienten el mismo dolor que yo sentí cuando perdí a mis padres, no lo sé...

Tomé asiento junto a Logan,  y a mi otro lado estaba mi tía, solo miraba el ataúd que se encontraba justo frente a mí, todos tomamos asiento, ya que el padre comenzó el funeral, empezó con un discurso sobre que todos moriremos, que es parte de la vida, sin embargo en mi opinión...no creo que era justo que Francisco hubiera muerto a tan temprana edad, solo podía escuchar llantos, llantos con mucho dolor, esto me hacía recordar...recordarlo a él.

Padre: el joven Francisco que descanse en paz, quería que una amiga en especial hablará en su funeral, que de su discurso fúnebre, está amiga es la señorita Alexandra Martínez.

Todos voltearon a verme, yo no sabía nada de esto, no sabía que Francisco quería que hablara en su funeral, me levante de mi asiento y me paré justo a un costado del ataúd, respiré hondo, pensaba en que podría decir, sin embargo, el hecho de pensar que en que diré me hacía que no digiera nada, ¿cómo es esto posible?, pues no sabía cómo comenzar.

Siempre...(CD9)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora