Capítulo#23

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Desde ese día empezó mi infierno.
A segundo turno nos tocaba clase con él. En la clase de Matemática no preste la más mínima atención ya que estaba  destruida,al acabarce el turno salí del aula seguida por las chicas,al entrar al baño me agaché en una esquina tapandome la cara con los brazos y las rodillas,las chicas se acercaron a mi para abrazarme pero ninguna hablo,ellas sabían lo que nesecitaba y lo estaban haciendo. A los pocos minutos me ayudaron a ponerme de pie,me temblaban las piernas,las manos,estaba en pleno ataque de anciedad pero al salir del baño me limpie las lágrimas cómo pude aunque sabía que por más que las limpiara ellas hiban a seguir brotando.
Al llegar al aula él ya estaba parado al frente. Yo no me atreví hablar así que las chicas pidieron permiso para entrar. En su clase tampoco copie,me dolía escuchar su voz ya que solo eso bastaba para que se me rompiera más el corazón. De vez en cuando levantaba la cabeza para mirarlo borrosamente debido a las lágrimas,me podía dar cuenta de que él me miraba pero no se atrevía a mirarme a la cara,era tan cobarde,yo seguí llorando mientras tapaba mi cara con mis brazos. Me quería morir pero no podía Dios no me quería llevar con él,quería dejarme sufriendo.
Así pasaron mis días,esa fue la depreción más grande que pude haber tenido y que podre tener,me sentía como en un vació sin final. Los nudillos de mis manos estaban lastimados por tantos golpes que le daba a la pared como si ella tuviera la culpa de algo. Llegué al punto de querer matarme pero las chicas me lo impidieron. La música me recordaba a él así que empecé a odiar la música,empecé a ser callada,practicamente no hablaba con nadie ni de mi familia ni con las chicas,empecé a odiar los colores,las risas,empecé a odiar el amor.
No paraba de preguntarme ¿por qué me había dejado?,¿por qué me había dicho que me amaba,que estaría para mi en todo momento?,¿por qué me había mentido?,¿qué le había hecho para merecer esto?. Tenía tantas preguntas y ninguna respuesta.
Hasta que un día al final de un repaso me atreví y lo enfrenté
–¿Por qué?–le pregunté sin siquiera mirarlo
–¿Disculpa?–dijo confundido
–¿Por qué me hiciste esto?–pregunté otra vez con los ojos llenos de lágrimas y la voz temblorosa
–Lila es mejor que dejes esto–nego con la cabeza
–¡No,no lo dejare sin antes una explicación!....Quiero saber ¿por qué me lastimaste así? ¿Por qué me mentiste diciendome que me amabas? ¿Por qué prometiste cosas que no cumplirias? ¡Joder qué no ves cómo la estoy pasado por tu culpa Luis...–
–Lila yo...–
–¿Tú qué? No quiero más mentiras,tampoco quiero sufrir más,nunca había pasado por esto,ni siquiera me reconozco esta chica no soy yo–dije llorando mientras intentaba mantenerme de pie
–Lila entiendelo,lo nuestro es impocible,nunca te ame entiendelo solo fuiste un juego,es que si no hubieras estado embarazada te hubiera dejado mucho antes–al decir eso recogió sus cosaa y se marchó dejandome sola,no pude sostenerme más quede sentada en el piso con todas mis cosas exparcidas a mi alrededor,él había acabado de matar mi alma,había matado a Lila,ahí solo quedaba un cuerpo con un corazón latiente pero sin un alma para darle color. La anciedad se apoderó de mi no podía ponerme de pie,intente calmarme un poco para poder irme a casa.
Para mi buena suerte era vieres y a la semana siguiente no había clases así que podía tomarme esos días para relajarme y pensar bien todo.

Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora