Capítulo 5. Fugitivo

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Capítulo 5.



Akutagawa se había liberado de Higuchi y la agencia, llevaba toda la tarde buscando a Atsushi, había ido al orfanato, pero no estaba allí así que decidió volver, encontrar a un tigre gigante blanco era más difícil de lo que creyó.

Había recibido un mensaje por su mentor, Sakunosuke, le pedía urgentemente ir a la agencia, había problemas. Así que Akutagawa una vez más pospuso sus asuntos, - ¿Qué debería temer? Es un enorme tigre, antiguo asesino de la mafia. No es como que lo puedan lastimar fácilmente, pero, - toco su pecho – necesito... encontrarlo.

Akutagawa llego a la agencia, allí vio a sus compañeros reunidos en un círculo – en serio lo sentimos, simplemente no sabíamos

- Cierto, queríamos ayudar. Me siento tan mal por esto

- Está bien – hablo Sakunosuke – déjenlo, entiende, pero tampoco se le vayan encima

- ¿Qué está pasando? – pregunto Akutagawa.

Los agentes lo miraron, algunos incluso giraron sus cabezas, de hecho, fueron Naomi, Haruno y Kenji los que se movieron para dejar a Akutagawa verlo. En cuanto lo vio, corrió a tomar sus mejillas, todos pudieron ver aquella preocupación reflejada en el rostro de su compañero - ¿Dónde estabas? Estaba preocupado por ti, ¿Qué hubiera pasado si te pasará algo? ¿estás loco? ¿Por qué desapareciste así?

Atsushi trago saliva, estaba algo nervioso por aquel agarre, el azabache regreso a su situación y lo soltó – Akutagawa, lo lamentamos – dijo Tanizaki

- Si, confundimos las cosas, no sabíamos de Atsushi

- Ah, yo...

- He hablado con el – dijo Sakunosuke sacando a todos de sus asuntos personales

- Y yo también – hablo el presidente Fukuzawa

- La verdad, es que Atsushi está en peligro, y los mejores en esto somos nosotros – expreso Sakunosuke

- ¿Qué ocurre? – pregunto Akutagawa serio al menor.

Atsushi lo miro igual de serio – el segundo a mando de la port mafia, está suelto... Y el es verdaderamente peligroso...

- ¿vamos a la sala de juntas? – pregunto Sakunosuke

- Agentes, adelante

Sakunosuke le hizo a Atsushi una señal para pasar, el menor trago saliva y fue con ellos. Akutagawa lo miraba de reojo preocupado, aun así, siguió serio. Era trabajo.

Los agentes hablaban sobre lo que podían hacer sobre el caso de Nakahara Chuuya, hasta que le presidente lo notó, solo eran conjeturas, suspiro y miro al ex mafioso – Nakajima – hablo serio haciendo a todos callar – podrías contarnos sobre ¿el manipulador de gravedad?

Atsushi suspiro profundo, claro, nadie quería hablar de un ser implacable como Chuuya. – él, es fuerte – expreso – nadie puede detenerlo si se lo propone, y cuando sucumbía al caos, Dazai-san era el único que podía erradicarlo. – suspiro nuevamente profundo – en mis términos, incluso yo soy una hoja al lado de Chuuya-san, podría cortarme en pedacitos sin dudarlo.

- Así que en verdad es fuerte – expreso Fukuzawa

- Dinos, ¿Qué tan probable es que te unas a él? – cuestiono Kunikida sorprendiendo a todos.

Claro, acababan de enterarse que Atsushi y Akutagawa estaban teniendo un destino por unirse, pero jamás que pasaría algo así, debían anticiparse a todos y solo Kunikida se atrevió a ello.

Atsushi bajo la cabeza, - Dazai-san, me despidió... - expreso dejando un silencio en todos en la sala – pero, Chuuya-san, jamás estuvo a mi cargo, y jamás recibí sus órdenes. Mi único jefe y el único que daba mis ordenes o misiones, era Osamu Dazai. – menciono serio – yo, no pertenezco a la port mafia, solo pertenecía a Osamu Dazai.

Aquellos los sorprendió, pero para Sakunosuke fue todo lo que necesitaba escuchar. – terminemos la junta por hoy – pidió Sakunosuke – tengo hambre.

- Tienes toda la razón, bajemos a cenar

- Iré ordenando

- Te acompaño

Algunos agentes se marchaban, Atsushi entendió aquello, se levanto para tener el agarre de Akutagawa en su manga – hablaste mucho hoy.

- Su mentor me pidió cooperación – menciono

- Es cierto

- ¿Por qué no me dijo que lo encontró? Estaba preocupado – se quejo

- En realidad, el me detuvo – confeso Atsushi – me detuvo justo a tiempo. No soy parte de la port mafia, pero es cierto que, no soy una blanca paloma... - suspiro nuevamente profundo y se inclino hacia el mayor – gracias Sakunosuke-san por detenerme – miro a ambos – volveré al orfanato. Avísenme si necesitan algo

Atsushi se acomodaba su abrigo cuando Sakunosuke lo miro - ¿Qué no escuchaste? – cuestiono. Atsushi lo miro confundido – Quedamos en bajar a cenar

- Ah – Atsushi no entendió así que volvió a hacer una reverencia – que tengan buen provecho

- Atsushi – lo llamo el pelirrojo – cena con nosotros. Todos nosotros

Atsushi se sonrojo – no, para nada. Se-sería extraño

- Atsushi, quédate – pidió el azabache sonrojando más al menor

- De hecho, queremos que te quedes, Chuuya podría buscarte y la agencia es el lugar más seguro, el único que puede protegerte y proteger a la ciudad, así que, a partir de hoy. Quédate

- N-no puedo quedarme, debo avisar al director, y los niños

- Si piensas en ellos, debes quedarte aquí o Chuuya te buscará allá ¿no crees?

Atsushi se quedó pasmado, sus niños, el director Mori, Elise. No podía permitirse algo así - ¿puedo avisarle?

- Si, llama. Los veré abajo

- Gracias

Sakunosuke bajo, dejando a ambos jóvenes en las oficinas, Akutagawa lo miro – entonces ¿de qué te detuvo mi mentor?

- Ah, aam... - Atsushi estaba apenado por ello – yo, te vi con esa chica comiendo y como escuche de tu cita, bueno yo iba a hacer no sé que iba a hacer solo tenía planeada entrar y arruinar todo.

- ¿estabas celosito? – pregunto con una enorme sonrisa en su rostro

Atsushi estaba molesto, pero más que nada sonrojado y avergonzado - ¿qu-que te pasa agente? ¿eres un desvergonzado? Como podría yo sentirme así, estás loco

- Si estabas celosito

- N-no, ya déjame en paz

Akutagawa tomo su cintura sin dudarlo y lo acerco a él, ambos se sonrojaron por ello, pero el mayor no lo soltó. – esto me gusta. – añadió para acomodarlo en su pecho y acariciar su cabello – quedémonos así

- ¿N-no te esperan?

- Si, nos esperan, pero entenderán...

Se habían quedado así, abrazados en medio de las oficinas de la agencia, no importaba nada más en ese momento, solo ellos. Ni siquiera aquella figura que miraba desde lejos con preciosos ojos color azul brillante. 


...

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Destinados - Shin Soukoku/AkuAtsu BEATSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora