BAD EXAMPLES/Tom kaulitz

capitulo 5

Me desperté cuando sentí luz en mi cara, debí cerrar las cortinas antes de dormir, abrí con mucha dificultad los ojos, no había dormido muy bien, Bill me había pateado toda la noche, no se para qué quería que lo abrace si me iba a terminar casi tirando de la cama

Estire mi brazo hacia mi mesita de luz y tome mi celular, cuando lo prendí sentí que me quedaba ciega por la luz de este, como pude note que eran las 10 de la mañana, ¡había dormido solo cuatro horas!

Voltee a ver a Bill quien estaba tapado con las cobijas hasta la cabeza, era una mañana un poco fresca, me senté en la cama y me estire, era la mejor sensación del mundo

Mire por última vez a Bill antes de levantarme, me puse mis pantuflas del gato Garfield, me puse un buzo bastante grande y camine hacia la puerta de mi habitación para ir a la cocina

Cuando llegue me encontré que no estaba sola, Tom estaba tomando un café, se veía bastante mal, apenas mantenía los ojos abiertos, tenía grandes ojeras y seguía con la ropa de la fiesta, supuse que yo estaba igual o incluso peor, ya que no me había desmaquillado así que seguro parecía un mapache

-te ves terrible-me dijo después de que haya entrado a la cocina

-tú no te ves mejor- le dije mientras caminaba a prepararme un café para despertarme un poco- no creí que estarías despierto a esta hora, estabas tan borracho que pensé que dormirás hasta las cinco de la tarde- le dije mientras luego de servirme el café caminaba hacia la mesa donde él se encontraba sentado

-Creí lo mismo, pero no podía dormir si estaba casi en el piso- respondió mirándome, seguramente sabría que ni siquiera nos preocupamos por acomodarlos en la cama

-en nuestra defensa, no creímos que les moleste si ni siquiera estaban conscientes- dije dándole el primer sorbo a mi café, mi boca se llenó de ese gusto entre dulce y amargo, saciando mis papilas gustativas y despertando mi sistema

-oh supongo que te tengo que agradecer- dijo de forma sarcástica

- no me molestes, recuerda que todavía puedo gritar que bailaste britney Spears- amenace

-Perdón- dijo rápido, seco y levantando las manos

Reímos un poco, era de las primeras pocas veces que me reía junto a Tom sin que el este borracho, ahora que lo veía mejor, tenía una sonrisa realmente linda, sus dientes eran perfectos, sus ojos se achicaban de una forma muy linda cuando reía, se lo veía auténtico y despreocupado

-disfrutas la vista?- y ahí volvió el Tom de antes, pensé

-uy sí, ni te imaginas- respondí con sarcasmo- ya deja de pensar que me gustas o algo por el estilo- le dije

Tom sonrió de forma egocéntrica- no lo pienso, sé que te gusto megan- dijo de forma divertida

-ya deja de molestar- le dije tirándole un cereal a la cara

-cierto, a tu novio no les gustará-dijo,¿novio? Pensé, luego me acordé de que nunca le había dicho cuál era mi relación con Luis y luego que escucho llamarlo «amor» así que debió pensar que estamos juntos

-claro, cuando tenga novio te digo si le gusta o no- respondí sacándole importancia

- entonces ese chico…- fingió como si tratara se acordase de su nombre- Matt, no es tu novio?- terminó

-primero que nada, se llama Luis y segundo, no, no es mi novio, es mi mejor amigo de la infancia y tercero no sé cuál es tu fascinación por saber cuál es mi relación con él - termine de decir para seguir tomando mi café

- no tengo una fascinación, solo era curiosidad, llegaste hablando de él y te hiciste la misteriosa cuando pregunte quién era-dijo con simpleza mientras se achicaba de hombros

Se hizo un silencio en la cocina, pero no era incómodo, Tom estaba mirando hacia adelante, parecía que pensaba en algo, me quedé observando su perfil, su mandíbula marcada, su nariz recta y respingada, su labio inferior más gordo que su labio superior, sus rastas, dios sí que tenía favoritos

-si no quieres que piense que gustas de mí, deberías de dejar de mirarme tanto-dijo mientras sonreía y volteaba su mirada hacia mí

Voltee mis ojos, le di un último trago a mi café, me levante de mi silla, deje la taza en el lavaplatos y salí de la cocina sin mirar a Tom, pero pude oír cómo soltaba un suspiro seguido de una risita

Subí las escaleras y me encaminé hacia mi habitación, no sin antes pasar por el cuarto de Gustav y notar que seguía dormido, luego fui a ver George quien también seguía dormido, luego recordé que a mis padres no los veía desde ayer, pero recordé que habían dicho que se irían una semana a casa de mi abuela, escuché pasos detrás de mí, cuando mire para ver quién era, era Tom quien me miraba con una sonrisa, luego se dio la vuelta y entro al cuarto de invitados

Camine hacia mi habitación, cuando entre Bill estaba sentado en la cama mientras se rascaba los ojos, me miró y sonrió un poco, se veía que estaba muy cansado todavía, me posicione en la punta de mi cama y me deja caer hacia adelante

-¿en dónde estuviste? Me desperté y no estabas- dijo

-estaba en la cocina, tomando café y…- me callé

-y…?- pregunto pícaro- estuviste con Tom-termino de decir

-tienes sueño?-cambié de tema, él solo rio y asintió con la cabeza- sigamos durmiendo entonces- dije para luego acomodarme en mi cama

-bien, pero luego hablaremos- puso como condición

-solo si no me pateas cuando duermas- le dije sabiendo que sería imposible que no lo haga

-yo no pateo-se quejó

-Aja, si claro- dije para luego darme la vuelta y darle la espalda - te toca abrazarme-

-ya te dije, ese es trabajo de Tom- dijo Bill dándome la espalda y rio cuando sintió una patada en su espalda baja

Me quedé pensando en lo que había pasado con Tom en la cocina, más bien en todo lo que había estado pasando con Tom, desde ayer que lo notaba cada vez más raro, mejor dicho, notaba más tensión entre nosotros y me veía bastante atraída a mirarlo, no estaba enamorada, no me lo podía permitir

No después de mi primera y última relación dónde mi ex me engaño con quien se supone era mi mejor amiga, el día de nuestro aniversario, Luke fue mi primer amor, nos pusimos de novios cuando tenía catorce años, sentía mariposas cuando lo veía, pero esas mariposas murieron junto con mi ralcion después de su infidelidad

Y después de tanto pensar logré quedarme dormida