Frené en la zona de paradas de emergencia de la carretera, esa pequeña zona de asfalto la cual estaba diseñada para los vehículos que tenían que deternerse en la carretera por algún desperfecto o algo que ocurriera. Ahí estaríamos más tranquilos. Y apagué el motor porque supe que esto me iba a llevar tiempo.
—Me tienes tan enfadada Tom—Bufé cansada apoyándome en mi reposa cabezas del asiento de manera que mi cabeza quedó frente a él—.
—¿Puedo quitarte el enfado?—Preguntó en voz baja acercándose a besarme, pero se quedó quieto antes de hacerlo sin apartar la vista de mis labios—¿Mmm?—Hizo un sonido de labios cerrados conectando su mirada con la mía, esperando una afirmación o una negación de mi parte—.
—Me lo debes como mínimo por haberme sacado de una fiesta en la que me lo estaba pasando de lujo—Me quejé sintiendo mi pelo mojado al recordar la fiesta, al llegar a casa me ducharía—.
Sonrió y me besó cómo no lo habíamos hecho. Tiernamente. Sus labios se movían de manera rítmica y lenta, acarició mi cara con su mano y peinó levemente mi pelo hacia atrás para que no se me pusiera por la cara y me molestase.
No quería besarle así, no quería que me demostrarse un lado tierno de esta manera, quería sentir lujuria y deseo, era mi hermanastro, estaba suficientemente mal que me tuviese ganas como para que ahora encima me demostrase amor sentimental.
Intensifiqué el beso pasando mi mano por su pecho y traté de darle más ritmo comenzando a mover mis labios con más profundidad.
—Joder Ligeia—Jadeó contra mi boca en cuanto mi mano fue bajando por su pecho para llegar a su pantalón—.
—Te odio tanto—Murmuré contra sus labios agarrando sus rastas y tirándole de estas haciéndole echar la cabeza hacia atrás para poder por fin meter mi lengua en su boca—.
Comencé a sentir la saliva molestando, y a pesar de que los besos húmedos me encantaban, me separé de él para poder tragar saliva y limpiarme los labios con el dorso de mi mano quitándome el exceso de saliva.
—Esto está muy mal Tom—Susurré, aún queriendo continuar besándole mientras la parte racional de mí me gritaba que que se suponía que estaba haciendo—.
—Mientras nadie se entere de lo que ocurre no pasará nada—Me dijo mirandome a los ojos, con las pupilas dilatadas de deseo y sus labios rojos de tantos besos—.
Volví a aproximárme a él para volver a besarle, y él no se negó para nada, sino que esta ronda la comenzó él.
Pasó su mano por mi cuello y agarró este con decisión, haciéndome jadear contra su boca por el agarre. Le saqué una sonrisa maliciosa a mitad de beso por haberme provocado ese gesto.
No iba a ser menos.
Puse mi mano en la parte trasera de su cuello para dirigirle como yo quería en el beso, tomando yo esta vez las riendas, a lo que Tom lo aceptó con gusto siguiéndomelo a la perfección.
Estuvimos besándonos de manera profunda y húmeda sintiendo como la temperatura en ese coche comenzaba a subir a trompicones, sin embargo el toque de suavidad era lo que lo hacía aún mejor.
Las caricias que nos dábamos que no eran con otras intenciones más que sentir al otro eran realmente exquisitas. Me excitaba el hecho de saber que realmente me deseaba más allá de mi físico, también porque mi forma de ser era lo que le atraía de una manera tan intensa.
Y empeoraba que yo le había dejado de ver como un hermano, ya que haberle visto con una diferencia de tres años me hacía tenerle como un hombre en vez de que como un niño.
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Next door (+18) {Tom Kaulitz}
FanfictionDónde Tom termina su tiempo en un reformatorio y tiene que volver a su casa con su familia, pero comienza a pasar a algo más que una relación familiar con su hermanastra de la que estaban acostumbrados cuando se dan cuenta de que ambos han cambiado...