redacción ୨୧ kookgi

★ - dieciocho.

A la mañana siguiente.

Jungkook fue el primero en despertar. Recordó todo lo de la noche anterior y podría jurar que era un sueño...

Escuchar la voz de su novio por primera vez, lo dejó sorprendido, sí. Pero quedó más encantado con escucharlo y ver que confía mucho en él.

—me gusta saber que te animé a hablar otra vez...— enterró su nariz en la curvatura de su cuello y hombro, dejando besos sonoros allí.

Escuchó al gato de Yoon y al mirar al frente: allí estaba el felino, con su expresión neutral de siempre.

—buenos días, Saja— el gato volvió a maullar y le tocó la nariz. —¿Qué?— El gato le dio más fuerte en la cara y él se hizo para tras. Fue allí cuando el gato se metió en ese mismo lugar y empezó a frotarse contra su dueño.

El pálido poco a poco fue despertando. Aferrándose más a los brazos en su pecho.

—mhg... Buenos días, Saja. Ya voy a darte de comer, solo espera un poco— el gato se apartó y fue a la puerta, a esperar sentado. Yoongi se dio la vuelta para encarar a su novio que lo veía somnoliento y con una ligera sonrisa. —buenos días, Kookoo.

—buenos días, Gigi— le besó la nariz ganándose una caricia en su mejilla. —se siente bien no tener que soltarte para buscar el celular o un bloc para decirte los buenos días.

—digo lo mismo, a veces me daban ganas de decirte que dejaras esa porquería y te quedaras en la cama.

—y ya no es necesario— frotó sus narices haciendo que Yoongi sonría mostrando sus encías. —ahora podemos estar un ratito así, hablando sin la necesidad de nada.

—Sí... pero hay que levantarnos, Saja me despertó porque tiene hambre.

—me golpeó la nariz— dijo Jungkook con un puchero.

—aw pobre bebé, un gato le agredió— rió de él haciendo que se enoje. —Ya, bebé. Ven, te doy besito para que mejores— le dio un beso en la punta de su nariz, subiendo al puente y dejando de ultimo un beso que tardó unos segundos en su frente.

—me dio en la boca también— mintió haciendo que Yoongi se sonroje.

—no nos hemos cepillado.

—¿y?

—aish eres un puerco.

—nos pasamos más de 80 mil germenes cuando nos besamos, no te quejes ahora solo porque no nos cepillamos— rodó los ojos. —y si me quieres vas a soportar mi mal aliento.

—yo no te quiero— Jungkook le miró expectante. —no lo voy a decir, ni te ilusiones.

—rayos...

Jungkook hizo mala cara y Yoongi suspiró, resignado.

—no te quiero... te amo, idiota.

Le atrajo hacía él jalando su nuca y unió sus labios con lentitud. Ambos aún estaban adormilados y apenas podían mover sus bocas. Hasta que se quedaron parados, solo succionando sus labios.

—Hum... no quiero salir de aquí— murmuró mordiendo el labio de Jeon quien se subió más encima de él y puso sus manos bajo su camisa de dormir.

Jungkook no respondió puesto que tenía que verlo. Así que solo se centro en morderlo. Sus manos acariciaron la curva de su espalda, sintiendo su calidez.

Las manos del pálido fueron a su cabello, dejándolo más alborotado de lo que ya estaba. Hubo un momento en que Yoongi levantó su pierna hasta subirla a la cadera de Jeon y este aprovechó para subirse sobre él.