01

590 69 20
                                        

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Inmediatamente al leer la respuesta de Hyunjin, el trío de amigas fueron golpeadas en la nuca por la misma

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Inmediatamente al leer la respuesta de Hyunjin, el trío de amigas fueron golpeadas en la nuca por la misma.

—Ya pasó su descanso, no se andén haciendo pendejas. —Dice Hyunjin dándoles a cada una, una cubeta con alimento para gallinas.— Vayan a darle de comer a las gallinas.

—Danos un ratito más, Hyun. —Suplica Momo con un puchero.— Haewon apenas nos iba a contar el chisme de su acosadora.

Haewon asiente efusivamente.

—¿Y si las tres estaban aquí porque no mejor hablaban en vez de twiteear?

Las tres se miran entre si sin saber muy bien que responder.

Hyunjin suspira.

—Bien, les daré unos minutos más, nada más porque yo también quiero saber el chisme. —La mayor toma asiento en uno de los brazos del sofá, justo al lado de Haewon.

Estaban dentro de la casa de la coreana, descansando tiempo de más después del delicioso desayuno preparado por Heejin, aunque desconfío mucho a la hora de comer por el enfado de la mayor.

No sería la primera vez que les deja alguna sorpresa desagradable cuando se enoja.

—No es gran cosa enserio. — Haewon mete la mano al cubo de alimento, jugando con los granos.— Simplemente me miraba mucho, creo que incluso ni siquiera parpadeo. Lo que me asustó fue que cuando quise entrar al autobús ella venía corriendo.

—Madres, que miedo. —Exclama Hyeju sentada al lado de Momo.

—¡Y tú qué me decías exagerada!

—La próxima que alguien te vea así, vas y te lo agarras a madrazos. —Momo sonríe inocentemente.— Así como le hace mi primo Yoongi cuando ve gente nueva por el barrio.

—Lo tomaré en cuenta. — Haewon acaricia su nuca, un pequeño descanso no era suficiente considerando todas sus tareas.— ¿A trabajar?

—Claro, pero antes quisiera pedirles una cosa chicas. —Comenta Hyunjin mirando al suelo nerviosa.

—¿Que pasa?

—¿Quieren salir en la noche? Es que Hekki me va a llevar con mis suegros y necesito ahogar mis penas. —Hyunjin se tira dramáticamente a los brazos de Haewon.

—Simón, nos compramos unas caguamas y unos Cheetos. —Momo aplaude contenta.

—Y también por una chikinenas.

Hyunjin suelta a Haewon para ir a taparle la boca a Hyeju.

—¡Cállate, que si te oye Hekki me castra! —Murmura asustada.

Estallan en carcajadas burlonas que terminan en Hyunjin mandándolas a patadas a darle de comer a los pollos.

Sin que se den cuenta Haewon se queda detrás esperando a que se alejen los suficiente, se asoma por la puerta comprobando que han desaparecido.

Una sonrisa se cuela por rostro.

—Ahuevo vámonos a tragar. —Dándose la media vuelta se encamina a la cocina para seguir disfrutando de los manjares que prepara su cuñada.— ¡Heejin sírveme de comer!

Desde la cocina una cuchara sale volando golpeando su cabeza.

Parece que Heejin sigue enojada.

Parece que Heejin sigue enojada

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

.
.
.

Voten 😔

Marihuano || AU HaelyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora