-¡Pedri!¡Fer! Venid, hay nuevos vecinos y hay que presentarse y darles la bienvenida.-Grita mi madre desde la planta de abajo, lo más probable es que desde la cocina porque sube un olor a croquetas recién hechas.
-Ya vamos mamá.-Grita Fer.
-Venga, el último punto y bajamos.-Digo volviendo a reanudar el partido de tennis de la Wii.
-Rápido, que si no mamá se enfada.-Jugamos el último punto que nos quedaba del partido el cual como no, yo iba ganando al perdedor de Fer.
-Vamos, a llorar Fer, menuda paliza.-Digo antes de apagar la tele y la Wii.
-No voy a decirte nada porque sino te pones a llorar enano.-Me frota la cabeza despeinándome.
-Feeerr, no me despeines. -Me quejo intentando volver a peinarme con los dedos.
-Callate enano.-Me dice y baja las escaleras a lo que yo le sigo.
-Venga chicos, los zapatos que nos vamos a decir hola.
-Vale.-Decimos Fer y yo al unísono yendo a la entrada a por los zapatos. Nos los ponemos y esperamos a mi madre por fuera de la puerta.
-¿Os vais a portar bien y vais a dar buena impresión?
-Sí mamá.-Volvemos a decir al unísono.
-Pues vamos.
Caminamos por la calle un par de portales. Hacía calor, un sol que picaba un poco y en el cielo no había ni una nube. Iba agarrado a la mano de Fer por un lado y a la de mamá por el otro. Mamá se para frente a la puerta de una casa que siempre había estado ahí y que desde hace meses estaba en obras. Mamá me suelta la mano, toca al timbre y se gira a mirarnos.
-Sed educados.
-Lo seremos.-Decimos antes de que la puerta se abra y deje ver a una señora de unos cuarenta años.
-Hola, ¿en que puedo ayudaros?- Dice en tono amable con acento que lo más probable es que sea andaluz.
-Hola, soy Rosy, tu vecina de un par de casas para allá.-Señala en dirección a casa.-He visto que sois nuevos y pues quería presentarme y daros la bienvenida.
-Muchas gracias, soy Silvia un placer.
-No sé si te gustarán pero te he traído unas croquetas, es lo que más vendo en la tasca.-Le tiende la bandeja con croquetas que todavía siguen calientes.
-Son las mejores.-Salto yo sin pensar.
-¿De verdad?-Asiento efusivamente.-¿Cómo te llamas?
-Me llamo Pedro, pero todo el mundo me llama Pedri. y este es Fer mi hermano.-Señalo a mi hermano que saluda con la mano
-Encantada Pedri. Encantada Fer, ¿cuántos años teneis?
-Yo tengo nueve.-Empieza a decir Fer.
-Y yo tengo siete.
-Que bien, tengo tres hijas, dos de vuestra edad y otra que és un bebé, ¿queréis que os las presente y mientras tanto vuestra mamá y yo nos conocemos?
-Sí.-Decimos al unísono
-Pasad.-Dice apartándose dejándonos pasar al patio y cerrando la puerta detrás de nosotros.
Creo que esta historia van a ser capítulos cortitos. Va a haber cambios pero todavía no tengo tiempo para ello. Se que hace mucho que no actualizo en ninguna historia, lo siento mucho pero no tengo mucha inspiración ni tiempo porque estoy a una semana de empezar finales
