𝕄𝕚 𝕡𝕖𝕢𝕦𝕖ñ𝕠 𝕘𝕣𝕒𝕟 𝕒𝕞𝕠𝕣

Capitulo 4

• Seul • 8 de junio • 07:00 am •

Namjoon

Desperte tarde...

Me levante mirando todo a mi alrededor porque nada de esto me era familiar,recoste mi cabeza en la almohada mirando al techo y al escuchar las olas del mar algo hizo click en mi cabeza.

Mi auto jodido
La cabaña
Un chico llorando

Me levante para buscar mi teléfono y prenderlo,tenia 35 llamadas de hoseok y 6 llamadas de Jackson,el último mensaje que envie fue pidiendo a hoseok que mandara a alguien para llenar el tanque de mi auto,tenia una llamada perdida de mi madre y miles de notificaciones en instagram.

En la mesita de noche habia una pequeña nota acompañada de dos toallas enrolladas:

"Puede darse un baño y bajar"

Al menos es muy educado el muchacho.

Me dí un refrescante baño pensando en todo lo que habia ocurrido anoche,todo parecia un jodido misterios pues todo mi personal sabia que mis autos debian siempre permanecer con el tanque lleno y extrañamente esta vez el tanque estaba vacio,sali de la ducha secando mi cabello mientras tomaba mi teléfono,un nuevo mensaje llego con las indicaciones de la que seria mi agenda de hoy.

Tire el teléfono a la cama y me cambie rapido para salir en busca del muchacho de anoche,al dejar la habitación un agradable aroma a comida y café recien hecho llenaba la cabaña,al entrar a la cocina una linda figura se encontraba frente a la estufa moviendo suavemente lo que parecia ser el desayuno.

— Buenos días seokjin —No recibí una respuesta asi que me acerque y sin ni una pizca de vergüenza le solte una nalgada provocando que brincara— Se educado te dije buenos días

—Buenos dias aunque no tienen nada de buenos —Parecia enojado asi que solo sonreí por al menos recibir la respuesta que buscaba— No vuelvas a tocarme.

— Tendre que hacerlo si no eres educado conmigo —pase a su lado para tomar una taza y servirme cafe— Huele delicioso.

Juro que sus mejillas se pusieron coloradas y ciertamente eso me acelero un poco el corazón ¿Sera otro infarto?

— Este lugar se ve mejor que anoche —lo mire asentir aun sin voltear a verme— Puedo saber porque llorabas como magdalena.

—No es de tu incumbencia —sirvio la comida para llevarla a la mesa y se sento a un lado— No sé porque sigue aqui.

— No merezco esa respuesta cuando estoy siendo amable contigo —inflo sus mejillas y apreto los puños sobre la mesa— Toma un poco de cafe y respondeme a lo que te pregunte .

—Porque eres tan mandón y con que derecho me hablas asi en mi casa —lo mire para que guardara silencio y acto seguido tomo un poco de café— Tuve problemas con mi esposo... Me confeso que me fallo y me pidio el divorcio

— Come y dejemos el tema hasta aqui —supe que hice lo correcto al ver que bajo la mirada y suspiro— Que haras ahora

—No planeo volver a casa por ahora aunque tendre que hacerlo en algun momento,solo me queda limpiar mas aquí y adaptarlo para vivir aqui un tiempo.